¿CÓMO QUE ME CASARÉ EN 4 MESES? Sí, esa soy yo gritando.
Un gusto, soy Mía Guzmán, hace un momento estaba sentada en una clase junto a mi mejor amigo, cuando el director interrumpe para sacarme de la clase -En ese momento agradecí al cielo por eso, realmente la clase estaba aburrida, pero luego me arrepentí de haberle agradecido al cielo por tal cosa- Nos dijimos a su despacho al entrar fije mi vista en esas 2 personas ¿Que hacen aquí? ¿No estaban de viaje? ¿Por qué volvieron antes? Hola hija -Dijo mi padre- bueno seré corto y preciso en 4 meses te casarás para salvar la empresa que está a punto de irse a la quiebra -¿Que irónico no?- ¿No hay otra opción? -Mi padre respondió serio- No, no la hay. -Asies señores la famosa mía Guzmán se casará por conveniencia, lo que no sabía es que me enamoraría de él-
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Reglas y más reglas
—Mía se levanta— Me opongo a tus 3 reglas…
—¿Qué harás? ¿Qué dijiste? —pregunta Erduard-
—Como escuchaste me opongo —lo mira enojada-
—Genial cancelamos el matrimonio eso significa cero ayuda financiera a la empresa de tu padre, adiós lujos, adiós empresa…
—eres un monstruo
—¿Cómo me acabaste de llamar?
—Cómo oíste monstruo o ¿tienes problemas auditivos?
—Por suerte mis oídos están bien, pero lo que no estará bien si no aceptas mis reglas será la empresa de tu padre, si no me equivoco mi padre fue el único que quiso ayudar a la empresa de tu padre, si no tiene la ayuda de mi padre no la tendrá de nadie y ándate despidiendo de la empresa y de los lujos…
—Oh eres un incompetente si no fuera por mi padre ya te habría golpeado —exclama mía-
—Que ruda eh bueno como yo soy un hombre de palabra traje un contrato con las 3 reglas como vez claramente la número 3 se mantiene igual que podrás ver a Diego siempre cuando me complazca —Recalca Erduard-
—Jajajá contrato ¿Qué es esto un negocio de reglas? Porque si es así yo igual quiero modificar las reglas —propone mía-
—Adelante modifica veremos que puede hacer una niñita como tú —La mira con desprecio-
—Primero la regla número uno yo saldré cuando me plazca, pero dejo lo de uno de tus hombres, solo por mi seguridad —le saca la lengua-
—Interesante sigue —le hace seña para que continúe-
—La segunda me da lo mismo para qué quiero entrar a una oficina tan aburrida —Rueda los ojos-
—Para observarme como trabajo obvio para que más.
—Bueno tendrás que conformarte con algún cuadro o pintura mía que te mire,
—Oh muy inteligente termina con la última, esta es interesante
—Esta es la más importante yo podré ver a Diego cuando yo quiera, sin tener que complacer a nadie y menos a ti —Hace cara de asco-
—me parece todo bien excepto la última, acaso tú tienes algo más con Diego que lo quieres ver tan seguido
—Jajajá Diego es mi amigo desde la infancia, ha estado en momentos difíciles cosa que tú no hiciste bueno te perdono en eso porque aún no te conocía, pero él sabe todo sobre mí y mayormente no me pone reglas para ser su amiga…
—Oh ya veo primero no necesito tu perdón y segundo desde ahora yo seré tu acompañante si tiene que contarle algo a alguien será a mí y no a Diego
—Ja, ja, ja prefiero aguantar a que contarte algo a ti —desvía la mirada-
—Está bien tampoco quería escuchar tus problemas —exclama erduard molesto-
—Al menos mis problemas son interesantes en cambios los tuyos deben ser tendré que teñirme de nuevo mi cabello ya se nota que no es Natural o que dolor se me corrió el lente de contacto de ojos verdes —Mía se ríe-
—Muy graciosa mía, pero ninguno sé esos son mi problema, te propongo otra cosa, déjame conocer a Diego y la regla número 3 queda como tú la dejaste —Sonríe-
—¿Qué estás loco? ¿O qué? Nunca dejaré que conozcas a Diego, solo sabrá que me casaré por negocios y no por amor
—Ay niñita ingenua todos se casan pro negocios el amor viene después
—Te equivocas hay muchas parejas que se casan por amor y no por conveniencia, eso es ridículo que el amor viene después.
—Como sea ya te di otra oferta ahora si me disculpa saldré a tomar aire —Erduard, sale por la puerta principal-