si soy yo de nuevo haciendo todo lo que mi familia o mejor dicho mi hermana menor quiere que haga.
mi nombre es Elizabeth Jackson oconor, tengo 26 años, estaba comprometida con un hombre que nisiquiera conocía pero mi tragedia no comienza allí, todo va muy mal cuando mi hermana menor crece y empieza a querer todo lo qué es mio y no entiendo que, si nisiquiera tengo nada ya que mis padres la quieren más a ella por su culpa termino muriendo traicionanda por mi única hermana y esposo llena de deseos de venganza pero algún Dios me vio tan desesperada que decidió darme una segunda oportunidad para acabar con las personas que me hicieron daño hasta la muerte y está vez no desaprovechare esta oportunidad.
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VERDADES
●Elizabeth: Este hombre habla como si realmente sintiera algo por mí, aunque sé muy bien que eso nunca ocurrirá. Aún sabiendo lo que pasó en el pasado, no entiendo por qué me está ayudando tanto, pero eso no importa; tengo que recompensarlo adecuadamente por todo esto. Salgo de la habitación y voy a la sala; allí están todos comiendo. Hola, familia, disculpen la demora, me quedé dormida y perdí la noción del tiempo,Pronto todos terminamos de comer y cada uno comenzó a hacer lo suyo. Yo voy a relajarme un rato en la piscina para poder planear bien qué hacer esta noche cuando me encuentre con Aurora. Después de un rato, salgo y me dirijo a mi habitación, pero escucho a Aurora algo alterada hablando por teléfono. Me escondo y comienzo a escuchar en silencio.
●Aurora: ya basta, Miguel. Deja de decir tonterías. No me importa que tu hermana te necesite; hoy debes estar conmigo. Te lo dije: no puedo cancelar la cena con esa mujer. Necesitamos continuar con el plan, así que haz lo que quieras, pero hoy sacaré a Elizabeth de la vida de Máximo. Está claro, si sabes lo que te conviene. No me falles, porque sabes de lo que soy capaz. Terminé la llamada, miré hacia la puerta ya que me pareció escuchar un ruido. Fui a ver, pero no había nadie. Cerré mi puerta y entré a la ducha.
●Elizabeth: así que esta maldita quiere hacerme en esta vida lo mismo que me hizo en la anterior. Esta vez estoy tan furiosa, esa perra me las pagará. Tomé mi teléfono y busqué a hombres que paguen por tener sexo con jóvenes. Escogí al más gordo y horrible posible, le mostré la foto de mi hermana y concretamos una cita hoy en el hotel donde me voy a encontrar con Aurora a las 9:20 de la noche. Esta vez serás tú la que sentirá todo ese dolor por el que yo pasé, aunque esto no se compara con lo que me hicieron, pronto llegó la hora de prepararme para esperar a Máximo.
●Máximo: me retrasé un poco para ir por Elizabeth porque tuve algunos inconvenientes en la empresa. Además, mi tío volvió a hacer uno de sus shows en la compañía. Durante todo este tiempo lo he mantenido bien vigilado; no permitiré que le haga daño a mi abuelo. Después de conducir media hora, llegué por Elizabeth, toqué el timbre y ella me abrió la puerta. Me quedé con la boca abierta por lo hermosa que está. 'Hola, cariño, qué guapa estás. Ven, dame un abrazo. Hoy ha sido un día algo cansado para mí.' Me mira, pero no duda en darme el abrazo que le pedí. La acaricio con mucha ternura. Gracias por permitirme hacer todo lo que deseo.
●Elizabeth: No te preocupes, a veces todos necesitamos que alguien nos abrace para sentirnos tranquilos. Yo también tengo mucho por lo que agradecerte; un abrazo no significa nada. Dejemos la charla y vayamos, que nos están esperando. Máximo me ayudó a subir al auto y en poco tiempo llegamos a nuestro destino. Buenas noches, mi nombre es Elizabeth Jackson O'Connor. Tengo una reserva aquí; ¿podría verificar si alguien me está esperando, por favor?
● Mesero: Buenas noches, señora. Por favor, espere un momento mientras reviso. Efectivamente, ya la están esperando. Síganme, los llevaré a su mesa. Caballero, aquí está la señora a la que esperaba. Si necesitan algo, no duden en llamarme. Me retiro.
●Máximo: muchas gracias, pero estamos bien así. Tomo la silla y la abro para que Elizabeth se siente, y yo hago lo mismo. Buenas noches, disculpe la tardanza; tuvimos algunos problemas, pero qué bueno que nos esperó. Mi nombre es Máximo Salvatierra, el prometido de Elizabeth.
●Investigador: mucho gusto, señor. Me alegra que la señorita Elizabeth haya traído a alguien con ella, porque algunas de las cosas que descubrí son algo preocupantes. Primero, empecemos por lo más importante: seguí a su hermana y al señor Bladimir, y ellos están juntos. No sé si tienen una relación amorosa o simplemente están teniendo encuentros casuales. Aquí están las fotos. Además, usted tenía razón: su madre tiene varios amantes y también tiene tratos con un hombre que estuvo en la cárcel por asesinato y robo, hace poco tuvo contacto con ese hombre y temo que no es en absoluto bueno.
●Máximo: Elizabeth, tú sospechabas de todo esto. Por Dios, ¿cómo puede tu familia ser tan desalmada? Tu padre se arrepentirá de todo lo que te hizo, cariño. Sabes que no tienes por qué sentirte mal, porque de ahora en adelante yo seré tu única familia, y cualquier persona que se meta contigo lo pagará caro. La tomo de la mano y ella me sonríe amablemente.
●Elizabeth: No te preocupes, Máximo. Cuando mande a investigar a esas arpías, ya estaba preparada para cualquier cosa, pero es mejor no interrumpir al investigador y dejemos que nos cuente todo lo que descubrió. Disculpe, siga.
●Investigador: Bueno, señorita Elizabeth, como le comentaba, su hermana, además de estar con Bladimir y su amigo Miguel, tiene a tres hombres más con quienes pasar el rato, y lo que más me preocupa es que hoy han estado en mucho movimiento y, por lo que pude averiguar, le están tendiendo una trampa a usted, señorita Elizabeth. Además, mire, su hermana estaba recibiendo lo que parece ser droga. Y, por último, pero no menos importante, aquí está la prueba de paternidad que se mandó a realizar de su hermana Y su padre no lo abrí porque usted no me dio autorización. Bueno, eso es todo lo que tengo para informarle. La dejo, y si averiguo algo más, se lo haré saber. Ha sido un placer trabajar con usted.
●Elizabeth: muchas gracias por todo, ya le he enviado sus honorarios. Su trabajo fue de gran ayuda para mí. Que esté bien. El investigador se marcha, dejándome a solas con Máximo; lo veo, pero tiene una expresión sombría en su rostro. No te preocupes, cariño, sea lo que sea que Aurora tenga planeado para herirme, no lo logrará porque no se lo permitiré. Ahora, déjame abrir este sobre que es muy importante para mí. Lo abro con tanta prisa y, como esperaba, esa perra de Aurora no es hija de mi padre. Me da mucha felicidad que así sea; mi padre pagará por todo el daño que me hizo.
●Máximo: miro la cara de Elizabeth y se está riendo, pero no me dice nada, así que le quito el sobre de las manos y le digo: '¿Por qué no dices nada?' Miro lo que dice el sobre y me sorprendo al leerlo. En serio, Aurora no es tu hermana, por Dios. Esa mujer que se hacía pasar por tu madre es una arpía de lo peor, y así tuvieron la desfachatez de tratarte como si tú fueras la intrusa. ¡Malditas mil veces, malditas!
