¿Quieres Ser Mi Esposa?

Ezequiel

El jueves de la semana siguiente esperaba frente a la puerta del consultorio, debían controlar a los bebes, mejor dicho a ella. Miraba en dirección a la entrada hasta que finalmente la vi caminar hacia mí, me puse de pie para saludarla.

Me estuvo evitando y odiaba eso, yo moría por tenerla cerca. Y ella, me quería a kilómetros de distancia, me lo había ganado a pulso, con mi comportamiento pasado.

Ingresamos juntos al consultorio, la doctora le hizo varias preguntas y luego le indicó que se acueste boca arriba en la camilla. Su diminuta barriga se asomó con timidez, yo sonreí feliz; mis bebes ya estaban creciendo.

Le realizó los mismos controles que la última vez, midiendo su panza. Por último la ecografía, era lo que yo más esperaba, apenas se vio la imagen en la pantalla, nos confirmó que eran dos niños.

 ¡Íbamos a tener dos varones!

Estaba muy feliz de saberlo, tenía algunos nombres pensados, que serían perfectos si ella los aprobaba ¡por supuesto!

Guardaría los de niña para el próximo embarazo. Quizás me estoy adelantando demasiado, a pesar de su notable odio hacia mí, tengo la esperanza de que podamos llegar a ser una familia.

_ ¿quieres que almorcemos juntos? _ le pregunté cuando salíamos juntos en dirección al estacionamiento _ debemos elegir los nombres y tengo algunas ideas

_ te agradezco, pero tengo una reunión con mi hermano y unos clientes. Además, tenemos tiempo, todavía no nacerán

_ ¿y mañana? _ necesitaba pasar tiempo con ella; hablar al menos de los niños

_ tengo que ir con nuestras abuelas y tu madre a verificar las flores y unos detalles de la boda _ suspiró con cansancio

_ parece que no te gusta la idea, ¿quieres que te acompañe?

_ no es necesario, a menos que entiendas los diferentes tonos de blanco _ curvo eso preciosos labios con delicadeza mirándome, había esquivado mis ojos todo el tiempo.

_ realmente no _ sonreí, giró su rostro y continuo caminando_ pero puedo acompañarte _ nos detuvimos frente a su auto

_ no es necesario

_ Me mudé, ya estoy viviendo en nuestra casa _ le expliqué, en mi absurdo intento de retenerla

_ ya me lo dijiste..

 _ si me necesitas sabes donde encontrarme.. También tienes mi número para llamarme o responder mis mensajes _ di un paso adelante y supliqué muy cerca _ ¡por favor! Responde mis mensajes

_ lo haré _ retrocedió, abriendo su auto _ nos vemos otro día _ subió.

Se fue dejándome allí. Sin excusas para retenerla

Será tu esposa, vivirán juntos. Me consolé

Cuatro días después recibí la visita de mi abuela en la oficina, quien me obligó a ir hasta la boutique para elegir mi traje de boda

_ ¡ese es perfecto! _ dijo cuando salí a mirarme al espejo. Era blanco, sinceramente odiaba ese color y me sentía ridículo

_ no me gusta abuela

_ hazlo por tu novia.. Estarán bellísimos si los dos van de blanco

_ de acuerdo, pero usaré una camisa y zapatos negros.. _ vi por el espejo que tomo un moño muy sonriente _ ¡sin moño abuela!

_ ¡eres imposible!

_ si ya terminamos, debo regresar a trabajar

_ no, debemos ir a degustar la comida de tu boda, ya le pedí a Nolan que posponga tus reuniones.

_ no tengo tiempo abuela, me retrasaré _ lo único que quería era regresar al trabajo

_ que lastima, tendré que hacerlo solo con Laura entonces....

_ ¿a qué hora es?

_ en 45 minutos..

En cuanto llegamos al restaurante mis ojos la buscaron, hasta encontrarla junto a su padre, riéndose, mientras le daba de comer una porción de comida. Sentí envidia

_ buenas tardes _ dije, me miraron

_ hola.._ susurró sorprendida_ yo no sabía que vendrías..

_ Buenas tardes. _ mencionó su padre, tomando una servilleta para limpiar su boca

_ debía hacerlo.. No conoces lo que me gusta y lo que no, además de ti, mi amor.. _ el rubor recorrió sus mejillas, eso era algo que siempre pasaba ya sea porque esta enojada o por vergüenza y creo que ahora tiene ambos sentimientos

_ le estaba diciendo que debía agregar algo de pescado..

_ no papá, ¡odio el pescado!

_ hija, no seas egoísta, debes preguntarle a tu futuro esposo también

_ a mí tampoco me gusta, así que podemos evitarlo _ me miró sonriente

_ está bien, me rindo.._ exclamó su padre

_ ¿ya hicieron la lista de la comida salada? _ preguntó mi abuela.

_ sí, aquí está _ respondió Laura entregándole un papel, sin preguntarme si estaba de acuerdo

_ ahora vayan a probar los pasteles, para ver cuál quieren..

_ ve hija, yo necesito pasar al baño _ agradecí internamente a mi suegro por el espacio

Caminamos juntos hasta los pasteles, ella degustaba con su tenedor cada diminuto plato que tenia un pastel miniatura, mientras que yo, fantaseaba con saborearla a ella.

_ ¿no probarás? _ preguntó mirándome, luego del quinto bocado

Esta mujer me gustaba, pero ella y comida de por medio provocaban que me volviera.. Más.. ¿Hambriento?

_ si _ me acerque y le robe un beso tomandola desprevenida _ me gusta este, me lami los labios

_ ¡niños! guarden los arrumacos para cuando están solos... _ si no fuese por mi abuela estoy seguro de que ese tenedor, terminaría en mi ojo por lo furiosa que se veía _ ¿Ya eligieron?

_ si _ respondió enojada _ el pastel de frutillas _ Me reí, porque ni siquiera lo había probado, era el siguiente; por eso la besé antes

_ entonces tendremos que hacer dos pasteles explicó mi abuela

_ no es necesario. Que hagan lo que Laura eligio de todos modos en nuestra boda lo que menos desearía comer es el pastel _ mencione sonriente.

El rostro de Laura se desfiguró, volviéndose rojo de nuevo

¡Tan hermosa!