Cristal Herrera una joven que quedó bajo la tutela del doctor Aldo Galarza al perder a sus padres en un accidente, sufre de sonambulismo debido a ese trágico suceso que marco su vida. Su tutor la ayuda a superar ese trastorno del sueño. La llegada de Joaquín, el hijo mayor del doctor, despertó en ella un deseo sexual que solo lo complace en sus sueños o eso ella cree.
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Capitulo 5- Entre sus piernas
☣️📢ATENCION EN ESTE CAPITULO HAY ESCENAS MUY CANDENTES Y LENGUAJE INAPROPIADO🧨⚠️ SI ES SENSIBLE A ESTO NO LO LEA📌
Narra Joaquín
Estaba molesto con la mocosa, le salve de que se aprovechen de ella y no era capaz de agradecerme.
Me fui a bañar para sacarme el enojo de encima, al salir envolvi la toalla en mi cintura, cruce por su cuarto y seguía encerrada, "mejor así que no salga", pensé enojado y me dirigí a acostar.
Deje la toalla sobre la silla y me acosté sin nada puesto como me gusta dormir.
Entre sueños siento que me trabajan ahí abajo, y me gusta, siento tibio, que me recorre un cosquilleo, mi hombría se para entusiasmado y cada vez es más intenso. Me despierto y veo que es Cristal.
"Mierda"
"Joder"
Es tan buena en lo que hace que no puedo frenarla.
"Debo frenarla", pienso, pero en vez de eso apretó las sábanas conteniendome de expresan algún sonido, veo que tiene los ojos cerrados y está sin nada puesto.
"Esto no puede ser", suspiro hondo.
Su figura es un deleite para mis ojos, sus curvas son exactas, tiene sus gemelas firmes y la punta de sus cimas rosados claros.
Cierro los ojos mordiéndome los labios, negando sin poder contener el aire.
"Debo frenarla", me digo, pero la sensación de placer que recorre mi cuerpo es increíble. No tengo voluntad para frenarla, tan controlado que soy siempre, ella a sobrepasado la barrera de hielo.
Nunca sentí esta exitacion que me palpita por todo mi cuerpo, el hormigueo es delicioso, mi masculinidad lo demuestra al ancharse y extenderse mas poniéndose duro como poste de cemento. En el fondo de mi cerebro sabía que esto estaba mal, estaba totalmente jodido.
Pero su boca cálida de labios rosados me succionaba deliciosamente como nunca antes lo habían hecho. Su lengua me recorría a lo largo de mi miembro y lo envolvía de una manera que hacía estallar juegos artificiales en mi cerebro que no podía razonar, a esta altura no entraba la razón, me deje llevar por el placer que sentía.
"Oh joder"
Deje caer mi cabeza hacia atrás hundiendome contra la almohada, al sentir una oleada de placer envolviendo mi palo a punto de estallar, pero ella en ese momento aminoro el agarre y el ritmo lamiendo la punta e introduciendo de apoco nuevamente mi miembro en su boca. Sabía como hacer que no me venga, cambiaba sus caricias entre intensas y suaves.
Mi corazón galopaba en mi pecho a punto de estallar, deseaba sentirla, deseaba estar dentro de ella, no lo pensé dos veces y la eleve apoderandome de su boca, con la mano derecha atajaba su nuca, haciéndole un examen de campanilla con mi lengua y con la izquierda le acariciaba su suave y pequeña zona V, que al sentirla húmeda todo mi cuerpo se estremeció de la emoción, le introduje de apoco el dedo para habrirme camino, y como lo supuse lo tenía muy estrecho, ajustado eso me calentó más, tome sus extremidades inferiores y las enrede en mi cintura golpeando su zona baja con mi palo altivo, ella se estremeció hundiéndose en la cama, como escondiéndose, la acaricie mas para que se relaje y conseguí que aflojara sus músculos inclinando sus caderas hacia mi, me fui introduciendo en su interior de apoco, ella clavo sus uñas en mi espalda que fue como un impulsor para que me hunda mas.
"Joder... Estoy entre sus piernas", pienso.
No voy a negar que fue la mejor sensación que nunca tuve, su calidez y su humedad que lubrico tan bien todo. La sentí un rato, pero me retire al recordar que es mejor cuidarse y evitar accidentes.
Tome uno con lubricación extra y contra alergias por las dudas. Ella se me montó ni bien termine de colocarme la protección, me aferre a sus caderas y masajee sus lomas, en su trabajo intenso que me hacia, nos besábamos sin respiro.
Al sentir que en cualquier momento me haría llegar si seguía montandome la puse de costado, aprovechando apretar cada centímetro de sus curvas, su piel suave se deslizaba entre mis manos, por lo que apretaba para sentirla más, su calidez contra mi cuerpo, sus puntas rozadas rozando mis pechos. Más no podía pedir, estaba teniendo algo íntimo con ella que no tuve nunca nada similar en años.
No recuerdo haber disfrutado así, desear que no acabará, ante lo que estába disfrutando. Mis relaciones anteriores quedaron en la nada, está la superó y no había manera de que algo así deseara con alguien más, solo con Cristal era posible.
Y en el fondo sabía que la deseaba, desde que sentí sus lomas por primera vez y no eran tan crecidas como los tiene ahora.
Con ella tenía mis sueños húmedos aunque no quería admitirlo.
Solo me escudaba en buscarle algo malo para no pensar así en ella, ni imaginarme hacerle lo que le estoy haciendo ahora.
Estaba a punto de sufrir un paro, es lo que me hace sentir con su energía por lo que me dejó venir al no poder retener más ese ardor que sentía en mis zona baja, por lo que dejo que fluya la electrizante sensacion que estoy sintiendo largando todo mi líquido retenido por la protección, mi hombria se sacude abruptamente como un electrochoque cuando te recorre todo el cuerpo.
Ahogo mi gemido agudo en los labios de Cristal, los dos permanecemos abrazados unos segundos y luego ella se despega de mi caminando hacia afuera.
La culpa se apodera de mi pecho, dándome un mazazo en la cabeza, esto no era verdad, no lo quería creer, estaba dormida, todo lo hizo en su estado de sonambulismo.
"No"
"No puede ser", me digo.
Por lo que estando en la cama, me cubro con las sabanas y busco respuestas en el buscador que tiene mi celular incorporado, leo casos tras casos, hasta que encuentro uno donde dice que es posible que se tenga intimidad en ese estado y no recordarlo.
Suspiro hondo tapándome la cara y golpeó con los puños el colchón.
Lo goce al máximo, me encantó, fue sublime, pero ella estaba dormida.
"No lo creo"
"No creo que todo lo que pasó ella no lo recuerde"
Para mí que se hizo al darse cuenta lo que sucedió, eso es, mañana la confrontare me digo.
Permaneci despierto discutiendo con mi conciencia, no pude dormir, me bañe y seguía incrédulo negando.
Me fui a mi trabajo, llegué primero que todos, dejé listo el trabajo pero seguía sin poder dejar de pensar en lo que pasó.
- Hey amigo... ¿Qué cuentas?... Y al final le diste el biberón a Cristal. Escucho que me dice Pablo cuando me estoy sirviendo un café y este se me cae de los nervios.
Escuchar que me diga eso hizo que recuerde el trabajo sublime que me hizo Cristal.
-Hey cuidado ... Te falta cordinación. Me dice pasandome servilletas para secar la mesa donde está la cafetera.
-Al final Britani quedó entusiasmada conmigo... Así que... Gracias de todos modos. Me dice Pablo palmeandome la espalda y se va con su café.
Al no poder más con lo que me daba vueltas en la cabeza ni bien salgo de mi trabajo voy derecho a la casa para hablar con ella.
-Hijo... Viniste a almorzar. Me saluda mi padre al verme.
-¿Hoy no trabajas?. Le pregunto.
-Si... A la tarde debo ir... Tengo guardia. Me avisa.
-Y Cristal. Le pregunto.
-Se fue al doctor... Amaneció con dolores en el vientre... Así que le envié con mi amigo el ginecologo. Me cuenta.
-¿Amaneció con dolores?. Le preguntó tratando de sonar tranquilo.
-Si... Debe ser que está próxima su fecha... Pero nunca viene mal un control. Dice mi padre alejándose a su estudio con un plato en la mano de un sándwich.
Me quedo en la cocina suspirando hondo, me inclino hacia la mesada apoyando mis brazos.
"No me debo preocupar, me cuide", pienso como consuelo.
Pero a la vez me preocupo, amaneció dolorida, fui un animal, trate de ser suave, pero el calor del momento desató la lujuria de manera incontrolable.
-JOA... Te buscan. Me llama justo mi padre.
Al salir me encuentro con Laura, hace dos meses ella viajo al extranjero.
-Hola... Volví. Me saluda animada.
-Ha... Hola... Qué sorpresa. Le digo nervioso.
-Te acuerdas la promesa. Me consulta.
-¿Qué promesa?. Le pregunto
-Que si volvía... Tendrías una cita conmigo... Y en una de esas. Se aproximo coqueta estirando mi saco.
-No va a poder ser... Eso era si volvías en la semana, pasaron dos meses. Le recuerdo.
-Sabes que no podía antes... Debía arreglar unas cosas. Responde poniendo pico de pato y haciendo voz de bebota.
-No podrá ser... Pasaron muchas cosas desde que te fuiste. Le respondo.
-Me enteré que estuviste con Mónica ... Pero te aseguro que lo que tendrás conmigo será de otro planeta... Además ella solo tiene pura retaguardia y yo sé que prefieres una buena delantera. Me dice sacudiendo sus lomas ante mi.
"Lo que tuve con Cristal es de otro planeta", pienso suspirando hondo y veo el brillo en los ojos de Laura, cree que pienso en ella.
-Debes valorarte más Laura... No todo va por lo físico. Le respondo.
-No engañas a nadie con esa frase. Me dice jugando con el botón de mi camisa.
Pienso en sacarla de ahí, no sea cosa que regrese Cristal y me vea con otra mujer. La tomo del brazo estirandola hacia afuera.
"¿Por qué me preocupa que me vea con otra?", me preguntó.
-¿Dónde me llevas?. Me pregunta.
-Te llevó por un café y nada más. Le respondo.
-No me digas que te gusta Mónica... Qué le ves a esa oxigenada, llena de bótox. Me dice Laura.
-Tu también te tiñes y usas botox. Le digo mirándola.
-Lo mío es de calidad... No se nota lo trucho como a ella. Vocifera con enfado.
-Hasta usas pestañas postizas... A veces tengo miedo que salte esa araña de tu rostro. Le digo.
-Que cruel... Desde cuando hablas así. Me dice y recuerdo que cuando quería conquistarla me mostraba amable.
-Asi siempre hablé. Le respondo despreocupado.
-Seguro te pego lo mal educado esa Mónica. Dice ella.
Llegamos a la cafetería y hago el pedido de dos cafés.
-¿No pedirás de comer?. Me pregunta Laura.
-Si te pagas lo que consumes. Le respondo.
-Cambiaste... No eras así. Me dice.
-Así como... ¿Un idiota que paga todo y después es abandonado a su suerte?. Le pregunto.
-Ya entendí... Estuve mal... Me fui sin despedirme... Pero no me gustan las despedidas. Me responde.
-Segun supe... Fuiste atrás de un empresario multimillonario... No te quiso pagar los gastos... Por eso volviste. Le digo y veo que suspira pesado frunciendo los labios.
En eso veo que a la cafetería ingresa Cristal junto a sus amigas y se sientan en una mesa, a Cristal se le ve los ojos rojos como si hubiera llorado y gestualiza al sentarse, se tira sobre la mesa como abrazándola, se incorpora.
Al rato veo que ingresa un chico como buscando a alguien y se dirige a su mesa, se le arrodilla ante ella tomándole las manos y ella se le suelta. Pero él toma una silla y se sienta a lado de ella, le da un beso en la mejilla, ella lo empuja, pero el chico la abraza susurrando en su oído.
-¿Escuchaste lo que te dije?. Llama mi atención Laura.
-He... ¿Qué?. Le pregunto y no dejo de mirar la escena más adelante, veo que todos se incorporan, las amigas abrazan a Cristal y lo detienen al chico diciéndole que no con el dedo.
-Dejemos el café de lado... Acompáñame a mi departamento. Me dice Laura y la miro serio.
-No... Ya te aclare que no. Le repito y escucho un griterío a fuera por lo que me incorporo y salgo a ver dos chicos peleándose, uno que quiere estirar a Cristal y otro que lo ataja.
Se lanzan piñas, las chicas le gritan que no peleen.
-JAVI... DEJALO. Grita Gladys.
-ESTE MALDITO QUIEN SE CREE... CRISTAL ES MI NOVIA. Grita uno de los chicos.
-YA NO LO ES... TE TIRASTE A LISA. Le grita el otro.
-YA JAVI. Le tocó Cristal a uno de cabellos castaños y ojos claros. Pero este le dió un puñetazo al que había entrado en la cafetería atrás de Cristal.
-SE LO MERECE... SE METIO CON LISA. Ofusco enojado el tal Javi.
La vi muy acongojada por la situación por lo que decidí interferir.
-CRISTAL... VAMOS. Le digo llamando su atención ella me mira con esos ojos grandes llenos de lágrimas, corrió hacia mi, seguida por sus amigas.
-¿Qué pasó?. Le pregunto, pero ella se me abraza sollozando.
-Llevala. Me dice Gladys.
-Ese maldito la insulto. Me dice Vivi.
-Si Dionel es un boca suelta. Agrega Susan.
-¿Qué te dijo?. Le pregunto pero ella se me aferra negando.
-Las llevo. Me ofrezco a las chicas.
-No te preocupes por nosotras. Me dice Gladys.
-Joa... ¿Qué pasó?. Me pregunta Laura, me había olvidado de ella.
-Luego te llamo. Le dije llevando a Cristal conmigo.