LA SOLEDAD DEL PODER

Amir no era el único que pasaba por la soledad, Geisy no tenía poder, pero si una soledad que a veces era abrumadora. Ella estaba sola en su apartamento, miraba por la ventana para distraerse un poco; en el edificio todos mantenían sus puertas cerradas, ella conocía algunos vecinos, pero muy poco se encontraban.

Geisy a las nueve de la noche ya estaba acostada pensando en su nuevo empleo, sabía perfectamente quien iba a ser su jefe, sabía que su jefe era un hombre soltero de 35 años codiciado por muchas mujeres, pero ella no iba por el, iba por su empleo, por el sueldo para sus gastos.

Geisy iba con una actitud muy práctica, iba enfocada en sus objetivos, su trabajo y en sus necesidades financieras. Amir en su casa acababa de darse placer, pero sentía que necesitaba más, no quería buscar a nadie y decidió sumergirse en el trabajo para para olvidar sus ganas y para que le diera sueño, su estratégia le funciono a las dos de la mañana.

Al día siguiente Geisy fue temprano para sus exámenes, le hicieron todo y se fue feliz a su apartamento porque al día siguiente comenzaría su trabajo, en la empresa Amir estaba estresado, tenía que valerse por so solo, tenía que ser recursivo para adelantar trabajo, el deseaba que ya fuera jueves para que su secretaria hiciera presencia, se sentía abrumado, no tenía apoyo, de su nueva secretaria lo que más anhelaba era que fuera supereficiente.

A la dos de la tarde Geisy recibió la llamada de recursos humanos, tenía que presentarse para firmar contrato y para la entrega del uniforme de trabajo, ella llegó puntual a la empresa; después de firmar le entregaron su uniforme, era una falda negra con camisa blanca tres cuantas y zapatos negros, Geisy agradeció y salió de la empresa muy emocionada. Cuando estaba fuera de la empresa miró el hermoso edificio, sonrió porque a partir de ese momento era empleada de la prestigiosa empresa que estaba en ese edificio.

Por la noche Geisy no podía dormir, los nervios de su primer día de trabajo no la dejaban, la incertidumbre sobre cómo sería su experiencia la mantenían despierta, estaba pensando en todas las cosas que podría hacer, si las iba a hacer bien o mal, pero lo que más la tenía despierta y nerviosa era la presión de querer causar una buena impresión y demostrar su capacidad para desempeñar el trabajo.

El inesperado día llegó, Amir se levantó un poco más animado porque iba a tener ayuda de su secretaria, en cambio, Geisy los nervios la querían volver loca, desayuno muy poco porque no tenía ganas, pero reacciono y se paró firme y decidió tomar el control de sus nervios y ansiedades, los nervios no podían dominarla. Finalmente, salió rumbo a su nuevo trabajo, en la entrada se encontró con la secretaria que la había entrevistado, Geisy le sonrió y la mujer hizo lo mismo y dijo.

— Buenos días Geisy ¿lista para la inducción?

Geisy se sorprendió, había que la mujer no le iba a dar inducción porque sabía bien todo lo que iba a hacer, pero no se lo hizo saber y dijo.

GEISY: Sí, estoy preparada.

Las dos mujeres ingresaron al gran edificio, todas las miradas se pasaron en las dos mujeres, las empleadas de ese primer piso sintieron enviada, más por Geisy, era joven y bonita, podía estar cerca del jefe, las mujeres ingresaron al ascensor, se detenía en cada piso, Geisy se daba cuenta que había muchos empleados en cada piso, pero cuando llegaron a su piso se sintió una sensación de soledad y aislamiento. El contraste entre la actividad y el bullicio de los otros pisos y la quietud y la soledad de su nuevo entorno laboral era notable, pero entendía los motivos de ese aislamiento, la mujer se dio cuenta y dijo.

— No tengas miedo, el piso es solo del jefe y la secretaria, a él le gusta el silencio y mantenerse alejado de las empleadas coquetas, yo me sentí extraña e incómoda los primeros días, pero después me acostumbré y me gusta así, verás que te vas a acostumbrar, y te vas a concentrar mejor en el trabajo.

GEISY: Entiendo, estoy dispuesta a adaptarme, solo será cuestión de días.

— Bueno, ven y te explicó todo el sistema.

La mujer entendió el computador, después comenzó a explicar todo a Geisy, se dio cuenta que su jefe no iba a tener quejas de ella, se sintió satisfecha por su buena elección, después de explicarle todo, la mujer se sintió satisfecha de haber podido ayudar a Geisy, le da su número de contacto para cualquier duda, se despide y le desea lo mejor.

— Me voy, no dudes en llamarme si tienes dudas en algo, te deseo lo mejor en esta empresa, ah... Y no entres a la oficina sin tocar o que él te llame, solo lo puedes hacer cuando ya hayas estado en la oficina y el te mande por algo, solo así puedes entrar sin tocar porque él te espera, de lo contrario no.

GEISY: Gracias por la aclaración, gracias por darme la oportunidad, también deseo que te vaya bien.

La mujer sonrió y se fue al ascensor, Geisy la miró hasta que las puertas se cerraron y la mujer le dio una sonrisa, Geisy se queda sola, lista para comenzar su primer día de trabajo con Amir. Ella está haciendo su trabajo cuando suena el teléfono de su escritorio, se puso un poco nerviosa y contestó, su jefe le dijo que fuera a su oficina y corto la llamada sin esperar respuesta; ella se levantó de sí silla y fue directo a la puerta de la oficina y tocó, su jefe le autorizo la entrada.

Cuando ella entra a la oficina Amir se da cuenta que es más bonita que en la foto de su currículum, el se queda mirándola y ella se pone nerviosa por su mirada fija, pero se mantiene sería frente a él, el se da cuenta que esta nerviosa y comprende porque era su primer día de trabajo, el tomó el control de la situación y se comportó de manera profesional y respetuosa, se enfocó en explicarle lo que el queria que hiciera con unos documentos.