Una emocionante historia sobre un Alfa extraterrestre que encuentra a su omega destinado en un soldado humano. Contenido explicito sobre extraterrestres que embarazan machos humanos, así que están advertidos.
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Capítulo 22
—Apoyo a Zagh en esto, Val Jared es un ser cruel y malvado que disfruta hacerte sufrir aunque hables con él no es seguro que lo apruebe, ¿¡Ya olvidaste cuantas veces tuve que limpiar sangre de tu rostro cuando ese imbécil te golpeó por diversión!? —Bruce estaba realmente enfadado.
—Estaré bien, Bruce no te preocupes por eso. Zagh te amo, pero necesito que me dejes hablar con él usar la puerta es la forma más fácil, rápida y sobre todo segura de traer a Todd.
Jared camino en su laboratorio de arriba a abajo sólo esperaba que su hermano accediera a hablar con él, sabía que era egoísta pedírselo pero estaba cansado de sentirse tan solo y miserable, él tenía un hermano con quien tal vez podría relacionarse. Si este al menos le daba una opo, se había pasado los últimos años buscándolo sin ningún resultado por eso cuando lo vio en la estación supo que tenía que hablarle, pero la situación se volvió caótica antes de lograr hacerlo, afortunadamente fue asignado a la nave donde al parecer su hermano era el esposo del comandante. Desde entonces el había intentado verlo por medio de Bruce pero este lo amenazó con lanzarlo al vacío del espacio, al igual que Mike, luego intentó concertar una cita con el pero no lo logró así que la primera vez que lo vio desde que subió a la nave fue durante la reunión para informar sobre su investigación con el resto pero Val actuó como si no lo conociera lo cual le habría creído de no ser por las miradas de ira que este le lanzó antes de marcharse, escuchó unos pasos y Val estaba frente a él en el marco de la puerta mirando hacia un lado, era claro que desearía estar en cualquier otra parte que no fuera aqui.
—¿Sabes que nuestros padres murieron? —no sabía que más decir así que fue lo primero que dijo, su hermano tenía derecho a saberlo después de todo ellos también eran sus padres.
—Lo sé, lo lamento mucho —había sinceridad en sus palabras aunque no dolor o sufrimiento por la pérdida.
—¿Es todo lo que tienes que decir? Eran nuestros padres, ya no están, jamás lo veras de nuevo. No parece que sus muertes te importé ni un poco.
—De verdad lo siento, no imagino lo difícil que debes haberlo pasado —seguía sin haber en el algún tipo de respuesta emocional fuerte .
—¿Porque actúas como si no tuviera nada que ver contigo? ¿Es que acaso no te importa ni un poco? ¿No te dolieron sus muertes? ¡¡Eran nuestros padres!! ¿¡Porque no te importa!?
—Es que no tiene nada que ver conmigo.
—¿Como es que las muertes de nuestros padres no tienen nada que ver contigo? Explicate por favor.
—Porque eran tus padres no míos, ustedes me dejaron eso muy claro cuando me sacaron del núcleo familiar. Yo ni siquiera los conocía bien porque ellos pasaban todo su tiempo contigo.
—Eran tu única familia y están muertos—Jared susurró con enojo.
—No Jared, no lo eran, ellos eran tu familia. Yo tengo una familia a la que amó y que no me pateó a la calle por alguien mejor y tengo la suerte de que estén todos bien en casa.
—¿Sigues molestó y actuando como un niño por eso? Han pasado más de 15 año ya superalo, se supone que eres un adulto, actúa como tal —mierda ¿porque estaba diciendo esto? Este no era el plan se suponía que se disculparía con Val e imploraria su perdón para intentar ser parte de su vida.
—Lo e hecho, seguí con mi vida y no mire atrás deberías hacer lo mismo, con el tiempo las cosas tal vez mejoren, si eso es todo yo debo volver con Zagh.
—O si, si, si, si lo olvidaba eres la puta personal del comandante extraterrestre ¿Es verdad que lo conquistaste abriendo tus piernas para el? ¿Cómo se siente ser la ramera de un extraterrestre? —Val se detuvo pero no volteó.
—No te debo explicaciones Jared, no me harás sentir mal por vivir mi vida a mi manera, no cuando tú y tus padres me expulsaron de las suyas ahora ya hablamos, cumple con tu parte y autoriza la maldita puerta —el tono fue de ira y decepción.
—¿Para que? ¿Para que puedas traer a alguien más de tu preciosa y perfecta familia? Quién será esta vez otro hermano, un padre, un tío, un sobrino —Por un carajo callate se dijo mentalmente pero su boca parecía haber perdido la conexión con su cerebro y actuaba por sí sola moviéndose sin poder detenerla, esta vez Val volteó.
—A mi hijo, tiene 9 y no quiero que pase por lo mismo que yo a esa edad, no quiero que este solo.
—¿Tengo un sobrino? Vaya eso es, es...es estupendo —Jared se sintió realmente feliz ante la noticia.
—No, no, no tu no tienes un sobrino, Todd no es nada tuyo, así que aléjate de él. Eres malo, malo y no quiero que lo dañes, el es un niño dulce y bueno, no te necesita para amargarlo y arruinar todo lo bueno que existe en su vida.
—No soy un monstruo como tú crees Val, yo nunca dañaría a un niño —tragó saliva—. Nunca dañaría un niño...otra vez, en aquel entonces yo era sólo un mocoso presumido creeme no quiero que mi sobrino sufra o pase algún momento de soledad o tristeza.
—Aunque el en realidad está con mi madre y no está sufriendo, el que está sufriendo soy yo, porque lo extraño demasiado pero no importa encontraré otra forma, no quiero que pienses ni por un minuto que tendrás algún acceso a él, no te debo nada —terminó marchándose.
—Soy un imbécil —suspiró cuando Val se marchó había hecho a su hermano rogarle cuando esté sólo quería traer a su sobrino a bordo, vaya él ni siquiera sabía que era tío, bueno no había visto a Val desde que les dijo a sus padres que era vergonzoso tener lazos con él, además no era tío eso se lo habían dejado en claro. Peyo existía una persona con su mismo ADN por allí, eso le calentaba el corazón.