La Ruta Del Polvo Blanco.

... Me acuesto en mi cama y pienso en el día de locos que fue aquí. Espero que estas dos semanas sean breves para que mi hermano llegue ya.

Ha transcurrido una semana y lo he evitado mucho, aunque él hace lo mismo, no cruzamos palabra alguna, Luca solo me llama por las noches, aun no entiendo su ausencia, pero bueno respeto su vida, ya que yo llegue sin previo aviso y bueno entiendo que él no está acostumbrado a verme sigo haciendo ejercicios como de costumbre he visto muy pocas veces al bruto ese, hay una señora nueva que se encarga de cocinar y otra de que el responsable del aseo de la casa.

 Decidi llamar a Lili, hice algunas llamadas desde aquí.

 No quiero que la llamada sea rastreada y me encuentren sería mi fin, ya no he vuelto tener comunicación con Meca eso me preocupa solo me dijo no aparezcas por la casa.

... Tuve que salir de la casa por la seguridad de mi hermana, Claudio me dijo que le quitara el teléfono a Martina para colocar un programa de seguridad y así no se pueda rastrear. Meca es el único con él que he tenido contacto en todos estos años, me avisaba que cada movimiento de mi familia y siempre pedía protección para mi hermana, días antes me aviso sobre los planes de mi padre y mi abuelo. Quieren extender su territorio por tierras árabes y para eso tendrán que dar a mi hermana como parte del pago.

No me causa extrañeza, ya que años atrás me quisieron comprometer con Clarisa Pároli, hija de un magnate italiano, petrolero y que también tenía acceso a la ruta del polvo blanco.

Yo no podía aceptar, porque mi corazón estaba ocupado, siempre me mantuve alejado de esa vida, mi abuelo y mi padre renegaban de mi decisión, me dedique totalmente a mis estudios y ocupe todo mi tiempo en capacitación sobre tecnología y seguridad digital, por unos momentos pensé en que mis estudios servirían para ayudar a mi familia sin tener que ensuciarse de sangre y arrastrar las mismas tradiciones, quise participar de esa manera.

Pero, los planes eran otros, mi vida ya estaba decidida, siendo el mayor pues tenía que acceder a lo que ellos querían y yo no podía aceptar.

Abery Vorzotti, hija de un empresario de Canadá, vino como estudiante de intercambio a la misma universidad donde estudiaba junto a mi gran amigo Claudio Salvitez VoKlat, también hijo renegado de los amigos de mi abuelo. Coincidimos en varias reuniones, hasta qué después ya no supe jamás de lo que sucedió con su vida.

Y cuando entro a la universidad, lo reconocí al instante y el a mí, desde ese momento nos volvimos inseparables, junto a mi ahora esposa, Avery.

Fuimos tan unidos que éramos el trío inseparable. Después que termine mi carrera le propuse matrimonio a Avery, para eso ya teníamos planes con Claudio sobresalir del mundo que nos tocó pertenecer sin querer tenerla.

Pese a las amenazas de mi familia, salí de casa, lo único que me preocupaba era Martina, pero Meca, mi fiel amigo me dejo tranquilo, hasta el día de esa llamada.

Y aquí estoy tratando de que mi abuelo cambie de opinión sobre el matrimonio con la familia de Tamil Sporia.

Claudio tiene conocimiento de lo que debe hacer si ubican a mi hermana, él la llevara a Inglaterra lugar donde reside ahora Avery y mi pequeño Luca.

Tengo esta tarde que ir a la mansión Duncan, casa que no he visto desde hace casi seis años.

Al entrar los viejos recuerdos se presentan en mi memoria. Al primero que veo es a Patrick, el cual siempre le atrajo la vida de fiestas y lujos, un perfecto Duncan.

No hace ningún gesto al verme, no se me hace raro, ya que jamás tuvimos una relación de hermanos. Él siempre camino de la mano de mi padre. Entro a la casa y Meca me recibe con un fuerte abrazo, me indica que me están esperando en la sala.

Ya no recordaba lo espaciosa que era. Y ellos tres me esperan, no hay saludo ni abrazos, solo palabras que me hacen saber que jamás cambiaran de opinión.

(Dominico) Porque tienes que ser tan testarudo y siempre estar en nuestra contra, supongo el porqué de tu visita obligada a esta tu casa.

(Luca) Para mí también es desagradable saber que no soy bienvenido en la que una vez fue mi casa.

Y bueno al punto, deben saber que mi hermana Martina fue en busca de ayuda. Pero solo estuvo un par de horas y ahora está en el extranjero. Si quieren atentar en contra de mi vida aquí estoy antes de que desaparezcan a mi esposa e hijo.

Soy el único responsable del escape de Martina y si lo tengo que hacer varias veces lo voy a hacer aunque a ustedes no les parezca.

(Patrick) ¿Abuelo estás seguro de que Luca es un ... Duncan?

(Abuelo Fabián) He escuchado en silencio a cada uno de ustedes, sinceramente no hay muchas opciones, entiendo que Martina huyo por el compromiso, pero ella sabe muy bien nuestras tradiciones, no se pueden mezclar las mujeres con personas que no estén en la ruta del polvo blanco.

Ahora dime tu querido nieto, que debo hacer ante lo que has hecho con la vida de tu hermana.

(Luca) Sí es necesario dejar mi vida en sus manos, lo voy a hacer, pero antes tendrán que prometer que tanto mi hermana como mi familia serán intocables después de mi muerte, tómenlo como una promesa de sangre.

(Patrick) Que te hace pensar que puedes llegar y colocar aquí tu voluntad sin ser evaluada.

(Luca) Té recuerdo que soy mayor que tú y el hecho de que yo no participe del negocio, no significa que tienes el poder sobre lo que yo decida. No eres prioridad de respeto para mí.

Y más vale que tú, te mantengas lejos de un asunto que no te concierne.

( Patrick) Tengo los mismos derechos y peso que tú, no por ser el primer nieto Duncan, pienses que soy menos que tú. Rechazas los mandatos de la familia y aun así te dignas en seguirle el juego a la tonta e inútil de Martina.

... No soporto que llame de esa manera a Martina, en cuestión de minutos me lanzó contra él y le propinó varios puñetazos, él está bajo mi cuerpo y no le doy tiempo a que reaccione solo cubre su rostro.

Un disparo me hace parar. Veo mi muslo el cual empieza a sangrar.

El gran señor Dominico es el encargado de el certero disparo. Mi abuelo mantiene silencio, solo mira con desdén a lo que mi padre acaba de hacer.