Teniendo una difícil situación familiar, donde se enfrenta múltiples veces a los deseos de los demás, quienes quieren ir por encima de los de ella, jamás pensaría tener que llegar a una situación tan extrema.
Siendo ahora mujer casada, deberá enfrentarse a las secuelas de un accidente que la hará perder la memoria, olvidando a su esposo y el hijo que tiene en su vientre.
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Sofía y sus celos.
Ya había pasado una semana en qué Osmara y Esteban se habían acostado, el no podía olvidar que ella se había entregado a el, se volvió más dulce, siempre le decía que la amaba. Esteban y Osmara hicieron su noviazgo oficial una tarde mientras comían todos juntos, la hermana de Osmara miró molesta a Esteban, ella sabía que el no era el hombre que Osmara tenía que amar.
Aunque ella se miraba contenta, no era feliz como cuando hablaba de Arick, le dolía mucho que ella no recordara nada, pero por más que intento contarle a Osmara, ella le decía a su hermana que dejara de inventar cosas, incluso Osmara llego a pensar que su hermana inventaba a otro hombre por qué estaba celosa de que Esteban la escogiera a ella.
- ¡Ya basta, con tu tonta historia de otro hombre!, entiende Esteban y yo nos amamos.
- ¡Pues no lo creo!, yo creo que solo estás usando a Esteban para olvidar a alguien más.
- ¡Tus celos enfermizos son los que quisiera olvidar!, si de verdad te importo déjame ser feliz con Esteban.
La hermana de Osmara guardo silencio, sabía que su hermana había pasado por mucho y lo único que deseaba es que ella fuera feliz, las discusiones entre ellas hizo que solo se distanciaran, por qué Osmara pensaba que Sofía no estaba de acuerdo con su relación.
Osmara continuo con su tratamiento, ya podía moverse con la ayuda de una andadera, ella se esforzaba por volver a ser como antes.
El compadre de su padre llegó a visitar a la familia en compañía de su hijo.
Cuando su hijo miró con una andadera a Osmara, le dijo a su padre que no pensaba casarse con una coja. Osmara alcanzo a escuchar el comentario del joven, se quedó callada y le pidió a Esteban que la ayudara por qué no se sentía bien.
La familia preparo una comida para los invitados.
Esteban y Osmara estaban en su habitación, el la acostó en su cama y se sentó a su lado.
- ¿Te duele algo?, ¿quieres que llame a un doctor?, decía Esteban preocupado.
- No, solo que no me agrada el ahijado de mi padre. Y me siento inútil con mi andadera caminando entre ellos.
- Entonces nos quedaremos aquí, Esteban beso sus labios.
Osmara respondía a sus besos pero cuando el trataba de meter sus manos bajo su ropa ella se alejaba de el.
- ¿por qué no quieres que te toque, pasa algo?
- No me siento bien, además tenemos visitas.
- Tienes razón, la madre de Esteban tocó la puerta y les aviso que la comida estaba lista.
La hermana de Osmara se encontraba sentada a un lado del ahijado de sus padres, ella no paraba de sonreír con los chistes del joven.
El joven le pidió que le enseñará los caballos, ellos se dirigieron al establo.
El joven la tomo de la cintura y le dijo que estaba encantado con su belleza, que si ella lo aceptaba, el pediría su mano a su padrino.
La hermana de Osmara sonrió, ella había por fin logrado que hubiera una boda y por fin su padre terminará con la deuda, ella no se sentía atraída por el chico, pero estaba dispuesta a sacrificarse por su familia.
El trato de besarla, ella se alejó y le dijo que esperara a la boda que sería más romántico.
El joven la tomo de la mano y se dirigió a la mesa donde se encontraban las familias.
Osmara y Esteban se encontraban sentados a un lado de su padre.
Su ahijado le pidió a su padrino que deseaba casarse con Sofía
El padre de Osmara miró asombrado a su pequeña hija, ella sonrió le dijo que estaba feliz y que quería casarse.
Su padre le dio su bendición, le dijo que si ella así lo deseaba, el lo aceptaba.
Todos estaban felices de la nueva unión, la familia del joven puso un fecha, pero el joven no estaba dispuesto a esperar más, si ya tenía todo planeado para casarse con Osmara, lo utilizaría para casarse con su hermana.
La hermana de Osmara aceptó, al final a ella no le importaba, solo se casaba por salvar a su familia, ella jamás había experimentado el amor y al ver todo lo que su hermana a sufrido, prefirió casarse por contrato, era una manera segura pues si el la engañaba ella no sufriría pues no sentía nada por su prometido.
Osmara miró a su hermana y se preguntaba por qué su hermana había tomado la decisión de casarse tan pronto con alguien que no conoce.
En la noche Osmara fue a visitar a su hermana. Su hermana abrió la puerta de su habitación y miro asombrada a Osmara.
- Osmara, ¿que haces despierta?
- Tenía que hablar contigo, no crees que es muy pronto casarse con alguien que apenas conoces.
- no quiero hablar de eso ahora, Osmara.
- Sofia pero no creo que lo ames, apenas lo conoces.
- Es más seguro, casarme con alguien que conoce a la familia y que hay un contrato de por medio, así no hay sentimiento, si el me deja no voy a sufrir como tú has sufrido todo este tiempo. Y voy a casarme con el no pienso arruinar la reputación de papá rechazando el matrimonio.
- ¿Papá te obligó?, tienes mi apoyo para decir que no Sofía.
- Papá no me obligó, el me dijo que no me casara con él, pero es guapo y tal vez funcione.
- Sofía, yo pienso que lo mejor es que lo pienses.
- No voy a pensar nada Osmara, ya lo decidi. Me casare y tal vez tú deberías hacer lo mismo, cásate con Esteban tal vez al final termines amándolo como el te ama a ti.
Sofía cerró la puerta de su habitación, Osmara se marchó triste, tal vez su hermana tenía razón, con el tiempo podría amar a Esteban como el la ama.
El era una pareja segura, siempre está apoyándola y jamás la ha dejado sola, ella sentía amor por el de eso no tenía duda, solo que no se sentía completa, sentía que algo le faltaba, no sabía cómo explicarlo pero sentía que no podía corresponderle de la misma manera que el lo hacía.