Un hombre abre la puerta casi destrozándola con una patada y me mira mientras me apunta con un arma.
-De pie
Me levanto con las manos alzadas.
-¿Quiénes son? -susurro
-Soy de equipo de seguridad de Mr. Long, ahora vamonos mocosa
Me toma del brazo con fuerza y empieza a caminar conmigo detrás de él.
-No llegarás muy lejos -susurro
-¿Tu crees? -me mira con arrogancia -Hemos matado a todos, seguro que ya llegue bastante lejos
-¿Por qué hacen esto?
-Se han escapado, y Mr. Long te quiere en su presencia
<<¿Es enserio? ¿Acaso estaba haciendo todo esto por celos?>>
Salimos de la mansión, estábamos caminado por el jardín cuando resuena por todo el ambiente el sonido de un disparo. El hombre que me sujetaba me soltó y cayó al piso muerto con un temblor.
Me giro y veo a Bentley manchado de sangre y guardando su arma.
Camino hasta donde está y percibo que se trastabilla, paso rápidamente su brazo alrededor de mi y ayudo a darle un poco de equilibrio.
-¿Te encuentras bien? -susurro mientras lo miro
-Me está sangrando la herida, me dan golpeado mucho el abdomen
-Vamos a la casa para curarte
Llegamos hasta el sillón de la sala donde tres hombres cargaban y arrastraban siete cadáveres, dejando un rastro de sangre por todo el piso.
-¿Balián?
-Él y mi padre salieron de la casa desde hace rato -suspira -Han entrado como supuestos candidatos para formar parte de la seguridad, recomendados por Mr. Long
-¿La familia Long y la familia Boulanger eran aliados no?
-Sí, hasta que murió el padre de Tirsa -me mira -O como tu la conoces, la actual Mr. Long
-¿Dónde hay un botiquín?
-Aquí tiene uno -me dice un hombre lleno de sangre
-Gracias
Asiente asombrado por que le he dado las gracias.
-Necesito que te quites la camisa -le digo a Bentley
-Pues quítamela -dice con media sonrisa
Lo miro con seriedad y finge inocencia.
-No puedo hacerlo, me duele
Tomo el dobladillo de su camina y con cuidado comienzo a sacarla, la gasa que cubría su herida estaba empapada de sangre.
-Recuéstate por favor -le digo
Bentley se deja caer al sillón y respira con dificultad.
Quito la gasa y con una limpia comienzo a remover la sangre, lo hago con delicadeza y utilizo después un desinfectante, por suerte la herida dejó de sangrar y los puntos que le habían puesto no se rompieron.
-Tienes las manos frías -susurra con los ojos cerrados
-Lo siento -susurro también
-Tienes las manos muy delicadas, serías un buen médico
-¿Volveremos a eso?
-¿Por qué no?
-No me veo como médico
-Te da miedo
-¿Qué?
-Al ser medico, tu familia no te permitiría alejarte de ellos, pues serías tú la que cuidara de la familia y de los hombres más cercanos -abre los ojos y me mira profundamente -¿Me equivoco?
Yo simplemente bajo la mirada y termino cubriendo la herida pidiéndole que se siente para que pueda vendarlo, porque se que tendrá muchas cosas por hacer.
-Listo
-Gracias Daelyn
-De nada Bentley
-Lamento haberme portado así cuando me pediste que no te dejara sola
-No lo lamentes, tu y yo no somos nada, no tendrías porque quedarte a consolarme cuando están matando a tus hombres de confianza
-Perdí a diez hombres
-Lo siento mucho
-Sé que si, he visto como tratabas de ocultar tu rostro horrorizado por los cadáveres
-Me aterra a veces la maldad que puede tener un ser humano dentro de si mismo
-¿Empezamos por tu familia?
-Son terribles personas, no te lo voy a negar
-Y tu eres tan distinta a todos ellos, que me resultas fascinante
-¿Así como una ratón de laboratorio?
-Exactamente
-Ya estoy acostumbrada a que la gente me vea de esa manera, por no poder pertenecer a todas las personas que me rodean -susurro y me doy media vuelta
-No irás a ningun lado, hay un hombre fugitivo que huyó en cuanto empezaron los disparos, corres peligro y no es que me importe tu vida, pero te necesitamos todavía respirando
-De acuerdo, ¿A dónde vamos?
-De caza -dice con una sonrisa terrorífica
-Todo listo señor Bentley -dice el hombre que me dio el botiquín
-Andando
Vamos caminando a paso apresurado hasta unas camionetas blindadas de color blanco resplandecientes, como si acabara de salir de la agencia.
Bentley se monta frente al volante y me ordena que tome el lado del copiloto. Acelera con otras tres camionetas detrás de nosotros.
-¿Vas a cazar al que salió corriendo?
-Sí
-¿Vas a matarlo o a torturarlo?
-¿Que prefieres que haga?
-Mátalo
-¿Por qué?
-Prefiero que le des una muerte rápida, no lo hagas sufrir -lo miro -Él solo sigue ordenes, evidentemente no estaba de acuerdo con todo esto, sino habría luchado y disparado
-Huyó como un cobarde
-Porque sabía que iban a perder
-Aún así es el enemigo
-Y por eso no te estoy diciendo que le perdones la vida, solo le dieron una orden y él la acató, quiso arrepentirse pero era tarde
-¿Has matado a alguien?
-No voy a hablar de eso -me encojo en el asiento
-¿Torturado?
-Bentley no quiero hablar de eso
-Estoy seguro de que no has matado a nadie, pero si has torturado -dice mientras suspira -No te culpes seguramente estabas siguiendo ordenes también
-Todos seguimos ordenes, solo deja de hacerlo los primogénitos que pasan al poder, a ser los Mr. de las familias, los que ahora dan ordenes
-Lo sé abejita
-Regresaremos a ese apodo
-Sí, eres la abejita que sigue las ordenes
Y tenía razón siempre acataba las ordenes y hacía lo que me pedían porque tuve miles de castigos cuando era niña, cosas que de cierta forma de dejaron con un trauma que hasta la fecha no puedo superar.
-¿Te has acordado de algo no es así?
-Quizá
-Pero no me lo dirás ¿Cierto?
-No
-¿Y si te lo ordeno?
-Lo siento pero no eres la abeja reina de esta abejita -le digo con una sonrisa
-Buena jugada -dice riendo
Veo a lo lejos una sombra corriendo ahora con gran dificultad, supongo que después de todo, el hombre al que están cazando ya se ha cansado de tanto correr.
-¿No llegaron en carro o camioneta? -le pregunto a Bentley
-No, entraron a pie -me mira
-Entonces estaban completamente seguros que los matarían
-Sí, Mr. Long mandó a sus hombres a una muerte segura -sentencia
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