ochos años de mi vida dedicados a Mauricio, me había entregado en cuerpo y mal, ¿para que?
si lo único que recibí a cambio fue engaño.
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Capitulo 23.
Todos estuvieron acompañando a carla, ninguno de ellos quería irse antes de que ella despertara.
_ Hola princesa.- dijo Antonio al ver que su hija abría los ojos.
_ Hola padre.- contesto ella.
Ella se sentía algo desorientada, no sabía donde se encontraba ni que le había pasado.
_ Donde estoy.- pregunto ella.
_ Estas en la clínica.- respondió su madre.
_ Que me paso.- pregunto ella nuevamente.
_ Aún no lo sabes, estamos esperando que la doctora venga y nos dé toda la información. - Respondió Alexa.
Carla asintió, ella quiso sentarse, pero sintió un fuerte dolor en su vientre.
_ Ten cuidado, aún no sabemos que te ocurrió.- le dijo laura.
Carla les comento lo que había pasado en casa de los padres de Mauricio y como se empezó a sentirse mal una vez que salió de esa casa, la conversación era armoniosa hasta que llego la doctora y los interrumpió.
_ Buenas tardes.- dijo la doctora.
_ Buenas tardes.- respondieron todos.
_ Me presento, mi hombre es Victoria Gómez, soy ginecóloga y fui la encargada de atender a la paciente.- se presentó la mujer.
_ Mucho gusto doctora y gracias por lo que ha hecho por mi hija.- dijo laura.
_ Lo hice con todo gusto, ahora me gustaría darle la información completa de la paciente, no sé si ella se sienta cómoda si hablo delante de todos.- pregunto la doctora.
Todos miraron a carla, esperando que ella aprobara o se negara.
_ No tengo ningún inconveniente, así que hable tranquila.- respondió ella.
La doctora hojeó los papeles que tenían en las manos.
_ Buenos, a la paciente tuvimos que realizar una cistectomía para extirpar un quiste que tenía en unos de sus ovarios, el dolor que presento fue producto de una torsión ovárica.- dijo la mujer.
_ Quiste.- pregunto Laura.
_ Si, la paciente presentaba, esto rara vez pasa, normalmente estos quistes desaparecen por sí solo, pero en el caso de su hija, no fue así, por lo tanto, este creció tanto provocando tal dolor.- dijo la mujer.
_ Doctora, es posible que ese quiste sea la causa del que no haya podido tener hijo.- pregunto carla.
_ No, pero no entiendo por qué dije que no ha podido tener hijo, según todas la pruebas que hice, todo está bien con usted.- dijo la mujer mientras volvía revisar los documento en sus manos.
_ Que quiere decir doctora.- preguntó Laura.
_ Que la paciente es acta para concebir, tanto sus ovarios como su útero están en perfecto estado, el conteo de óvulos también es normal.- finalizo la mujer.
Carla, estaba en shock, ella había visitado varias clínicas de fertilidad con Mauricio, en donde le había recomendado tratamientos que le ayudaran con su baja producción de óvulos.
_ Es posible que el último tratamiento haya funcionado.- pregunto laura.
_ Es posible, de igual forma me gustaría verificar la información, si no es molestia me gustaría verificar los medicamentos que ha estado timando, quizás el quiste haya sido producto de esos medicamentos.- dijo la doctora.
_ En este momento voy por ellos.- dijo Alexa.
_ Yo te acompañó.- dijo Marcos.
Alexa asintió y salió junto con Marcos, el resto se quedó con la doctora.
_ Bueno, por el momento, todo está bien, por esta noche estarás en observación, el día de mañana serás dada de alta.- dijo la doctora para después salir de la habitación.
…
Mauricio se sentía angustiado al no tener noticia de carla, él moria por ir a verla, pero tenía claro que no sería bien recibido, y tampoco quería hacerla pasar un mal rato.
_ Que haces aquí afuera.- le pregunto Sofía a Mauricio.
nada.- respondió él. Ya mis padres empacaron sus cosas.
_ Sí, tampoco ahí mucho que llevar.- respondió ella.
_ bien en ese caso, diles que los empero en el coche.- Mauricio camino hacia el garage con su hijo aún en brazo.
Diez minutos después apareció Sofía con sus suegros, todo el camino estuvieron el silencio, pues la verdad tampoco había mucho que hablar. Cuarenta minutos después ya estaba todo ingresando al apartamento.
_ es lindo.- dijo la madre de Mauricio.
_ sí, y tiene habitaciones para todos, aquí podrán estar cómodos.- respondió Mauricio.
Mauricio llevó a sus padres a la habitación que ocuparan, para luego llevar a Sofía a la suya.
_ esta será tu habitación, tú y Nico estarán cómodos, mañana compraré los muebles para la habitación de nuestro hijo, así que por hi duerme con él.- dijo él.
_ como así, tú no dormirás conmigo.- pregunto ella.
Mauricio se quedó en silencio, él no quería lastimarla, pero era lago que no podía esperar.
_ sé que debemos hablar, pero será mañana.- le dijo Mauricio, para luego girarse para salir de la habitación.
_ Hablar de que, que es lo que quieres decirme.- Sofía estaba molesta, así que lo detuvo.
_Mañana\, hablaremos con calma\, descansa.- Mauricio tomo la mano de Sofía que lo sujeta._ Te prometo que mañana hablaremos con calma.
Mauricio salió dejando a Sofía con muchas preguntas, que era lo que pasaba, que era lo que había cambiado en su relación.
…
Mauricio.
Después de dejar a Sofía en su habitación, me fui a la mía, necesitaba una ducha y relajarme. Necesitaba pensar con claridad las cosas, mi vida estaba hecha un lío, pero no podía dejar de pensar en carla.
Después de salir de la ducha me fui directo a la cama, di vuelta y vuelta, pero no lograba conciliar el sueño, a esos de las diez de la noche, decidí llamar a mis ex suegros para saber de Carla, pero ninguno contesto, quizás estaban ocupados o simplemente no querían hablar conmigo.
Luego recuerde que tenía la tarjeta de Manuel Castañeda, así que lo llamen a ver qué noticias tenía de Carla.
_ buenas noches.- dije cuando él contestó.
_ Buenas noches.- respondió él.
_ Hola Manuel, habla Mauricio.- dije.
_ En que te puedo ayudar.- su voz sonaba molestas.
_ Disculpa la hora, pero quisiera saber si tienes alguna noticia de carla.- le pregunte.
_ Ella se encuentra dormida.- me dijo.
Me quedé en silencio analizando la situación, ella se encontraba dormida. Si él sabía eso era porque se encontraba con ella.
_ Estas con ella.- pregunté.
_ Sí.- respondió sin dudar.
_ Que haces con ella.- pregunte molesto.
_ Eso es algo que a ti, no tiene por qué importarte Mauricio, ahora si me disculpa debo descansar.
Sentía la cara caliente del enojo, ese maldito se estaba aprovechando de la situación para acercarse a ella.
Si antes no había podido dirigir, ahora estaba peor, el enojo era tanto que sentía mi boca doler, de lo mucho que apretaba los dientes.
Felicidades a la escritora y muchas bendiciones para que siga deleitandonos con estas historias maravillosas.
muchas muchas gracias por compartirla
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