QUÉ NOS PASÓ?.

Damián está sentado junto a Regina en una de las gradas del gimnasio de la escuela: Alguna vez té has preguntado que somos tú y yo en realidad?, Preguntó el muchacho a la chica.

Regina, por un momento quedó desconcertada: Pues lo que siempre hemos sido, amigos.

Si, claro, pero que clase de amigos?.

Bueno, sabemos lo que somos, mejores, mejores amigos.

Regina, lo que té estoy preguntando es si hay algo más entre nosotros, quiero decir, si nos gustamos lo suficiente para llevar nuestra amistad a un plano mayor.

A ver Damián, qué es esto?. Acaso te estás declarando?.

Si así fuera, qué me contestas?.

Si así fuera?. Damián, sí o no es una declaración. Quieres que sea o no tu novia?.

Al muchacho se le subieron los colores y estaba todo colorado.

Creo que sí.

Entonces ¿es una declaración?.

Sí. Dijo Damián, en un tono muy poco audible.

Damián, no pudiste hacerlo de una manera más romántica?.

Es que no tengo manera de esconder que me gustas mucho, Regina. Me gusta pasar el tiempo contigo, me gusta cuando hacemos nuestras tareas juntos, cuando vas conmigo a los partidos de Futbol y me echas porras con el entusiasmo con que lo haces. Me haces sentir que soy alguien importante en tu vida, y eso me gusta. Ahora ya no quiero que caminemos nada quién por su lado, quiero hacerlo, tomando tu mano. Ir abrazados, platicando todas nuestras intimidades. Soy muy feliz a tu lado Regina, eso solo lo puede provocar el amor.

Es que yo también te quiero Damián. Después de que te marchas a tu casa, te extraño mucho. Quiero seguir platicando, leyendo, estudiando juntos. En fin, me haces tanta falta cuando no estás conmigo.

Eso es un sí?.

Claro, tontuelo, soy muy feliz estando a tu lado.

Entonces, te puedo dar un beso?.

Que clase de pregunta es esa?. Hazlo tú, antes de que lo haga yo.

Y, venciendo su timidez, Damián besó por primera vez a Regina. Fué un beso tierno, sin ninguna malicia, simplemente, así sellaron su amor; un beso con el que los chicos se prometían todo. Después del beso, se dirigieron directo al salón de clases. Van tomados de la mano, toda la escuela lo ve: Regina y Damián ya son novios. Algunos muchachos se acercaban para decirles: Vaya, ya era tiempo.

Regina va irradiando felicidad, y no tiene la más mínima intención de soltar la mano de Damián.

Pero, hay alguien que no comparte su felicidad, es Johana, Regina, prepárate para la guerra. Damián va a ser mío. Te juro que te lo voy a quitar. Siempre consigo lo que quiero. Te vas a arrepentir, Regina, te juro que te vas a arrepentir.

Al terminar las clases, el regreso de los nuevos novios, fué diferente. Ya no hablan nada más de actividades escolares, ahora se dicen lo que les gusta. Eso es algo que ya saben, pero ahora se lo dicen para que uno y otro, sienta que es importante para ambos.

Regina, qué perfume usas?. Ya sabes, uno de marca de catálogo. No es gran cosa, pero a mí me gusta, espero que a tí también.

Me gusta todo lo que te gusta.

Tú qué desodorante usas, Damián?.

Cualquiera que tenga aroma a Lavanda.

Regina, por qué no usas aretes?.

Cuando nací, mi mamá no permitió que me perforaran los oídos, ella ahí mismo les dijo a todos que esa decisión la tendré que tomar yo, cuando tuviera conciencia. Creo que llegó el momento de hacerme las perforaciones.

Me estás pidiendo que te regale unos aretes?.

Esa es tu decisión, lo que quiero decir, es que mis tíos y mi Abuela, me han regalado varios juegos de aretes, ahora tengo un motivo importante para usarlos.

En serio?. Ya quiero verte con aretes.

Bueno, entonces le voy a decir a Mamá que me haga la perforación. Espero que te guste.

Es que no me había dado cuenta de que todo me gusta de ti.

De repente, alguien les cayó por sorpresa: Regina tiene novio, Regina tiene novio.

Nayeli, cállate, no tienes por qué ir gritando que Damián y yo somos novios.

Entonces es cierto.

Si y no tiene nada de malo.

Detrás venía Juliana, vaya, hasta que decidieron ir al siguiente nivel. Los felicito, que sea para bien. Regina, tenemos una plática pendiente. Y se lo tienes que decir a tu Papá, hoy mismo. Si Mamá, te prometo que hoy mismo hablaré con Papá.

Llegaron a la casa de Regina. Mamá va a llegar temprano hoy, voy a verla y a platicar con ella.

Nos vemos mañana, cuídate. Y un beso tímido sirvió de despedida de los novios adolescentes.