Lía Allen apenas logra escapar de la muerte a causa de su media hermana.
Ian Greco un magnate de los negocios esta decidido a encontrar a la mujer que lo tomó como pro***tuto.
Cuando la encuentra, todo cambia dos leones no pueden vivir en la misma montaña.
¿Pueden dos personas, cuyo primer encuentro fue desastroso, convivir como dos adultos civilizados? ¿Puede el amor surgir entre ellos? ¿Puede haber un final feliz?
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#23. Poner en marcha el plan
La persona que grita como desquiciada es Sofía Rangel, en estado de ebriedad, ya no quedaba nada de la mujer arrogante que se presentó en la villa el otro día.
No tuvo tiempo de acercarse tanto, Red y el resto la detuvieron:"Red, vamos a la empresa"
Nadie dijo nada, fue un momento incómodo, Liliana y Gina escucharon los gritos de la mujer al ser arrastrado lejos de ellos.
Ian sacó su portátil y empezó a trabajar en lo suyo debido al festival tuvo que posponer algunos trabajos importantes.
Liliana no se opuso a su decisión, Gina en medio hacía gestos y riendo, ya que Liliana la estaba ayudando a quitar el maquillaje y los brillos que le pusieron con vestuario.
No pudo evitar pensar en las madres de familia. Logro escuchar todo lo que esas madres perfectas decían.
(Típica de madres irresponsables llegar solo el día)
(se dice ser madre, y apenas la conozco)
(Siento lástima por la niña al tener esa clase de madre)
(De esas madres que prefieren ir de compras y gastar el dinero de sus esposos)
(De seguro le traen todo a su casa)
(Típica pasar todo el día es spa y tratamiento, no piensan en sus hijos)
(La institutriz es la que siempre viene, ¿trabaja acaso?)
Se preguntaba como pueden juzgar a alguien sin conocerla.
Acaso, ¿ellas son madres perfectas?, donde está el manual para seguir las indicaciones.
Su miedo más grande era de ser madre y ahora de no ser una buena madre.
Aún no era madre y ya fracasó como madrastra.
Que se necesita para ser una madre. Todo el camino no paraba de cuestionarse internamente.
¿Tiene que dejar de hacer sus cosas por ser madre 24/7?
Lo único que quiere es que Gina esté bien y feliz.
Gina se queda dormida en su pierna, al volver la cara ve a la pequeña sosteniendo su mano.
Aun dormida, seguía sosteniendo su mano, se preguntó que hizo para merecer el cariño de esta pequeña. Le dolió el corazón al no poder ser la madre o la persona adecuada para Gina.
¿Hay una madre perfecta?
Pensó para sus adentros y recordando a Amika, ella siempre la dejaba sola.
Los recuerdos que tiene de su madre era que ella trabajaba mucho, ella nunca fue a ningún festival de ella.
Al llegar a la entrada principal, Gina se despierta de su siesta.
Liliana sale del auto, carga a Gina antes que Ian llegue a ellas.
De un momento a otro culpo a Ian por el cambio tan grande que dio su vida.
Ella perfectamente pudo seguir con su vida después de acostarse con él.
Son otros tiempos y gran porcentaje de mujeres no llegan vírgenes al matrimonio como en tiempos antiguos.
Quería hacerle entender a Ian que ella sola puede cargar a Gina.
Con tacones de 12 cm entra con la cabeza en alto y segura de sí misma, Ian pudo ver su cambio.
Se pregunta si fue por Sofía, él trata de alcanzarlas.
"Quiero muffin de chocolate mami"
Ya paso la hora de la comida, Gina quería su postre.
"Iremos a la cafetería" se detiene para informar a Ian.
"Con cuidado, en un momento las alcanzo"
Ambos tomaron caminos diferentes, Ian le indico a unas de las chicas de recepción de seguirlas a la cafetería, Liliana no dijo nada porque Gina está con ella.
Cambio su estado, los otros no tenían la culpa de su molestia.
Logra forzar una sonrisa, al verla sonreír así no pudieron evitar temblar.
"Sra. Greco, qué desea beber, iré por ello" se ofrece Karina, la chica de recepción.
Estaban presentes varios empleados, es la hora que iban por sus cafés y aprovechar para contar los chismes de los empleados.
Al escuchar a Karina llamarla Sra. Greco, todos se callan, Liliana no quería llamar la atención de nada ni nadie.
"Está bien, yo iré" deja su bolso en la silla y camina de la mano con Gina.
Los presentes le ceden el lugar: "No, ustedes estaban primero"
No quiso tomar atajo, ni hacer menos a nadie, para ella el respeto es lo primero.
Gina se encuentra a su lado y no quería darle un mal ejemplo.
Al ser su turno, la chica que atiende estaba nerviosa. Es recién llegada y ahora le toca servir a la esposa de su jefe, ha escuchado que el Sr. Greco ama mucho a su esposa.
No quería ser despedida:"Solo un muffin, un jugo de manzana y para mí un té helado está bien"
Ya teniendo sus bebidas se sientan en una mesa junto a todos.
Gina come feliz balanceando sus piernas y disfruta de su postre.
En la mansión Allen, Kate y Sandra estaban furiosos.
"¡Tiene más vida que un gato!" Kate no podía creer que los sicarios que contrato terminará fallando también.
"¡Tenemos que acabar con ella antes de que cumpla 21 años!", de alguna manera ellos habían visto una copia del testamento de Amika.
Tenían que acabar con Liliana antes de su cumpleaños, ya han falsificado su firma.
Fue más fácil acabar con Amika, llevan años tratando de aniquilar a Liliana.
Conforme se acerca el día, más ansioso se ponía Paulo.
Si ella llega a los 21, automáticamente todo quedará bajo su control y se quedarán sin la empresa.
No habrá posibilidad de escapar de Liliana, a estas alturas ya les quedo claro que no es alguien tan fácil de tratar y más ahora con Ian Greco como su respaldo.
Ya han gastado una fortuna en contratar asesinos profesionales y ellos también fracasaron, en cambio, todos fueron aniquilados por el Dragón Blanco de la elite del ejército.
La obsesión de Kate por Liliana aumento más, ella siempre la superó en todo. La envidia estaba escrita en el rostro de Kate, siempre le decían que no se parece en nada a una Allen.
La comparación con Liliana siempre fue tabú para ella.
Su padre admira a Liliana y a ella la trata como una niña mimada y tonta.
Esta vez solo le queda dos semanas, debe de pensar en algo y acabar esta vez de manera definitiva a Liliana.
Volviendo a la cafetería de la Corporación Greco.
Gina y Liliana seguían sentadas, ahí cuando ve entrar un chico joven, alto, ojos verdes y muy guapo.
Tenía los ojos rojos como si terminara de llorar sentarse con la cabeza gacha, al principio no le dio importancia.
Una compañera se acercó a él, al decir algunas palabras el chico empezó a llorar
Lo primero que pensó fue en Ian, todo lo que pasa hoy él es el culpable.
No suele hacer esto, pero otros parecían tener peor día que ella.
Se acerca a la mesa de los chicos, ambos tenían la mirada en el suelo, lo primero que ve son unos tacones muy hermosos, los dos levantan la cabeza para ver quién es la persona que está ahí.
Ellos dos son amigos y el chico es su primer día de trabajo hoy, fue recomendado por la chica.
Ella reconoce a la mujer: "Sra. Greco lo siento no, no queríamos…"
"¿Qué pasa?", va directo al punto, no le gusta andar por la rama.
"No se preocupe, no… "Omar, el chico se levanta y le sonríe aún con lágrimas en los ojos.
"Si no me dices que pasa no podre ayudarte"
Omar Arelan es un joven que quedo huérfano él y su hermano.
Su hermano tuvo un accidente muy fuerte de camino al colegio. El hermano necesita una cirugía y él no puede pagarla. Por estar a prueba aun con el salario alto que la empresa ofrece. Aún no puede pagar la cirugía que el hermano requiere.
Ya no podía más, ya se acerca la mensualidad para pagar el asilo donde está internado su abuela con Alzheimer.
Apenas a sus 23 años ya tenía tantos problemas, ya ha pensado en saltar del edificio.
"Puedo ayudarte, con lo de la cirugía de tu hermano y la mensualidad de tu abuela, a cambio que trabajes para mí"
Omar, Lara y Neli, la amiga de Omar, todos pensaron que a Liliana le gusto el chico y lo quería como su amante.
Ella, por otro lado, estaba pensando que Kate ya ha tenido un buen descanso y es hora de poner en acción su plan y vengarse por todo.
"No te preocupes, no matarás a nadie"
Al ver su sonrisa todos sintieron escalofríos, estaba claro que quería a Omar para otra cosa.
Muchos sintieron envidia del chico, la esposa del jefe personalmente lo busco.
Pensando en los ceros de su sueldo, todos querían ser él.
(Voy por ti Kate) juro en su corazón