Los Beaumont una familia con un fuerte legado, lucharán por permanecer unidos a pesar de los tenebrosos secretos familiares.
Una historia donde se puede ver como cada uno de los miembros hace su vida con altibajos, en especial enfrentándose a su desalmada madre
Siendo afectados de distintas maneras, sobre todo por sus formas de ser tan marcadas, deberán seguir adelante pese a la destruida relación entre los patriarcas de la familia y entre la propia madre con sus hijos.
¿Podrá la familia seguir adelante? ¿Podrán la diferencias que hay entre las hermanas gemelas ser superadas?¿podrán superar los oscuros secretos familiares?
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Rumbos
Stus y sus hombres también ingresaron al salón preocupándose por la seguridad de Karim. Pero él habló en árabe y los mando a salir de la habitación.
— Eres terco, le dijo Stus en arabe saliendo del lugar.
Karim se movió estaba molesto como se había atrevido Katherine a ponerse delante de él como si necesitara su protección, aunque le dio algo de ternura al observarla de perfil desafiando a sus hermanos.
— ¡Muévete Katherine!, exclamó Chris Beaumont.
— No, no lo haré tú no eres mi padre y no tengo por qué rendir cuentas de mis acciones ya soy mayor de edad.
— Eres una tonta, cuando termine de usarte va a deshacerse de ti dijo Chris.
— Tal vez así tomes conciencia de lo que haces con las mujeres le dijo Kat.
Chris movió su mano para agarrar a Katherine, al observarlo Karim se interpuso.
— Ni se ocurra ponerle una mano encima le advirtió Karim.
— ¡ Chris detente!, exclamó Henry, temiendo que se agarraran a los golpes y Kat resultará herida. ¡Kat ve afuera!.
— Por supuesto que no, no soy una niña.
Karim se giró y la miró — ¡Ve con tu padre!, le ordenó te alcanzaré en unos minutos.
— Tampoco te obedeceré a ti dijo ella mirándolo de manera desafiante.
En ese momento la puerta se abrió e ingreso Charles Beaumont acompañado por Natalie.
— Salgan todos de aquí conversaré a solas con Karim dijo Charles. — Natalie lleva a tu hermana contigo, les recuerdo que hay invitados y están aquí por ti Kat.
— Estan aquí por el apellido Beaumont y Zouvelekis, no por mí. Al demonio con el maldito cumpleaños dijo Kat dirigiéndose a la escalera se iba a su habitación.
— Katherine Beaumont, vuelve aquí inmediatamente le dijo Charles, no había gritado, al contrario, había bajado más la voz. Su padre tenía una forma particular de llamar la atención cuando estaba enfurecido, no gritaba, ni golpeaba las cosas, nunca había golpeado a sus hijos, pero siempre se hacía respetar . Ella se detuvo, giro y observó a su padre.
— Ve con tu hermana a atender a los invitados, si quieres que te trate como una adulta, compórtate como tal.
Kat lo miro, estaba muy molesta, pero obedecio a su padre, bajo los escalones y cuando finalmente estuvo frente a él. Lo miró a los ojos.
— ¡Cómo órdenes papá!, exclamó ella.
Tenía los ojos tristes pensó Charles sintió un profundo dolor por su hija.— Karim se reunirá contigo en unos minutos. Ella sonrió y se dirigió al jardín.
Henry negó con la cabeza, no podía creer que su padre estuviera cediendo.
En cuanto se quedaron solos Charles le pidió que se sentarán.
— Le diré lo mismo que le dije a Alexos, respeto a Katherine, mis intenciones son. serias dijo Karim.
—Tú tienes unos treinta años dijo Charles.
— Lo sé, y creame intente mantener mi distancia, cuanto ha visto es cuanto hubo entre nosotros. Respeto los límites de Katherine dijo Karim.
— Sé sincero contigo no me agrada, pero conozco lo suficiente a mi hija para saber que si me niego a aceptarte seguramente me llevará la contraria, en el fondo confío en que con el paso de los días y un océano de por medio, ella se olvide de ti, aun así tienes mi permiso. Pero te recuerdo que estamos hablando de mi princesa, trátala con respeto dijo Charles.
— Así lo haré dijo Karim poniéndose de pie para dirigirse a buscar a Katherine.
Ella se encontraba conversando con Xiomara cuando Karim se acercó.
— Baila conmigo habibati exclamó él.
Ella lo miró y tomó su mano, y se dirigió a la pista.
— No debería bailar contigo sigo molesta no me gusta la forma en la que te comportas dijo ella.
— No entiendo que te moleste que un hombre actúe como un hombre –le contestó divertido–. Salvo que te gusten los tipos blandos... en cuyo caso jamás te gustaré yo.
Kat lo estudió involuntariamente con la mirada y no pudo evitar esbozar una sonrisa. Kat pensó aturdida que tenía las pestañas demasiado bonitas. Se le secó la boca y le costó pensar.
–Me deseas, aunque estés molesta–le dijo y sin previo aviso, tomó su rostro y la besó. Fue un beso embriagador, como un chupete de adrenalina en vena.
En la distancia Henry Beaumont los observaba.
— No puedo creer que dieras tu aprobación, comento Henry.
— Tiene dieciocho años, si quiere irse detrás de él no podría evitarlo. Mañana regresamos a Estados Unidos, Kat se irá a la universidad y esto quedará atrás, respondió Charles.
— ¿Y si no queda atrás?, pregunto Chris.
— Entonces háganse a la idea de que forma parte de la vida de tu hermana. Ojalá pusieran el mismo empeño en proteger a su hermana en su vida amorosa, ya tendría nietos dijo Charles.
La fiesta llegó a su fin todos los invitados se fueron incluso Karim.
Charles Beaumont se encontraba desayunando en la terraza. Estaba enfurecido uno de los invitados había filtrado información de la fiesta y habian publicado una fotografía de su hija con Karim.
<< Última conquista del Jeque Bakhur una princesa Beaumont >>.
— Buenos días, papá dijo Katherine.
— Buenos días, hija, pensé que no te levantarías hasta que nos fuéramos al aeropuerto dijo Charles.
— Me desvele, dormiré durante el vuelo. Podemos hablar de lo que paso anoche.
— No fingiré que estoy de acuerdo Kat, pero no me pondré en tu contra dijo Charles.
— Sé que es algo mayor y también conozco su larga lista de conquistas, solo lo estoy conociendo. Él me respeta dijo Kat.
— Solo quiero que seas feliz dijo Charles.
Henry Beaumont apareció en ese momento, acompañado de Alexos y Natalie
— Está vez si te luciste Kat dijo Henry dejando el periódico sobre la mesa.
Ella lo miró, y tomó el periódico, había una fotografía de ella junto a Karim besandoseby varias menciones de sus últimas conquistas, Katherine terminó su fruta.
— Si a mí no me interesa, ¿por qué te preocupa a ti?, Karim es un mujeriego, al igual que Chris, Alexos, y no nos olvidemos de ti. Porque aunque no aparezcas en primera plana como Chris, todos sabemos que tienes más sacudidas que el felpudo de la sala respondió Kat provocando las risas de su hermana.
Era cerca del mediodía cuando todos salieron hacia el aeropuerto, Alexos volaría a Londres.
Henry volvería a Italia y Los Beaumont se irían a Estados Unidos.
Kat observaba a su hermana despedirse de Alexos. Natalie regresaría a Estados Unidos a preparar su boda. Fue cuando el teléfono de Katherine comenzó a sonar.
— Hable dijo ella apartándose de su familia.
— Llamaba para despedirme dijo Karim.
— No era necesario dijo ella burlándose.
— Serás siempre tan valiente dijo él.
— Por supuesto dijo ella riéndose. Unos coches llegaron en ese momento.
Stus abrió la puerta y Karim descendió, Kat corrió a su encuentro, Karim la observó mientras negaba con la cabeza, llevaba un short minúsculo y todo el vientre al airey se colgó de él.
—¿ Dónde está la ropa que te falta?, pregunto Karim mientras la atrapaba.
— Me gusta viajar ligero dijo ella.
— Aunque me gusta tenerte así, voy a tener que bajarte dijo él mientras la besaba.
—Eres demasiado oriental, para haberte criado en occidente dijo Kat. Karim sonrió
— Te veré en unos días habibati dijo él.
— ¿Iras a Estados Unidos?, pregunto ella sorprendida.
— Sí iré a verte habibati, voy a estar contando los minutos.— Procura taparte un poco en universidad le dijo y la besó.
—Promesas, promesas, promesas dijo ella.
— Siempre cumplo mis promesas dijo Karim y la besó.
Kat abordo el jet junto a su familia, minutos después fue el turno de Karim.