No es Otra Novela de Villana a Prota I

Isabella y Andrea se desorientan en el Bosque. Siguen un sendero que no conocen, observan que las plantas están muertas, secas, no hay piedras es un terreno casi desértico, hay unos unicornios muertos, siguen la rivera del río.

- ¿Qué vemos a hacer Isabella? Este no es el camino que conocemos, ¿Cómo vinimos a parar aquí?- pregunta casi a punto de llorar Andrea.

- Tranquilízate, supongo que cuando se den cuenta, vendrán por nosotras, tengo la sospecha de que alguien con magia de viento, provocó a propósito ese remolino que nos trajo a este camino, y supongo que pudo ser Gina, ella estaba esperando el momento para vengarse, por el ridículo que hizo el año pasado en el comedor, cuando se cayó - suspira Isabella.

- Ahora que lo pienso, puede que tengas razón, pero esa mujer es una loca, está atentando contra nuestras vidas- responde Andrea, para luego preguntar:

- ¿Qué es eso?- señala una piel de serpiente como un cascarón enorme.

- ¿Crees que se trate de una serpiente?- pregunta aterrada Andrea

- No lo sé, lo sospecho, pero, sí es así. Se trataría de una muy grande, esa piel es enorme, no quiero imaginar que sea un Basilisco- responde Isabella.

De la nada, a lo lejos, aparece ese animal rastrero inmenso, negro, con su enorme cabeza con una mancha blanca parecida a una corona, tiene ojos rojos y colmillos afilados, se va acercando.

Instintivamente, ante la inminente amenaza, Isabella adquiere bajo transmutación, la forma de su animal interior un ligre blanco.

Le grita a Andrea,

- ¡Andrea, transmuta, busca tu animal interno! Ese Basilisco viene hacia acá, debemos correr rápidamente -

- No puedo, yo ya soy mitad animal-, diciendo eso se lanza al río y se transforma en una sirena de cabellos rojos.

- Pero, entonces, vete, nada lejos de aquí, sálvate tú, no puedes ver a ese animal a los ojos o morirás, sus colmillos también inoculan un veneno letal - le grita Isabella (Ella solamente recuerda al Basilisco griego y claro, también al de Harry Potter).

Desde el río Andrea contesta:

- ¡No te puedo dejar sola!-

- ¡No seas tonta!, busca la manera de nadar por aguas subterráneas hasta el Castillo del Instituto, llega hasta el lago cerca del viejo Roble, avísale a Pietro para que venga por mí, por favor, vete ya, yo estaré bien, lo prometo - mientras corre velozmente huyendo por la orilla del río, el Basilisco la persigue.

Andrea hace finalmente caso:

- ¡Está bien, voy a buscar ayuda, no te voy a abandonar!- diciendo eso se pierde nadando en la profundidad del río, lo último que vio Isabella ligre, fue la hermosa cola de sirena dorada de Andrea antes de que se hundiera por completo.

Isabella ligre, es interceptada por un dragón, quien la ataca con fuego mientras el Basilisco, casi la atrapa, ella cierra los ojos, y se transforma en humana, sus ojos se tornan blancos, cuando se empieza a elevar, el Basilisco la roza en una pierna con su colmillo venenoso, ella siente ardor, pero logra concentrarse y asciende rodeada de una nube negra, sus manos empiezan a echar chispas, está furiosa, lanza una ráfaga de rayos contra el dragón, y otro más débil contra el Basilisco, el dragón cae y se transforma en el Príncipe Rolando del Imperio Surópolis. Ella ya no tiene fuerzas.

El Basilisco pierde poder, cuando Rolando, cae inconsciente estrellándose contra el suelo muriendo por el impacto. Ya que era una aparición de su magia, la serpiente se transforma en una boa constrictor y luego en una mujer de cabellos negros que cae en el río y desaparece.

Isabella se derrumba al suelo y pierde la consciencia también el veneno, estaba haciendo estragos en su cuerpo.

Al pasar las horas, logra escuchar la voz de Pietro, pero es un león blanco, la llama, con él está el Hada, la profesora Florencia, ya no recuerda más nada, sus ojos se cierran.

Pietro se transforma en humano y carga a Isabella, llorando, observa como está muriendo, desesperado la lleva siguiendo al Hada hasta una cueva, la acuesta en el musgo.

- Por favor Hada Florencia, ayude a mi prometida, ella no puede morir- Pietro suplica entre lágrimas.

- Pietro, el veneno es letal, solamente hay una opción- responde el Hada

- Haga lo que sea, pero por favor no permita que muera- ruega Pietro.

- Debes saber, que ese veneno se contrarresta con otro veneno, es una planta que su efecto secundario es dejarla estéril, no podrá tener hijos en un 90% de probabilidad - dice con seriedad el Hada.

- ¡No me importa, la quiero viva!, no me importa si no podemos tener hijos, sálvela por favor, yo la amo - Pietro llora, decide el futuro de Isabella.

El Hada asiente, busca las plantas que mezcla con magia y le dice a Pietro que se la de a beber, una parte con su boca y la otra poción, se la aplica en la pierna ennegrecida.

Pietro le ruega al Hada, que no le mencione a nadie lo del efecto del veneno, de lo contrario no le van a aceptar que se case con Isabella, ya que no podrá dar un heredero al Imperio. Él no puede permitirlo, realmente ama a esa mujer, y la quiere tener a su lado como su Emperatriz.

Pasa una semana, y por fin Isabella se despierta en la Enfermería, es de noche. Observa como Pietro está con su mano agarrada, sentado en una silla, su cabeza reposa sobre su cama, duerme a su lado. Al sentir el movimiento de Isabella se despierta.

- Isa, mi amor, pudiste despertar ¿Cómo te sientes? ¿Estás bien?- pregunta impaciente Pietro, apretando su mano.

- Pietro, me siento muy débil, me duele la cabeza y mi pierna derecha está como dormida- responde con una voz débil Isabella

- No te agites, no te angusties, todo estará bien, eso pronto pasará - le sonríe, entre lágrimas.

- ¿Qué me pasó?- pregunta Isabella, recuerda el Basilisco, la mordida y el dragón, que al morir se transformó en Rolando.

- El Príncipe Rolando, vino a tratar de asesinarte, porque representas una amenaza para su Imperio- explica Pietro.

-Con tu poder, creen que puedes atacarlos y someterlos, se enteraron de que eres una Maga Excepcional, y quieren eliminarte para que el Imperio Ártico no sea una amenaza para ellos -

- Pero Rolando falleció, ¿eso no será un problema entre los dos imperios?- pregunta Isabella.

- No, claro que no, el Emperador de Surópolis, Armando Guerra, se desentendió del intento de asesinato hacia ti; él sabe que es muy grave lo que hicieron. De todas formas, ese príncipe no es el heredero al trono, ese hombre tiene 7 hijos - contesta Pietro.

-Pietro ¿Cómo pudieron salvarme la vida? Ese veneno del Basilisco es letal- pregunta Isabella.

Pietro se mantiene con cara de póquer, no le va a decir toda la verdad a su prometida, no va a arriesgarse a perderla. La conoce muy bien, sabe que ella nunca aceptaría ser una simple concubina, su formación, su estatus de Maga Excepcional, nunca ocuparía un puesto de segunda con él, ella sería capaz de dejarlo para siempre. Pietro no puede dejarla ir, la ama con todo su corazón, no va a dejarla, ni le dirá nunca nada a nadie.

-Amor, te salvó el Hada Florencia, ella está muy agradecida porque salvaste a los unicornios, que estaban siendo diezmados por el Basilisco- le dice con una sonrisa para tranquilizarla. Se acerca y le deposita un tierno beso en sus labios.

Isabella sonríe, está contenta de estar con vida, pensaba que era su fin, no sabe a dónde irá si muere en este mundo fantástico. Pero ella ya sabe que se enamoró de Pietro, quiere disfrutar esta vida a su lado.

-Sabes Isa, tu hermano Arnold, está aquí en el Instituto, cuando el Archiduque se enteró, lo mandaron a él para que esté a tu lado para que te cuide, mañana lo verás, nos hemos turnado para cuidarte en las noches, lo más probable es que te lleve al lado de tus padres, necesitas reposo y recuperarte del veneno-

-No, yo quiero quedarme, no me quiero atrasar en los estudios, quiero ser una buena Emperatriz para ti- responde Isabella convencida de lo que desea.

- Serás la mejor Emperatriz que este Imperio haya tenido en todos los siglos de su existencia, además serás la más hermosa y amada esposa - la besa suavemente en los labios.

-Pero, quiero que estés sana, solamente será por 2 semanas, luego podrás regresar, ¿De acuerdo?- le dice Pietro con sus ojos brillando de amor sincero.

- ¡Está bien!, siempre que me den los temas de las materias de esas dos semanas para estudiar en casa- acepta Isabella.

- Son 3 semanas, estuviste dormida por una semana- responde Pietro para informarle.

La Enfermera Yosy, se acerca y le da un medicamento restaurador, indicado por el Hada Florencia. Ella lo toma y poco a poco se duerme.

Pietro la mira feliz de que esté viva, no le importa su infertilidad, piensa llevarse el secreto a la tumba, mientras la pueda tener a su lado para siempre.