Soy una demonio, una con una característica peculiar por la que recibo las miradas de todos los que me rodean, todos susurran chismes inventados y reales de mí, todo es una mierda, pero... Ella, jiji... No puedo ponerlo en palabras, mejor léanlo, se pone interesante la historia de mi vida, con un viaje que me cambiara está...
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Capítulo 24
Me acerque a ella y cerró su cuaderno, lo guardó y me dijo que, si ya estaba lista para irnos, le dije que sí, nos despedimos del duende y nos fuimos...
El camino fue silencioso hasta que rompí el hielo, había acumulado el valor suficiente para hablarle...
Zalir: También me gustas... Creo...
Andras se sonrojó, no dijo nada solo siguió caminando, yo tome valentía de ni idea, pero agarré su mano y deje de caminar, en consecuencia, ella también se paró, me pregunto por qué decía eso, que si era mentira.
Zalir: ¿Por qué te mentiría? Casi entro en corto cuando me lo dijiste, ahora estoy más segura de toda esta situación...
Me abrazó y dijo que le empecé a gustar desde hace un tiempo, pero tenía miedo de decirme, yo la abracé también, le respondí que tal vez también me gustaba desde hace un tiempo, pero no me había dado cuenta...
Andras: Sí... Eso se parece a ti...
Zalir: ¿Cómo?
Andras: Era una de las teorías que tenía...
Zalir: Mm... Me conoces bien...
Aún en el abrazo respondió que sí, nos conocemos desde hace mucho y siempre me presta mucha atención, me gusta que me conozca y la conozca tanto, es lindo...
Zalir: Linda...
Me separé del abrazo y vi cómo se ponía toda rojita, esto es divertido...
Andras: No digas tonterías...
Zalir: ¿Por qué esas son tonterías? Te hago un cumplido
Andras: Mm...
Se quedó otra vez en silencio por unos segundos.
Andras: ¿Y ahora qué hacemos?
Zalir: Podemos seguir caminando, ¿El camino no es más largo que el de ayer?
Andras: Mm... No... Lo de nuestros sentimientos...
Me empujo y yo reí, me gusta jugar con ella, puedo agarrarle el gusto a molestarla así...
Zalir: ¿Qué quieres hacer tú?
Andras se puso nerviosa y se alejó de mí, bajó su cabeza y esperó a que yo hablara. Es una bola de nervios actualmente...
Zalir: Andras... ¿Quieres ser mi novia...?
Andras se sonrojo y yo también... Se acercó a mí y tomó mis manos, estaban sudadas las de ella, no subió la mirada supongo porque aún tenía pena...
Andras: Sí... Sí quiero...
La abracé y la alcé unos centímetros del suelo, la bajé y su carita estaba toda roja, yo reí en un tono de voz bajo, por... no sé, fue algo involuntario.
Andras: Ahora... Ahora... ¿Puedo ponerte un apodo?
Sonreí y le dije que sí, ella se volteo y siguió caminando, dijo que si no seguíamos llegaríamos en la madrugada, la seguí y ella se puso hablar como antes, esto es lindo, bueno nunca me ha gustado alguien, pero se siente muy bien, hablamos como siempre, pero se sentía bien especial...
...
Para la hora del almuerzo habíamos llegado a un pequeño pueblito, era más pequeño que en el que estuvimos la última vez, la gente no se veía muy amigable, todos estaban como a la defensiva, por reflejo agarre la mano de Andras, ella no me dijo nada, solo observaba todo, caminamos por unos minutos, nos metimos por callejones, la gente todavía nos miraba mal, en eso vi un local de comida y le dije a Andras que entramos, entramos y nos recibió una ¿Familia con armas? De inmediato puse a Andras atrás mío y me puse en posición de pelea, ellos bajaron la guardia se veía en sus miradas algo de miedo... De la cocina salió una mujer mitad ciervo diciendo que ella era la madre de todos ellos, lo mandó a la cocina y se disculpó con nosotros.
Idylla: Soy Idylla, perdón por ese recibimiento, este pueblo es conocido por odiar a los demonios, yo difiero en eso, pero no podemos salir de aquí, siéntense donde gusten, ya les traigo el menú
Nos sentamos en una mesa vacía, Idylla volvió con los menús, por curiosidad le pregunté ¿Por qué odian a los demonios?
Idylla: Bueno... Por un principio, porque las criaturas que no fueran demonios son totalmente marginadas, obligadas a vivir apartados de ellos, sin derecho a nada, la mayoría son analfabetas, en los pueblos casi no hay profesores, los que saben leer probablemente es porque tienen un familiar que vivió en la ciudad en el pasado, pero son bastante viejos... Los entiendo, pero no me gusta llegar al odio...
Vi el menú y eran sólo dibujos hechos a mano de los platos que ofrecían... Me sorprendió escuchar eso, pensé que vivían una vida como la de nosotras...
Zalir: Mm... Lo siento, no lo sabía...
Idylla: No te preocupes... Ya estamos acostumbrados, vivimos de otra manera más simple, no queremos entrar otra vez en guerra, sabemos que perderemos, no tenemos poderes como ustedes...
¿Otra vez? ¿Ya han entrado en guerra? ¿Por qué eso no está en las clases de historia que vimos en el colegio?... Solo se aprovechan de los debiles otra vez...
Zalir: ¿Hubo una guerra en el pasado?
Idylla: Sí, hace mil años hubo una guerra entre criaturas diversas y demonios, los demonios por sus poderes ganaron y nos desterraron, desde ese momento no podemos vivir donde vive un demonio, todas las criaturas lo saben, por eso temen enfrentarse a un demonio.
Zalir: Mm... Bueno... Gracias por la información
Idylla: De nada, avísenme cuando vayan a pedir algo
Ella se fue y yo me quedé pensando, ¿Por qué los demonios quisieron desterrar todas las criaturas? No tiene sentido, ellos no hacen daño y son más débiles que los demonios.
Andras: Es lamentable... Y no hay ni un solo libro del tema, son crueles no quieren que los demás se enteren de lo que hicieron, en este punto toda la sociedad actual es totalmente ignorante ante el tema
Zalir: Sí... Son crueles y no les importó esconder esa parte de la historia ¿Tu ya lo sabías?
Andras: Am... Sí... Me costó años de investigación...
Zalir: ¿Cómo conseguiste información?
Andras: Había libros ocultos en un lugar de la ciudad...
Zalir: Que bueno que fuiste tú la que los encontró
Andras: Sí...
Idylla llegó y preguntó qué pediríamos, decidimos, le dijimos y luego de un rato trajo la comida.
...
Ya nos íbamos cuando Idylla nos detuvo, nos dijo que será mejor que pasemos la noche a las afueras del pueblo para que durmiéramos tranquilas, además de que está segura de que nadie querrá alojarnos, Andras le dijo que no nos quedaríamos aquí y nos fuimos.
...
Horas después llegamos a las 3 am a un bosque casi no tenía espacio para poner la carpa, pero por suerte encontramos un lugar que parece acogedor...
Andras: Amor desde ahora tenemos que tener más cuidado, mientras más cerca del rey demonio estemos más criaturas con odio hacia los demonios habrán
Ignorando todo lo que dijo, que ciertamente era importante... No para mi en ese momento lo importante fue el apodo.
Zalir: Me dijiste amor
Sonreí y ella se sonrojo, dijo que a la próxima no decía nada.
Zalir: No, no, me gusto amor
Se sonrojo más tartamudeo por un rato, hasta que alzó la voz
Andras: ¡Como sea! ¿Escuchaste lo que te dije?
Sonríe y la abracé de lado
Zalir: Si lo escuche linda, yo te protejo
Se sonrojó otra vez y dijo que fuéramos a dormir de una vez...
Fin del capítulo...
