En Mí Habitación

Desperté feliz de la vida, aún tenía su imagen en mi memoria, me gustaba como lucia, siempre me gustaron los trigueros y sus ojos achinados son tan perfectos, aunque no se el motivo por el cual estudia en casa, estoy segura de que de ir a una escuela sería muy popular. Todas las chicas harían colas por él o mínimo no dejarían de mirarlo.

Hoy me salte las reglas que yo misma me había impuesto para no caer en la tentación de estar pegada al teléfono así que antes de salir de la cama y comenzar a vestirme para ir a la escuela, quise tomar la iniciativa de escribirle primero, con un poema que transmitiera una parte de lo que sentía, pero que no fuese muy atrevido tampoco, al final tomé un fragmento de uno de Francisco de Quevedo

Después que te conocí,

Todas las cosas me sobran:

El Sol para tener día,

Abril para tener rosas.

Por mi bien pueden tomar

Otro oficio las Auroras,

Que yo conozco una luz

Que sabe amanecer sombras.

Buen día 🌞🌞🌞

Estaba en línea, mi corazón latía apresurado al sentir que mi madre comenzaba los preparativos y ver que él comenzaba a escribirme, por precaución coloqué el teléfono debajo de la almohada y tomé la primera ropa que ví, un vestido era más rápido y unos tenis, me los puse a toda prisa por si mi madre aparecía, entonces luego revise el chat para saber si ya tenía respuesta y sí ya había escrito.

X

Por tus ojos verdes yo me perdería,

sirena de aquellas que Ulises, sagaz,

amaba y temía.

Por tus ojos verdes yo me perdería.

Por tus ojos verdes en lo que, fugaz,

brillar suele, a veces, la melancolía;

por tus ojos verdes tan llenos de paz,

misteriosos como la esperanza mía;

por tus ojos verdes, conjuro eficaz,

yo me salvaría.

Por tus ojos puedo darlo todo, 💜🌹.

Que tu día 🌞sea maravilloso 😊🌹

Su respuesta fue con un poema de Amado Nervo, Madrigal, se ve que tiene bastó conocimiento sobre poesía, pero a la vez me da temor preguntar, a veces nota cierta tristeza en él, tal vez sea una impresión mía.

Le contesto

Igual, 💋

Termino de arreglarme y voy hacia donde mi madre que ya tiene listo el desayuno, suerte que no me atrase por estar pegada al teléfono y contestarle, desayunamos y seguimos con nuestra rutina mañanera. Me llevó a la escuela y nos despedimos ella se marchó a su trabajo. Las chicas ya están allí esperándome, al llegar a ellas comienza el interrogatorio, me hacen mil preguntas sobre x, yo les muestro su foto, ellas al verlo tan guapo flipan.

Las dos coincidían en que me había ganado el premio gordo, era demasiado guapo para ser real, decían y lo sabía. Yo no había tenido muchos novios, por mi problema de timidez me costaba un poco, tampoco tenía muchos pretendientes como para intentarlo seguido. La verdad yo era un poco descuidada en mi aspecto, no era muy presumida eso hacía que no notaran mi aspecto que no era para nada poco agraciado.

No me consideraba fea, más bien una chica promedio. Tuve dos novios hasta ahora, uno a los diez, cosa de niños y otro a los catorce. Se llamaba Darío, no pasamos de besos y caricias, pero fue algo muy bonito, incluso sé lo presente a mi madre. Mi madre no tiene problemas con que yo tenga novio.

Con mi madre no tengo problemas cómo otras chicas a la hora de tener novio, ella me da su aprobación, no importa su raza, su físico o economía, la única condición es que se lo diga y se lo presente. También ella me brinda información sobre el sexo y protección. Ella vela por mi seguridad y me da mi libertad, siempre y cuando sepa que me rodean buenas personas.

Claro con Darío no es que pudiera salir por ahí, él podía visitarme en casa y estar todo el tiempo posible, pero yo no podía salir por ahí de noche aún, él se mudó a Rusia por el trabajo de su padre y dejamos la relación unos meses después. Tampoco estaba tan enamorada de él, pero fue una bella experiencia para mí.

Con Liam es enigmático todo, me gusta, lo siento en mi pequeño corazón que no me cabe en el pecho cuando pienso en el, espero poder conocerlo lo más pronto posible en persona y mostrárselo a madre, se que soy muy joven aún pero siento que esto puede ser amor del bueno.