SÉPTIMO libro de la serie ENTREGANDO MI CORAZON.
Soy hija de unos padres que viven de las apariencias y el egoísmo. Lo único bueno en mi vida es mi hermanita y lo único que busco es extender mis alas recortadas y volar. Conocí al primer amor de mi vida y a los pocos días lloro su partida. No creí que el mundo daría vueltas y me daría una enorme sorpresa. Ahora tendré un hijo y gané un enemigo tan caliente que me enloquece. No sé si lo quiero ahorcar o besar... o ambos.
Soy un cínico, ocultando todo mi tembloroso ser detrás de un muro de prejuicios y unas espinas de desconfianza. Eso es lo primero que aprendí en un mundo donde nadie da la cara por los más indefensos. Hasta que tuve una pequeña familia y una vez más la vida se encargó de arrebatármelos uno por uno. Ahora solo me queda mi ahijado y pelearé por él. No importa lo bella, exquisita y perfecta que sea mi oponente, no perderé mi corazón... o ¿ya lo perdí?
La historia de Lucy y Andy.
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LUCY HACE 5 AÑOS (CAP. 07)
Le pido que me consiga el vuelo y nos vamos.
El lugar es hermoso, lleno de árboles. Cuando llegamos me pidieron escoger un árbol, pensé en un roble, pero me decidí por un arce. Me gusta la forma de sus hojas. Veo como preparan su urna en un material biodegradable, con unas semillas. Me dicen que con el tiempo veré como germina y crece.
Después de una semana regreso al Tibet. Los maestros no tienen una cura para el dolor que siento. Me dicen que ese dolor formará parte de mi y con el tiempo debo buscar la fortaleza para sobrellevarlo y poder recordar lo vivido con una sonrisa. Para todo en la vida, el esfuerzo es importante.
Ellos accedieron a formar parte de mis centros de relajación. La distracción es bienvenida en estos momentos. Me metí en los últimos detalles para lanzarlos al público y recibo llamadas y mensajes insistentes del niño. El niño es Garreth, el mejor amigo chico de mi renacuaja. Algo pasó y si hay alguien que puede llevarme de regreso a la ciudad es mi hermana, mi única familia.
Llego y la encuentro llorando. Me cuenta sobre la partida de Garreth y ya es hora de romper la burbuja mágica que tiene alrededor de nuestros padres, antes que pierda al amor de su vida. Cualquier persona con o sin ojos, sabría que se aman. No tienen que desperdiciar el tiempo, ya que éste es valioso. Con Susan grande, puedo desahogarme. Le cuento sobre Josh y todo lo reprimido sale. Lo extraño tanto que me duele el alma.
Después de 2 semanas terapéuticas, ya que estar con mi renacuaja me ayudó mucho, regreso a finalizar mi trabajo. Le añadiré esto a mi centro, el simplemente hablar y llorar para quien lo necesite, es liberador.
Con todo ya listo, hablo con mi amiga cibernética y ella me dice que necesito un nombre para mi marca. Todo tiene que ver con lo que ofrece nuestro planeta, nuestra encantadora Tierra.
- Lovely Rheat, un anagrama de Earth (Tierra en inglés).
× Sutil.
Prácticamente puedo imaginarla rodando sus ojos.
- Tan sutil como Lake. Apuesto que tu verdadero nombre inicia con La. Desde ahora serás Lala, para mi. Una pequeñaja más para mimar.
× No necesito que me mimen. La que ayuda y mima soy yo. Por si acaso, para cualquiera que busque tu nombre, eres una trotamundos, mochilera, nómada, etc, que trabaja como espiritualista de todas las tradiciones. Hasta te hice una página en yelp y entre las miles de calificaciones de 5 estrellas, los comentarios más destacados son los que te agradecen el que fueras con ellos a Perú y los guiarás de manera segura en los retiros de Ayahuasca. Mientras que Lovely Rheat es la empoderada, multifacética, empresaria millonaria dueña de la marca LoveMe, con productos orgánicos muy solicitados, prendas con telas 100% orgánicas -mi favorita es una chompa de lana de alpaca- y ahora estos centros de relajación que recién están por inaugurarse y ya tiene todas las fechas copadas por 6 meses.
- Realmente mucho de esto es gracias a tu ayuda. Ahora muchas comunidades tiene los recursos para crecer y sus hijos puedan tener un increíble futuro. Gracias, pequeñaja. Te quiero, cuídate.
Ella no dice nada. Algún día la conoceré y sabré si mi intuición es correcta. Si es menor la mimaré como a mi renacuaja, ella está acostumbrada a ser la seria. Será una niña para mi.