Nunca creí que me enamoraría, mucho menos que fuera de una humana, que lucharía y haría hasta lo imposible para porder estar con ella.
Incluso arriesgar a los seres que luchan a mi lado.
Nuestro amor causaría grandes perdidas pero, ¿valdrá la pena?.
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3
•Eres parte de mi destino •
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— No. — se levantó sin mirarla a los ojos
se quedó unos segundos así después levantó la mirada y saco otro cuchillo pero está vez era más grande y se veía más afilado.
— ¡Corran! — gritó hacia su grupo mientras volvía a apuntar a Hazel.
algunos se quedaron paralizados del miedo, otros que reaccionaron corrieron a la puerta de salida trasera de la casa pero, Romy y Río entraron evitando que estos salieran y cayeran sentados en el proceso.
— ¡Hola! — Exclamó Romy saludando a los humanos, quienes en ese momento seguian paralizados de miedo.
— ¿Ellos son los intrusos? — dijo señalando a cada uno — parecen muy cobardes para serlo —
— ¿Qué hacemos con ellos? —.
— Lo mejor sería deshacernos de ellos para evitarnos futuros problemas — dijo Hazel poniendo una mano en su mentón después de quitarle de nuevo el cuchillo al chico.
— Creo que deberíamos revisarlos — habló Romy haciendo que Hazel la observará confundida.
— No pude sentir nada sobre ellos, si no fuera porque hacían mucho ruido no nos enteramos que estaban aquí — hizo una mueca mirando a una chica en especial.
— Uno de ellos debe de tener algo único para no ser detectado, ¿no crees? — miro a Hazel esperando una respuesta.
— Tienes razón revisen y tomen a los quieran— dijo acercándose al chico tomándolo por el cuello —y tú me dirás por qué están aquí —.
- Ansío poder divertirme con ellos - los humanos la observaron con terror en sus ojos.
Romy se acercó a una chica que tenía en la mira desde que llegó, observo con detalle cada parte de su rostro, su mirada se detuvo en sus ojos, solo una vez en su vida había visto unos como los que ella tenía, unos ojos tan claros como el agua y tan brillantes como las estrellas.
sonrió alegre mientras tomaba a la chica por el brazo levantándola.
— Hazel encontré a una chica que podría tener lo que estábamos buscando — dijo melódica tomando la cara de la chica para mostrarle sus ojos.
Hazel se acercó a ambas quedando frente a frente, se inclino para quedar a su altura y aprecio aquellos ojos tan llamativos para su cuerpo, la pobre chica le dio una mirada nerviosa mientras tragaba saliva por la cercanía de sus caras.
— Está bien llévala contigo — dijo alejándose para su tranquilidad
Romy tomo las manos de las chicas tratando de amarrarlas pero, de pronto su cuerpo se tenso al sentir un aura dorada acercándose a ella a gran velocidad antes de que pudiera reaccionar un fuerte golpe se hizo presente en su estómago lo que la hizo salir volando y atravesar la pared de ese cuarto y cayera en otra habitación con su cuerpo adolorido.
Al igual que Romy, Río fue golpeada pero a su diferencia ella salió disparada por la ventana.
Aquellas auras pertenecen a dos puros, ambos se quedaron observando a Hazel.
— Esas eran mis compañeras — dijo cruzándose de brazos mirando aquellos puros.
— No nos interesa, deja en paz a estos humanos — dijo una pura caminando hacia los humanos.
— Uh, ¿por qué haría eso, sí están en nuestro territorio? — replicó Hazel ladeando la cabeza, mientras miraba detrás de ellos, unos sonrisa traviesa apareció en sus labios.
— Tenemos un acuerdo, que ustedes... — un cuerpo chocando contra el suyo la interrumpió.
Ambos cuerpos cayeron al suelo Romy estaba encima de la pura sosteniendo sus manos.
Mientras tanto él otro puro fue empujado afuera de la casa junto con Río.
— Hazel llévate a esa humana es importante para nosotros — Exclamó Romy tratando de evitar que la pura se soltara.
— Está bien — intento volver a acercarse a la chica pero de nuevo el otro puro se metió en su camino.
— No puedo permitir que te la lleves — dijo respirando forzosamente por pelear con Río.
— Estás en mi territorio no tienes por qué prohibirme algo — habló fríamente mostrando un aura de superioridad.
Río entro a la casa llendo en dirección a él, lo tomó del hombro dándole la vuelta y le dio un puñetazo en la cara que lo hizo atravesar la pared.
— Es mejor que te apresures — dijo para cruzar por el agujero que dejó el puro en la pared.
Mientras tanto Romy seguía forcejeando en el suelo con aquella pura.
Y los humanos al ver el caos que había, empezaron a salir corriendo, Hazel al darse cuenta corrió detrás de ellos dejando a sus compañeras atrás.
— Ya suelta mis manos — se quejó la pura debajo de ella intentando zafarse del su agarre.
— No te quejes esto es mejor a recibir un golpe en el estómago y atravesar una pared — habló Romy ya cansada.
Ella al notar esto uso más fuerza, liberándose del agarre y cambiando de lugar quedando arriba.
— Como puedes ser tan débil, tonta impira — dijo de manera hostil
— No me insultes no estoy acostumbrada a forcejear en el suelo más con un puro — dijo jadeante, de repente una sonrisa traviesa se colocó en su rostro — Pero me parece que usted ya tiene experiencia eso es excitante— dijo picara guiñando un ojo a la pura.
— Deja de decir tonterías — dijo mientras su rostro se tornaba de rojo
Se quedó mirando el rostro de Romy unos segundos antes de acercarse.
— Oye ¿qué.. ouch — se quejó adolorida después que ella presionara con fuerza su rodilla en su abdomen.
Hazel corría detrás de la humana que estaba siendo arrastrada por otros dos.
Le fue fácil alcanzarlos, ahora estaba frente a ellos mirándolos atentamente.
¿Por qué intentan escapar? siempre los voy a atrapar — se acercó a ellos — Vengan conmigo —.
Los dos chicos voltearon a los lados tratando de buscar una salida pero la única salida está detrás de Hazel.
dieron la vuelta para correr por donde vinieron.
— ¿Quieren jugar? — alzó las cejas viéndolos correr — Juguemos —.
En otro lugar Río arrojó de nuevo al puro al otro lado de la habitación.
— ¡¿Por qué te metes en algo que no te debe de importar?! — gritó molesta viendo como él trataba de levantarse.
— Es mi obligación hacer esto — dijo tratándose de recomponer de los golpes recibidos por la impura.
— Entonces sigamos —.
Romy por su parte estaba en problemas pues la pura era muy ágil y poderosa.
— Oye — se sentó en el suelo tratando se regular su respiración — podemos descansar un momento y después seguimos con nuestro segundo round— dijo hacia la pura con doble intensión quien igual que ella estaba tratando de respirar con normalidad mientras estaba apoyaba en la pared.
la pura se arrastró por la pared hasta el suelo.
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