CONQUISTANDO A UN MUJERIEGO

ANGIE

No podía esperar para escuchar lo que Claudia tenía para decirnos, y pues creo que ninguno así que después que conté el teléfono, Henry me lo quito y lo coloca en alta voz para que así todos podamos escuchar.

—Ahora si hablaClàudiaa, te puse en alta voz —indica Henry.

—Bueno, entre los papeles de mi papá no encontré nada, pero en sus computadoras encontré sus estados de cuenta y está haciendo fuertes inversiones en la ciudad donde vivía Angie, además de otras ciudades vecinas —explica Claudia, y eso me molesta.

Si el padre de Claudia invierte no solamente en a editorial para la que trabajo sino que invierte en ciudades vecinas, significa que está al tanto de todas las propuestas que he recibido de otras editoriales y quiere cerrarme las puertas.

—¿Qué más descubriste? —indaga Fabricio

—Está invirtiendo en empresas de modelaje aquí y en estudios de televisión —responde Claudia, alarmándonos a Henry y a mí.

—¿Sabes en cuáles empresas exactamente? —quiso profundizar Henry.

—Básicamente en todas, al parecer esta siendo asesinaron por un especialista en ese mundo del modelaje y la actuación y ese es tu representante Henry —Claudia, nos cuenta cada detalle de cada negocio.

Henry al saber que su representante está metido en todo esto se tensa mucho, sus puños estan apretados y la vena de su cuello se nota muchísimo, creo que si ese tipo se llega a poner frente a Henry, será hombre muerto.

—Claudia, gracias por todo y como lo prometí buscaré la manera de ayudarte, espera mi llamada pronto —Fabricio agradecido por la información.

—Si Claudia, todos buscaremos la manera de ayudarte —Henry lo apoya y yo también.

—Te llamaremos cuando encontremos la manera de ayudarte — comente antes de finalizar la llamada.

—Si quieren invertir en modelaje y actuación y tu representante está involucrado, eso quiere decir que quiere arrinconarte a ti también Henry —comenta Fabricio

—Lo sé, pero hay algo que ellos no saben —expresa Henry, llamando nuestra atención.

—¿Qué es lo que ellos no saben? —indagó junto a Fabricio.

—Mis padres me dejaron una gran herencia al morir, si yo le hubiera querido no hubiera trabajado un solo día de mi vida, pero mi relación con mis padres no fue la mejor, ya que les guardaba rencor nunca use ese dinero solamente cuando era un niño y no podía decidir —confiesa Henry

—Entonces aunque te cierren todas las puertas no tendrán manera de dejarte en la calle —comenta Fabricio

—No, no podrá y a ustedes tampoco, quiero proponerte un negocio, quiero que abramos una editorial y una agencia de modelos en el país que ustedes escojan, preferiblemente un país donde nadie nos conozca y ninguna de esas familias nos encuentre o pueda llegar allá —nos propone Henry.

—¿Estás seguro?, es muy arriesgado comenzar un negocio así desde cero —quise asegurarme de que el conozca los riesgos de comenzar un negocio así.

—Lo estoy mi Angie, hermosa, solamente debemos encontrar a alguien que se adelante a nuestra llegada y comience a tramitar los permisos que requeriremos para comenzar la empresa —expresa Henry muy seguro, y yo solamente pude darle un fuerte abrazo y besarlo.

—Todo se escucha muy bien, pero debemos ayudar a Claudia y buscar a la persona que viaje a comenzar con los trámites —Fabricio, señala lo que es obvio, pero se quien podrá ayudarnos.

—No se preocupen, tengo a la persona indicada para ayudarnos, tu llama a Claudia y dile que te dé exactamente los países en donde sus padres hacen negocios y donde sus socios hacen negocios también, no queremos que lleguen a nosotros a través de terceros, buscaremos un abogado que nos dé opciones para ayudar a Claudia —pedía Fabricio y este asintió.

Fabricio, se fue a llamar a Claudia y Henry me dio algunos besos antes de déjame tomar mi celular y escribir el mensaje a Martín.

—¿Quién es ese amigo tuyo? —pregunta Henry y noto algo de celos en el.

—Él me a apoyado mucho desde que entré a la editorial, nunca me a dejado sola y a sido incondicional conmigo, fue el que me llamó para decirme del nuevo socio en la editorial —respondo omitiendo la parte en la que le aclaro que es gay.

—¿Así que muy buen amigo?, ¿no será que le gustas? —Henry algo tenso, tuve que contener mis ganas de reír.

—No, no creo que yo sea su tipo —comente mientras rodeo su cuello con mis manos y quedo muy cerca de sus provocativos labios.

—¿Como estás tan segura?, es hombre de seguro se muere por ti —Henry, rodea mi cintura con sus manos y me pega aún más a su cuerpo.

—¿Quieres saber por qué estoy tan segura? —pregunta rosandole sus labios con los míos.

—Si, dime por qué estás tan segura que no eres su tipo —pide Henry, y me da un rápido beso en los labios.

—Estoy segura de que no soy su tipo, por qué es gay, creo que Fabricio, es más su tipo —respondí con una gran sonrisa y el me dio una negada.

—Eres traviesa Angie suaza, pero así me encantas —expresa Henry y se apodera de mis labios, el beso se volvió más intenso, tanto que sentí como lo que mi guapo novio tiene entre las piernas se despertaba.

Lo sentí grande y fuerte, no me dio miedo, porque estoy segura que quiero ser su mujer, pero no es el momento, Quiero que sea cuando el me diga que me ama con todas sus letras y creo que el piensa lo mismo, porque detuvo sus besos y sus caricias.

—Voy a tomar una ducha, ya es tarde descansa —le di un beso y el se fue a tomar una ducha fría supongo, y pues yo haré lo mismo.

camine hasta mi habitación, donde me quite toda la ropa y entré a la ducha abrie el agua fría y la dejé caer sobre mi, para refrescarme y calmar las ganar de estar con Henry, aunque creo que esta resistencia no durará mucho, pues ambos nos deseamos muchísimos y los baños de agua fría no podrán controlarnos para siempre