Ahora Soy Una Maga Sanadora

Dos días después, el templo recibió una solicitud en la cual, pedian la visita de Susan para atenderla…

Mago: ¿puede ir a la isla a ver a la condesa Kelly?

Susan: por supuesto, no hay problema.

Esa misma tarde, Susan salió hacia la isla. Cuando llegó, a la mansión se encontró a la condesa Ariadne junto a su esposo el conde Ronan y al conde Robert…

[¡rayos! Olvide que son cuñados]

Ariadne: bienvenida lady Susan

Ronan: muchas gracias por venir a ver a mi esposa y a mi hija

Ariadne: ¿hija?

Ronan: claro… cabello blanco como tu…

Robert: buenas tardes, mi lady

Susan: buenas tardes… mmmm condesa Ariadne, podíamos hacer la revisión ahora…

Ariadne: pero, querida, vienes recién llegando, debes estar cansada…

Susan: no la verdad…

Ariadne: porque no te sientas con nosotros a beber el té… mi padre en uno de sus viajes, trajo… un té delicioso…

La condesa no espero mucho, cuando una taza ya estaba lista para ella…

Ronan: querida mía, casi olvido mostrarte el… presupuesto para la mansión…

Ariadne: el que… ah… el presupuesto para la mansión, claro… ese debe aprobarse hoy… lady Susan nos podría esperar un momento por favor…

Susan: eh… es que…

Ronan: volvemos enseguida…

Los condes Kelly se levantaron y dejaron solos a Susan y a Robert…

Robert: ¿Cómo está?

Susan: Conde… no es necesario que nos tratemos, mientras estamos aquí…

Robert: lo siento, solo quería saber cómo estaba

Susan: bien, gracias.

Robert: las personas de la mansión la extrañan

Susan: hablaré con ellas

Robert: yo la extraño

Susan: conde, ya no me interesan sus intenciones…

Robert: eso no cambia lo que yo siento

Susan: sé que a otras señoritas les importaran sus palabras

Robert: pero solo usted me gusta

Susan: (respiro profundo) por favor, avísele a la condesa que saldré a recorrer los jardines

Robert: la puedo acompañar

Susan: no

Susan comenzó a caminar, seguida muy de cerca de Robert.

Robert: sabia que esta isla y la Gran Isla antes era un solo ducado

Susan caminó sin mirar atrás… se detuvo a observar unas extrañas flores, que tenían forma de campana.

Robert: cuando era pequeño, creía que esas flores tenían sonidos, asi como suenan las conchas en el mar.

Susan lo miro para preguntarle algo, pero arrugó nuevamente el ceño y continúo caminando… Robert la seguía de cerca… comentándole cosas e intentando entablar una conversación, pero ella no le contestaba, simplemente lo miraba molesta.

Robert: ningún verde de las plantas, arbustos o flores, es comparable con el de sus ojos... cuando la persona que hizo la bufanda, me pregunto el tipo de verde, no pude ponerlo en palabras… por eso tiene varios matices de colores…

Susan: mmmm

Robert: pero, al parecer no le gustó… fue lo único que dejo en su habitación.

Susan: no quería deberle nada

Robert: pero, era un regalo, una muestra de mi aprecio por usted

Susan: ya no creo en sus palabras señor Kelly.

Robert: pero…

Ariadne: Lady Susan, me acompaña a mi habitación.

Susan: claro, vamos…

En la habitación Ariadne y Susan conversaron acerca del asilo de ancianos.

Ariadne: entonces las cosas de documentos, las verá Oscar Yard, no Dylan

Susan: ¿por qué el cambio?

Ariadne: mmmm, bueno originalmente era Oscar quien nos ayudaría, su hermano Dylan solo lo reemplazaba por la boda de Oscar con mi amiga Sabrina.

Susan: de igual forma el joven Dylan trabajó bastante…

Ariadne: asi es, avanzo bastante, pero ahora quien se comunicará con usted es solamente Oscar Yard

Susan: ¿pero esta todo bien?

Ariadne: la verdad es que los hermanos Yard, trabajan para el ducado Mortimer, mi prima es la duquesa y ella nos apoya, pero, no podía disponer del tiempo de ambos hermanos, aunque ambos hermanos, tienen una gran voluntad…

Susan: entiendo…

Ariadne: además, creo que mi esposo habló con el duque Mortimer, y solo nos podrá apoyar Oscar…

Susan la miro un poco dudosa, pero asintió.

Ariadne: no quiero que el joven Dylan tenga problemas con el duque, por eso ya no tendrá participación en el asilo…

[perdóneme maga, pero mi esposo hablo con el duque, el pobre Dylan no podrá salir del ducado, y aunque le subieron el sueldo y recibió una asignación en dinero, por su apoyo en la Gran Isla, no creo que lo vuelva a ver]

Susan le pidió a Ariadne que se recueste y usó su magia… inmediatamente, los malestares por su embarazo desaparecieron…

Ariadne: wow usted es maravillosa…

Susan: los malestares del embarazo, van cambiando a lo largo de los meses, cuando se sienta mal, no dude en llamarme…

Ariadne: por supuesto… aunque… mmmm… quería pedirle algo más… pero, niéguese sino quiere… no hay problema…

Susan: dígame…

Ariadne: no quiero abusar de su bondad, pero existiría la posibilidad de que atendiera a mi cuñado.

Susan miró a Ariadne quien la miraba suplicante, tomando sus manos…

Susan: Condesa Ariadne…

Ariadne: esta bien… no importa… (suspiro) quizás, se merece seguir asi… es que como estoy tan contenta y feliz… solo quería que las personas a mi alrededor también…

Susan le sonrió amablemente y asintió.

Susan: está bien… lo atenderé

El rostro Ariadne cambio instantáneamente y sonrío feliz…

Ariadne: perfecto, preparare todo para que se quede a cenar y luego atienda a mi cuñado…

Susan: eh…

Ariadne salió feliz de la habitación y se encontró con su esposo…

Ronan: ¿Cómo te sientes mi amor?

Ariadne: muy bien, lady Susan es maravillosa… le pediré a mi Nana que nos prepare una sabrosa cena… ¿Qué le gustaria comer lady Susan?

Susan: eh… no se preocupe…

Robert: le gusta el pescado con poca sazón… nada agridulce

Ariadne: perfecto, pescado será…

Ronan: wow hermano, ¿Cuál es mi comida favorita?

Robert: mmmm ni idea…

Ronan: que mal hermano eres

Ariadne y Susan sonrieron por el comentario, pero cuando Robert y Susan cruzaron las miradas, ella cambio su expresión.