Huyendo, Te Encontré

Anna estaba esperando la respuesta que nunca llegó, ya que la nana no estaba así abrazo a su hija un rato antes de levantarse de ir a abrir.

"Espérame un momento no tardo cielo"

Solo asintiendo con la cabeza Norma suelta un suspiro, estaba a punto de decir algo cuando lo interrumpen, y daba gracias a la persona que estaba afuera timbrando, lo último que quería era poner en peligro a su madre, sin saber que la persona con la que estaba agradecida era su verdugo que salto del balcón para tocar el timbre, él se quedó en el balcón escuchando, no dejaría que le contará a Anna así que toco el timbre para desviar la atención. Al escuchar la voz cayó en cuenta de que se quedó escuchando en el balcón, eso la hizo estremecer de miedo.

"Hola cuñada cómo estás?". Saluda a Anna con una sonrisa

"Muy bien y tu?; que te paso en los labios?"

Le pregunta al notar sus labios rojos he hinchado, parecía como una mordida de algo o alguien pensó su cuñada. Con pena este le responde en modo casual a su pregunta.

"Antes de venir fui a cabalgar y me pico una avispa, no me había visto los labios pero al parecer me dejaron horribles"

"No te quedes en la puerta pasa, te traeré un poco de hielo para que disminuya la inflación"

Los dos pasan a la sala de estar, Carlos toma asiento mientras que su cuñada se va a la cocina a buscar un poco de hielo para sus labios, arriba en la planta alta Norma en la cama no paraba de llorar, las lágrimas se le salían más y más no tenía idea de que Carlos lo estuviera espiando, tenía que encontrar la manera de salir o pedir ayuda, amaba mucho a sus hermanos y no quería ponerlos en peligro ya se dio una idea de lo que podría hacerle el psicópata de su tío, Anna me estaba poniendo el hielo en los labios de Carlos cuando llega Sonia con toda compra.

"Deja las cosas y sube a dejarle algo de fruta a mi niña, dile que no tardo" ella no quería dejar sola al invitado.

"Enseguida mi señora" la nan Sonia se va a la cocina con las cosas.

"¿Todo bien con mi sobrino?",Carlos pregunta preocupado.

"Si cosas de chicas ja" Anna no quiso dar ninguna información que aparte ella no tiene.

La nana le parte jícama y pepino lo pone en un recipiente le pone chile el polvo (tajín) y limón como tanto le gusta a su niña, se dispone a subirlo, llega y toca la puerta muy suavemente temiendo despertarla, habré la puerta después de escuchar un pase de su niña, ella entra y la ve acostada de lado dándole la espalda a ella, se acerca deja la fruta en la mesita de noche y se acerca lentamente le toma de los hombros con suavidad.

"Mi corazón, que tienes?" En tono preocupado

Se gira para verla la nariz toda roja esta última no puede creer que sea ella, la niña que siempre ha criado es una niña risueña y muy rara vez la ve llorar, sabía que estaba castigada pero no entendía que la tenía tan mal ya la han castigo así antes, y no hizo ningún escándalo, menos llorar así, sabía que le pasaba algo

"Dime que paso, puedes contarme lo que sea sin importar lo que es siempre te cuidaré, mi corazón" le dice Sonia dándole un beso en la frente.

"Nana sabes que te adoro, verdad? tu para mi eres como mi segunda mamá, sin importar donde vaya yo siempre te amaré nunca lo olvides." Se lo recuerdo a su nana, lo mucho que la quiere

"Mi corazón no me digas eso, que pasa me estás asustando",era raro verla hablar de esa manera

"No es gran cosa solo que nunca te he agradecido por cuidarme y quererme como lo haces; sabes? En esta vida yo no entiendo nada porque a los malos les va bien y a los buenos les va mal. Todos tenemos un demonio dentro que está dormido y un día puede salir a terminar con los malos o hundirse con ello; muchos tienen todo lo que el ser humano puede desear, sin embargo, no tienen lo que ellos quieren como dicen aunque la jaula sea de oro, sigue siendo jaula; esta vida no es justa no lo ha sido y creo que nunca lo será, nana el valiente vive hasta que el cobarde quiere, te quiero mucho"

Sonia se queda petrificada con todo lo ella le dijo, una niña de esta debería de estar jugando diciéndose con sus amigos, en cambio, ella se la pasa leyendo libros de informática e idiomas, nunca la ha escuchado hablar de esta manera, sonaba como a una despedida, en el fondo sentía que no estaba así por el castigo pero que sus únicas amigas Elena y Daniela sus mejores amigas no la han visitado, a ver que Sonia no dijo nada esta se lanzó a sus brazos.

"No te asustes lo acabo de leer de un libro y pensé que sería bonito decírtelo" le comenta para no asustar a la nana

"Te digo la verdad? ¿Si me asuste, me has dicho poemas o canciones pero esto nunca, no tengas miedo siempre estaré contigo, tu serás lo último que deseo ver cuando de el último suspiro con esto te digo que te quiero muchísimo; te traje fruta con picante, quieres?"

Le sonríe dulcemente a la nana, por dentro sentía un dolor insoportable

"Si, pero quédate conmigo si?" Norma no quería estar sola.

"Bueno me quedo un ratito vale? Tengo cosas que guardar en la cocina"

Sabía que se estaba despidiendo de ella, en su mente solo rondaban dos opciones escapar a como de lugar de ahí o la otra es quitarse la vida este último lo tomaría si el primero falla, siempre ha pensado que el suicidio es la forma cobarde de escapar del problema, ahora lo veía como plan B, quedarse ahí no está en ninguno de sus planes; pensando en eso se puso a comer las frutas pero esta vez la fruta no tenía ningún sabor estaba desabrida, no era la fruta la que no estaba bien era ella, pasaron unos minutos más y se quedó dormida. La nana la queda observando.

(mi niña ojalá supiera lo que te pasa, no se como ayudarte, siento que esto no tiene que ver con tus padres, porque tienes moretones en el cuello? Dios ayúdame a saber que está pasando, ella me necesita)

Observándola con eso en mente, ve como empieza a fruncir el ceño y empapada de sudor en la frente, ella asume que está teniendo una pesadilla se acerca más y la escucha murmurar entre sollozos.

"No quiero, aléjate de mí...nooo" Sonia está segura de que es alguien la quiere lastimar. Pero quien se preguntaba en su interior.

"No, no, ayuda me duele, no suéltame suéltam..." sé despierta de golpe y se sienta en la cama se apoya des respaldo de esta, ve a la nana observando con preocupación, recordando las palabras de su tío.

"Solo fue una pesadilla " tratando de sonar casual para no preocuparla

"¿Que clase de pesadilla? Porque pedías ayuda?"

Rápidamente pensó en una excusa no quería decirle que era su tío

" No recuerdo lo que dije, puedes no comentarlo con nadie, tiene que ver con las películas de terror que vi con Dany y Elena" no quiere poner en peligro a su nana.

"Esta bien "

La nana se fue pero esas palabras de auxilio resonabando en su mente.