Un Amor Que Duele

Perla

Hubo un tiempo que pensé estar enamorada de Germán pero cuando conocí a Matt el trato diario me hizo sentirme atraída por él, el es tan bueno pero se que está enamorado de Gema al igual que Germán, y todo esto del matrimonio es una farsa en la cual no hay amor así que don Enrique estaba totalmente equivocado. Durante la fiesta nos limitamos a saludar a la gente, posando para las revistas no se cuál era el empeñó para que nuestro compromiso se anunciará quizá Germán quería demostrar su poder, el momento más incómodo fue cuando una de las periodistas pido darnos un beso a pesar de que tenía veinte años no había experimentado tal cosa ya que siempre estaba encerrada en diferentes internados y cuando estaba de vacaciones nunca salía en eso era muy diferente a mi hermana, Germán tomo mi rostro, sonrió y poso sus labios sobre los míos está acción hizo que me sonrojara tanto que sentía mis mejillas arder

--- Puede ser un beso más profundo--- dijo la periodista.

---- Por supuesto, señorita--- dijo él, volvió a tomar mi rostro pero está vez su lengua invadió mi boca se podrán imaginar lo que sentí sin con el leve toque de sus labios me sonroje con este beso profundo me sentí tan extraña pero no sé porque me estaba dejando llevar su invasión era dulce pero a la vez agresiva, su beso me estaba dejando sin aliento, iba perdiendo la respiración me sentí como si el oxígeno me faltará pero cuando el se detuvo mi boca quería más no se por que extraña razón mi boca me estaba traicionado, por varios segundos me quedé paralizada era como si estuviera en otro canal tanto que no escuchaba las preguntas, ni las respuestas que daba Germán, la fiesta seguía por todo lo alto cuando Germán se quedó hablando con algunos socios de mi padre yo aproveche para ir al baño, mi mire al espejo y me pregunté ¿ Que es lo que está pasando contigo Perla?¿Porque ese beso te hizo sentir?, trate de respirar profundamente para aclarar mis emociones pero cada vez eran más confusas, ya era muy tarde la fiesta estaba por terminar cuando salí del baño varias amigas de mi madre me felicitaban y daban las gracias por la excelente velada, no paraban de decir que era la mejor fiesta de compromiso incluso era mucho mejor que la de mi hermana y que decir del novio era tan galante y caballeroso, yo sonreía ante tales palabras pues la realidad era muy diferente, poco a poco se fueron retirando los invitados, fui en búsqueda de Germán pero me lleve una sorpresa tan desagradable fui a buscarlo en el jardín uno de los meseros me dijo que lo había visto salir, el lugar estaba demasiado oscuro había muy poca visibilidad me adentre un poco pero al no ver nada decide retirarme pero justo cuando lo iba hacer escuché a una mujer gemir, quizá mi curiosidad fue la que me arrastró a ver quién era me enfurecí al ver qué era mi hermana Gema con Germán la posición en qué los encontré no era para nada decente quería gritarles a los dos tomar de los cabellos a mi hermana como era posible que le hiciera eso a Matt pero cuando iba empezar a gritar vi que Matt se acercaba quite a mi hermana y me puse junto a Germán, Matt se acercó observo que Germán tenía la ropa desarreglada y si cinturón y pantalón estaban desabrochados nos miró, Germán lo miro con algo de suficiencia incluso se podría decir que se burlaba de él

--- ¿Que haces Perla? --- dijo Matt en forma de reclamo --- Se que el será muy pronto tu marido pero es inapropiado lo que están haciendo--- continúo diciendo.

--- No crees que ya somos adultos para saber lo que estamos haciendo-- dijo Germán mientras más me acercaba a su cuerpo, tanto que podía sentir su dureza.

--- Jamás lo hubiera pensado de ti Perla--- dijo Matt sus palabras me hirieron sentí mi corazón romperse en miles de pedazos, vi en la cara de Matt su desaprobación y yo me sentí tan miserable, cuando Matt se retiró Gema salió de entre los arbustos

--- Como pueden ser tan ruines--- reclamé.

--- Hay hermanita solo le estaba dando la bienvenida a mi cuñadito, no es para tanto--- dijo Gema pero que cínica era, ella se retiró con una gran sonrisa y me dejó con Germán.

--- No vuelvas hacer eso--- dije muy molesta, el me tomo de la cara y me miró --- Yo hago lo que se me de la gana, ni tú ni nade me dice lo que yo debo de hacer--- dijo, para después soltar mi cara, como podía ser tan malo, se fue y me dejó ahí, Gema no se merece un hombre como Matt me dije.