Valentim Espósito es uno de los herederos de la mafia italiana.
Su hermano mayor es el nuevo líder, y Valentim ayuda en todo lo que puede en los negocios de la familia.
Cuando su hermano viaja a Brasil en busca de su prometida, Valentim se ve al mando de manera temporal, y con la ayuda de un joven sicario seleccionado por su hermano, investiga desapariciones que podrían involucrar a la mafia de su familia.
Pero Valentim guarda un secreto de todos, incluso de su familia: su sexualidad.
Desde adolescente sabía que era gay, pero mantuvo ese secreto para no perjudicar su reputación en la mafia.
Ahora, el joven Pietro, quien lo está ayudando, siempre ha sentido un amor platónico por él, pero nunca pensó que sería posible estar realmente con Valentim… ¿será que este amor podría concretarse ahora?
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Capítulo 23
Pietro
Un mes y quince días después...
Finalmente pude volver a mi rutina normal, no aguantaba más tener que hacer reposo. Durante ese tiempo, Valentín y yo apenas nos hablamos o nos vimos. Él me visitó solo dos veces cuando estaba en reposo en casa de mis padres, y el único mensaje que me enviaba era un "buen día", "buenas tardes", "buenas noches", "¿cómo estás?", "¿cuándo vuelves?" eran las únicas cosas que decía.
Amoecé temprano, animada por finalmente poder retomar mi rutina. No podía soportar más estar en casa. Me hice la higiene y, cuando salía de casa, mi celular vibra con un mensaje; pensé que era Valentín mandándome un buen día, pero me sorprendo al ver el nombre de Marcos, el primer hombre que besé.
"📨Buen día, ¿vamos a desayunar juntos? Estoy en nuestra cafetería favorita. 📨"
Marcos y yo solo tuvimos un encuentro, pero se había convertido en un gran amigo. Era brasileño, pero siempre venía a Italia a trabajar. Le respondo que llegaré a la cafetería en 15 minutos y él dice que ya está en camino.
Salgo de casa con mi coche y voy hasta la cafetería. Al llegar, veo a Marcos, quien estaba sentado frente a una gran pared de vidrio. Estaciono el coche y me acerco a él, Marcos era un hombre atractivo.
Cuando entro a la cafetería, me ve y se levanta para abrazarme. Me abraza y me da un beso en el cuello como siempre hacía.
Marcos: ¿Cuánto tiempo, eh?
Pietro: Realmente.
Seguimos conversando, pido un café y él también. Estaba distraído hablando con él cuando siento un olor familiar detrás de mí y de repente escucho la voz.
Valentín: ¿Interrumpo?
Veo que Marcos lo mira de pies a cabeza y luego responde.
Marcos: Claro que no, amor.
Valentín: Genial.
Me mira y se levanta de la mesa. Pensé que se iba, pero solo salió a buscar una silla de otra mesa y la puso a mi lado.
Se sienta y coloca una mano en mi muslo, apretando con fuerza. Marcos lo mira serio y luego me pregunta.
Marcos: ¿novio o soltero?
Pietro: Soltero.
Valentín aprieta mi muslo con fuerza y dice.
Valentín: Salando.
Marcos: ¿está o no está? Tengo un amigo que se volvió loco por ti cuando vio tu foto.
Valentín: ¿qué parte no entendiste? Él tiene novia, por Dios.
Él se levanta con cara de enojo y me hace señas para que me levante.
Valentín: Vamos, Pietro.
Pietro: No.
Valentín: No pongas a prueba mi paciencia.
Pietro: No soy tu mascota.
Valentín: ¿No vas a ir?
Pietro: No.
Valentín: Entonces prepárate para las consecuencias.
Sale furioso y me quedo con Marcos, quien no puede dejar de reírse de la escena. Tomamos café y luego me voy; tengo que ir directo al galpón, ya que hoy regreso a las actividades.
Al llegar, veo a Valentín a lo lejos. Como siempre, estaba guapo, pero como estaba con su hermano, apenas me miró.
Fui a mi sala de investigación y pasé casi toda la mañana allí. Tuve que limpiar, ya que estuve cerrada por más de un mes. Estaba casi a la hora del almuerzo cuando iba a salir a comer, cuando abro la puerta, soy sorprendido por un ogro que entra y cierra la puerta.
Pietro: Valentín, ¿qué haces aquí?
Valentín: ¿Por qué tardaste tanto en venir al galpón?
Pietro: Estaba ocupado.
Valentín: No quiero que estés con otros hombres, por Dios, ya tienes al tuyo.
Pietro: ¿Dónde está?
En un movimiento rápido, él me empuja contra la pared y sostiene mi cuello, y comienza a darme un beso caliente, lleno de deseo. Yo respondo, estaba muriendo de ganas del modo brusco de mi ogro. Él quita la mano de mi cuello y coloca una en mi nuca, mientras que la otra baja hacia mi entrepierna, que ya estaba tan dura que embiste la suya. Cuando aprieta mi miembro, suelto un gemido de placer y él sonríe con picardía.
Él empieza a recorrer mis besos por mi cuello y da algunos chupetones, poco después vuelve a besarme. Yo meto la mano dentro de su camisa y le rasguño la espalda suavemente. En un movimiento rápido, mientras me besa, abre mi pantalón con agilidad y saca mi miembro.
Pietro: Valentín.
Digo jadeando entre los besos, y él responde deteniendo el beso.
Valentín: Solo quiero darte placer.
Se agacha delante de mí y le miro, es como un sueño, empieza a chuparme el miembro, empezando por la cabeza, mientras chupa me masajea los testículos.
Pietro: aaaah....
Valentine: Shh, alguien puede oír.
Dice esto y empieza a chupármela de nuevo, empieza por la cabeza y luego se traga mi polla con agilidad, no podría aguantar mucho, Valentim se mete toda mi polla en la boca, hasta la garganta.
Voy... voy... voy a venir...
Valentine: Ven y disfruta de mí, pequeño gilipollas.
Intensifica el movimiento y yo no aguanto mucho y me corro en toda su boca.
Pietro: aaaaaaaaahhh...
Se lo traga todo sin dejar que salga nada de su boca, y yo me quedo mirando a ese hombre tan guapo que se levanta y me mira con esa mirada tan sexy en los ojos. Me empuja de nuevo contra la pared y me besa, haciéndome saborear, y luego deja el beso y sale de mi habitación sin decir ni una palabra.
Y me quedé alucinado, no podía creer lo que acababa de pasar, Valentine me la acababa de chupar y se había llevado todo mi esperma, me volví a meter el miembro en los pantalones y me preparé, me volví a sentar en mi escritorio pero lo que acababa de pasar no salía de mi cabeza.