Un Secreto Para Ambos

^^^Antonella De angelis.^^^

—Al caer mi hermana, rompió su cuello con el impacto, ni siquiera el colchón fue suficiente para amortiguar la caída y ella terminó muriendo minutos más tarde.—Comentó.

Una parte de mí está feliz de finalmente escuchar su historia y otra parte está sintiendo el dolor de verle a sus 6 años tan perdido y desconsolado que me rompe el corazón.

—Fue difícil.—Seguí acariciando su cabello como lo había hecho desde que empezó a contarme su pasado.—Eres fuerte y valiente, lo has hecho bien y estoy segura de que tu familia está orgullosa de ti.

—No estoy tan seguro.—Sonrió débilmente.—La vida de 14 personas se perdieron esa noche y solo yo sobreviví por el sacrificio de mi hermana, no creo que mi vida tenga el mismo valor que ellos, tal vez uno de mis primos hubiera sido un doctor que hubiese logrado salvar vidas, alguien pudo haber sido un abogado que protegiera los derechos de los más desafortunados y posiblemente el talento de Stella hubiera incentivado a la nueva generación para crear nuevas melodías.

—No debes seguir pensando en el si hubiera.—Recomendé.—Nunca sabrás que hubieran logrado ellos, pero sabes que has logrado tú.—Señalé.—Tus libros ayudan a las personas, muchos lectores escapan de su realidad a un mundo ficticio para encontrar en ellos la calma y la felicidad que no han logrado encontrar en su vida cotidiana, algunos con problemas de autoestima siguen con su vida esperando una nueva historia de su autor favorito y otros se han encontrado otras amistades con sus mismos gustos literarios.—Dejé de acariciar su cabello para llevar mis ambas manos a mi rostro.

Oculté este porque no quería mostrarle mi llanto, no soy yo quién debería llorar, es él y aun así no puedo evitar no derramar lágrimas por mi rostro.

—¿Por qué estás llorando?.—Preguntó él, mientras abandonaba la posición en la que estaba para volver a sentarse de forma recta en el sofá.

—Lo siento, yo solo..—Intenté limpiar las lágrimas con mis manos, pero estas seguían saliendo.—Debió ser doloroso y solitario..hip..

—Lo fue.—Aceptó y llevo su mano a mi rostro para acariciar mi mejilla humedecida.—Pero ahora ya no lo es tanto, ¿sabes por qué?

Deje de brotar mis ojos con mis manos para finalmente verle y al encontrarme con sus ojos azules fijos en los míos, mi corazón reaccionó como siempre suele hacerlo por él.

—¿Por qué?.—Pregunté en un hilo de voz, con mi rostro hecho un desastre con mis ojos llorosos.

Matteo rompió la distancia de ambos cuando sus labios rozaron los míos y susurro en estos, permitiéndome sentir el aroma de su vino favorito y haciéndome saber que todavía estaba bajo la influencia del alcohol.

—Porque eres tú quien se encuentra ahora conmigo.—Respondió en mis labios y la necesidad de sentirlo y presionar contra los suyos fue una urgencia que no pude complacer.

—Estás borracho.—Sonreí y me alejé solo un centímetro de su lado para evitar el contacto de nuestros labios.

—También lo estaba hace 3 años y eso no evitó que me besaras.—Me recordó y mis latidos se detuvieron ante su afirmación.