NovelToon NovelToon
Reina Luna

Reina Luna

Status: En proceso
Genre:Hombre lobo / Romance paranormal / Pareja destinada / Mundo de fantasía
Popularitas:15.6k
Nilai: 4.1
nombre de autor: Valeria Romero

Aitana, es una hermosa joven que acaba de cumplir su mayoría de edad, vive al norte del reino Greyson, en la manda de luna azul, creció rodeada de amor por su familia y manada, desde niña ha estado enamorada del futuro Alfa de su manada, pero el destino tiene otros planes para ella.

Byron Drave Greyson, el actual rey Alfa del reino Greyson, tiene veintisiete años de edad, a los quince años subió al trono después de la trágica muerte de su padre y madre, después de subir al trono tuvo que hacerse reconocer y mostrarles a las manadas del reino que era digno de ser su rey, a pesar de su corta edad, aunque muchos Alfas estuvieron en contra y aliaron a reinos enemigos otras manadas lo aceptaron y lo ayudaron a que el reino creciera y se volviera lo que era ahora, uno de los más poderosos, pero al estar enfocado en proteger a su reino se olvidó de algo muy importante, encontrar a su mate, aquella quien sería conocida como Reina Luna.

NovelToon tiene autorización de Valeria Romero para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Nervios

Aitana había bajado a cenar a aquel enorme comedor, miro a los lados, solo habían empleados que la trataban con demasiada formalidad, aunque había intentado hablar con algunas de las mujeres empleadas, ninguna de ellas dejo de ser formal y tratarla como Reina Luna, miro el asiento principal del comedor, le pertenecía al rey por supuesto, no lo había visto aún y se sentía desanimada, había leído que una vez encontrabas a tu pareja no querías separarte de ella y hacías hasta lo imposible para estar con ella, incluso lo comprobó con Alain y Sam, desde que se encontraron no querían separarse, hasta lo notó en Damián y Melissa.

- ¿Será por su sangre licántropo? – Cuestiono en susurro, sin notar que los empleados hacían una reverencia a su rey, quien llegaba al comedor.

- Sirvan- Ordeno, sacando de sus pensamientos a Aitana, ella lo miro sin poder creer que estuviera ahí- ¿Qué pasa? – Pregunto al notar su mirada en él.

- No, nada- Dijo bajando la mirada nerviosa, comenzó a comer aquella deliciosa comida, la cena era totalmente silenciosa, quería decir algo, hablar con él, conocerlo, pero no sabía por dónde empezar y mucho menos al recordar su última conversación, suspiro pesadamente, ella no era así, se consideraba una persona muy sociable, siempre rodeada de personas, siendo ella el centro de atención y no solo por su belleza, no entendía porque con él, siempre se ponía nerviosa, su mente estaba en blanco y no sabía cómo empezar una conversación con él.

- ¿Reina Luna? - Dijo una de las empleadas, Aitana levantó su mirada a aquella chica, ella señaló la botella de vino - ¿Gusta una copa? - Preguntó con formalidad.

- No gracias, no tomó- Dijo con una sonrisa, no estaba acostumbrada a tomar alcohol, aunque sus padres no se lo prohibían, miro que a Byron le servían en su copa sin siquiera preguntarle, él tomo un sorbo de ella, miro como sus labios se unieron a aquella copa, aquellos labios perfectos, carnosos y que besaban tan delicioso, tragó en seco al darse cuenta de lo que pensaba.

- ¿Estás bien? – Pregunto Byron dejando la copa sobre la mesa, ella asintió nerviosa, pero Byron miro a los lados, los empleados varones se cubrían la nariz- Retírense- Ordeno con

autoridad. - ¿Tomaste tu medicamento? – Pregunto de nuevo, Aitana lo miro confundida- Tu aroma se hizo fuerte - Terminó, también a él le afectaba aquel aroma y lograba controlarse lo más posible.

-No, ya no sentía las molestias, así que pensé que ya no era necesario- Dijo nerviosa, mirando a los lados, solo se encontraban ellos dos.

Byron suspiró y se puso de pie, se acercó a ella y la hizo levantarse, ella lo miro asustada, él sintió como su cuerpo temblaba con solo tocarla, la cargo como si se tratase de un costal de papas y la llevo hasta la recamará, ahí la bajo y se encamino hacia el buro que estaba justo al lado de la cama, tomo el frasco de pastillas y le dio un par en sus manos, después le paso un vaso con agua, ella tomo aquel medicamento.

-No debes dejar de tomarlas, aunque te sientas bien, debes seguir tomando las pastillas – Dijo de manera autoritaria- Tu celo se podría descontrolar de nuevo, sino hubiera estado contigo en estos momentos, los empleados varones pudieron intentar hacerte algo- Explico mientras le quitaba el vaso de agua.

- Lo siento, pero, ¿Cuánto tiempo debo tomarlo? – Pregunto dudosa, lo que recordaba de sus clases era que solo debía tomarlo aquel medicamento durante su celo, aunque según recordaba el celo duraba solo unos días, escasos tres o cuatro días.

- Eres mi pareja, sabes mis orígenes ¿No? - Preguntó, ella asintió- Bien, pues sufrirás algunos cambios, entre ellos está tu celo el cuál no se quitará después de tres o cuatros días como es normal en otras lobas- Explicó, Aitana lo miro con sorpresa, miro aquel frasco que tenía en manos de ese hombre.

- ¿Siempre tendré mi celo? – Pregunto con sorpresa, no quería depender de aquellos medicamentos, pero no quería tener aquellos síntomas que podían ocasionarle molestias y deseos a los que no estaba acostumbrada, tampoco quería provocar a ningún hombre con el dichoso aroma que decían que desprendían.

- Si, bueno, solo hasta que te marque, después solo lo tendrás en temporadas... - Dijo sin problema, Aitana suspiró.

- ¿Entonces me tiene que marcar? - Pregunto nerviosa, el asintió.

- Si, pero sabes qué debo hacerlo durante el sexo ¿No? – Comentó, ella asintió - ¿Quieres hacerlo ya? - Preguntó con seriedad, ella negó ante aquella pregunta.

- Lo siento, es que…no estoy lista, es decir…casi no lo conozco. – Susurro nerviosa mientras bajaba la mirada.

- Entonces no olvides tomar el medicamento diario y de preferencia carga algunas pastillas contigo, no quiero que se repita un incidente como el del comedor. – Dijo entregándole el frasco en sus manos, Aitana asintió nerviosa, su corazón le dolió un poco por la forma en la que les dijo aquellas palabras, él entró al baño y se encerró.

Aitana miro aquel frasco y suspiro pesadamente, se dirigió al armario, tomó otra sudadera de Byron y se la puso como pijama, se acercó al tocador y cepillo su cabello, lo dejo suelto y después salió del armario, Byron al mismo tiempo salía del baño, con solo una toalla cubriendo de la cintura hacia abajo y otra alrededor de su cuello, la miro de pies a cabeza aquella chica se veía hermosa con aquella sudadera, la reconocía era suya, su mirada se centró en sus piernas más bien en sus muslos que apenas eran cubiertos por aquella sudadera, noto que estaban más gruesos y fornidos, continuo levantando su mirada, su caderas un poco más anchas, su observación finalizo en sus senos, aun cubiertos por aquella enorme sudadera, el bulto en ellos era más grande. Aitana camino hacía la puerta del baño, paso a lado de él, Byron aspiro el aroma que aun desprendía, giro su mirada hacia a ella y sus ojos azules se centraron en su trasero, el cual también estaba teniendo cambios notorios, sonrió y maldijo en su mente, incluso ahora deseaba tocar y devorar aquel maravilloso cuerpo de su pareja.

Aitana se encerró en el baño se miró al espejo, su rostro estaba tan rojo, incluso sus orejas lo estaban, aquella mirada de Byron la puso mucho más nerviosa, miro sus manos estaba temblando y su corazón latía con fuerza, esos ojos azules la miraban con tanto deseo, no le desagradaba para nada, pero aun así se asustaba pues no sabía cómo reaccionar ante eso, recordó la conversación de hace unos minutos, no quería depender de medicamentos, pero no tenía opción, o si lo tenía, pero no podía evitar sentir miedo, tenía poco conocimiento sobre el sexo, lo básico que les enseñaban en la escuela y aunque era muy sociable en su manada, muy pocas veces puso atención a esas pláticas que sus amigas tenían sobre el tema.

-Debí prestar atención- Susurro molesta, pensaba que no era necesario aprender sobre ello más de lo normal, pues su pareja sería alguien que ella conocía o eso creyó hasta lo que paso hace poco y ahora ahí estaba ella, siendo la pareja de un total desconocido y no cualquier hombre, era nada más y nada menos que el rey de alfas del reino Greyson y para su edad debía ser un hombre muy experimentado en aquel tema.

Byron miro a la chica salir del baño, empezaba a preocuparse que hasta pensó en entrar para ver si estaba bien, había tardado encerrada, notó que su rostro estaba rojo hasta las orejas, con nerviosismo y pasos dudosos se acercó a la cama y se acostó del lado al que partencia, estaba en la orilla parecía que trataba de alejarse lo más posible de él, le dolió un poco porque él solo quería tenerla lo más cerca posible, tenía que entender, su pareja solo era una adolescente de dieciocho años y sobre todo virgen e inexperta, aunque eso no le desagradaba del todo, pero su rechazó no le gustaba, ella lo había dicho apenas y se conocían, pero eran parejas destinadas, eso era lo único que debía importarle en esos momentos a ella, incluso aunque no se conocieran, sus destinos ya estaban unidos, aunque podría ser debido a sus sentimientos hacia ese joven alfa, su ira creció de tan solo recordarlo, tal vez en esos momentos pensaba en él, suspiro pesadamente, Emilio tenía razón los celos eran malos.

-Si quieres que duerma en otra habitación solo dilo…- Dijo sin pensar mucho, Aitana se giró para quedar frente a él, Byron la miro con aquellos ojos azules cruzando con aquellos hermosos ojos oscuros grises que lo miraban con sorpresa.

- Lo siento, es la primera vez que estoy con un hombre, duermo…ambas- Corrigió torpemente.

-Es la segunda, dormí contigo hace un par de noches- La corrigió, Aitana asintió ante sus palabras.

-Pero, cuando usted se acostó yo ya estaba dormida, por lo que no me di cuenta hasta la mañana siguiente- Explicó.

- Entonces… ¿Te molesta que duerma aquí? - Preguntó temiendo de escuchar su respuesta.

- No, anoche no durmió aquí, por lo que sentí la cama muy espaciosa y solitaria, pero hoy se siente acogedora, aunque no puedo evitar sentirme nerviosa… - Explicó con timidez, Byron sonrió ante aquella explicación, hizo que su ira y sus celos desaparecieran.

- Entiendo. - Dijo mientras la tomaba en sus brazos y la atraía a él, Aitana se tensó ante aquella acción, pero no lo rechazó. – No volveré a dejarte sola en las noches- Dijo y dio un beso en su cabeza.

- Gracias- Dijo en susurro, mientras se acunaba en el torso desnudo de aquel hombre.

1
Carolina Sánchez
La verdad no me párese que este incompleta la historia 😵‍💫😡
Carolina Sánchez
Se puede saber cada cuando actualiza???? 😔
Sila Kiraz
querída autora solo un consejo deberías de leer un poco .as de hombres lobo , la verdad de momento aburre la actitud que tienes sobre Aitana y Byron , al ser hombres lobo son demasiado sexuales y ese lado los sobrepasa pero bueno tu novela es muy interesante 😊😊 gracias por tomarte el tiempo de actualizar
Valeria Romero: Si investigue sobre lobos pero no quise a pegarme tanto a ciertos puntos sobre todo en lo sexual. Agradezco tu comentario. ☺️
total 1 replies
Kathia Pradel Vaca
me gustan está historias son muy buenas
Chann🥰
Que dura esta la historia❤️
rina marcela vergara martinez
Normal
rina marcela vergara martinez
Muy malo
Belkys Soto
actualizar diario, actualizar diario, actualizar diario, actualizar diario
Belkys Soto
actualizar diario, actualizar, actualizar, actualizar, actualizar, actualizar, actualizar
Nancy Galvan
Excelente
Nancy Galvan
Malo
Mitsuki G
Me preguntó por qué está Irina al tocar a la madre de Aitana sintió eso será que es una hija perdida de su madre y esos quiere decir que son hermanas o será que Aitana no es hija biológica si no es adoptada al perder a su hija biológica que es Irina o que será eso que sintió es otra cosa pero me da gusto que Aitana supo contestar a los que estaba indeciso por su llegada acostumbrados a Fabián y a ver si esa dos hacen algún travesuras cuando vaya a ver a Byron
Teresa Moran Guerrero
Por fin va a ceder responsabilidades, como le corresponde a su mate, y bueno es que hayan decidido realuzar su unión fisica , no solo por las leyes 😍😍❤️❤️
Teresa Moran Guerrero
Eso sirva como ejemplo, para Byron, no puede tener en una burbuja a su mate, tiene que darle también responsabilidades
Teresa Moran Guerrero
Cada vez que está a punto de entregarse a Byron, surge algún inconveniente, que mala suerte, pero ahora hay que defender la manada y a su Luna
Teresa Moran Guerrero
Aitana, ya ejerció su poder sobre Gray, debería presentarle a su loba a Byron y Gray, creo que ella sería la solución al encargo del Rey de Reyes
Teresa Moran Guerrero
Aitana, no debe esperar mas, i él no se decide es porque ella no lo deja continuar por temor, pero debería ser mas sincera con él
Teresa Moran Guerrero
Es bueno saber el parentesco del Rey de Reyes con Byron y saberse protegido, aunque él tenga que atenerse a cualquier decición, tomada por su Rey, sabe que no procedería injustamente
Teresa Moran Guerrero
Espere.os quel Rey de Reyes, escuche a Byron, la falta de respeto del otro Rey y libere a la Luna de ese malvado, de la propuesta y amenaza de este ser vicioso, malacostumbrado a conseguir y obtener lo que quiere con smenazas y abusos
Teresa Moran Guerrero
De verdad Byron, tiene mucha paciencia, para no penetrarla después de semejante acción. Yo creo que ya está preparada, sino que como es virgen, siente verguenza y temor
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play