Por Ti

Una vez Alonso y Alexandra llegaron al apartamento del primero, este la guio a su habitación ya era tarde y lo mejor es que descansen.

- Entra, es tarde lo mejor es que descanses, mañana hablamos ¿bueno?

- Si, está bien gracias y disculpa las molestias.

- Está bien, no es nada, descansa.

Alexandra al percatarse que donde iba a dormir era la habitación de Alonso, decidió preguntarle.

- Alonso esta es tu habitación, ¿tu dónde vas a dormir?

- No te preocupes yo voy a dormir en el sofá de la sala, es grande y cómodo, tu descansa.

Alexandra se quería negar y ofrecer a dormir en el sofá, pero la verdad la cama se veía muy cómoda y ella quería dormir bien después de todo lo que había pasado.

- Está bien, hasta mañana. -Dijo para cerrar la puerta y tirarse a esa cama, ya mañana solucionara todo.

Alonso se quería reír, de verdad que su preocupación por él le duro muy pero muy poco. Ya estaba recostado en el sillón, cuando su celular sonó con la llamada de Javier, al cual una vez entraron en la fiesta se le desapareció y ya no supo nada mas de Alonso lo que lo tenía preocupado.

- Amigo, ¿Qué paso? Una vez llegamos a la fiesta te desapareciste. – Reclama Javier entre molesto y aliviado de que le conteste el celular, lo que significa que todo está bien.

- Javier discúlpame, justo en ese momento era un caos y todo sucedió muy rápido, pero no te preocupes todo está bien, Alexandra está conmigo en este momento. – Responde apenado pues cierto que en cuanto vio a Alexandra se olvidó de todo lo demás hasta de Javier que lo había acompañado muy amablemente.

- Qué bueno, entonces descansa, más tarde hablamos.

- Está bien amigo gracias.

Alonso no pudo dormir bien, pues varias inquietudes rondaban sus pensamientos, lo que más le preocupaba aparte del escándalo que seguramente habría en la universidad por lo sucedido, ya que al final de cuentas encontraría una forma para solucionarlo y que Alexandra saliera lo menos afectada posible, es que esa exposición alerte a sus posibles enemigos que aún no saben quién es ella en realidad.

En sus pensamientos Alonso sabe que debe encontrar una manera de que esto no pase a mayores, no puede permitir que Alexandra se exponga más, lo ideal es que mantenga el perfil bajo que lleva hasta el momento, pero ese mocoso de Andrés lo va a conocer, eso no se va a quedar así.

Mientras el pobre Alonso se desvelaba con todos estos pensamientos en mente, Alexandra dormía plácidamente sin la más mínima preocupación, ya que ella en realidad no era muy consciente del peligro a su alrededor, cuando paso lo del incendio ella era muy pequeña y por todo el shock de la situación la verdad es que no tiene muchos recuerdos de lo sucedido. Pero eso no lo saben sus enemigos y es que, aunque ella no lo recuerde, es clave para revelar un gran secreto que puede ser una gran amenaza para más de una persona involucrada.