Liam Ang, o Liam Halley Anggara, es un modelo de revistas juveniles y el ídolo de muchas chicas adolescentes. También es el único hijo varón de la familia Halley: sociable, divertido, carismático y capaz de hacerse amigo de cualquiera con facilidad.
Yumi Arishta, en cambio, es una chica gordita, bajita y tímida que estudia en la universidad lejos de casa, completamente sola en una ciudad desconocida.
Un encuentro inesperado entre Yumi y Liam una noche los une en una relación difícil de definir. Liam, sintiéndose en deuda con Yumi, no deja de acercarse a la tímida muchacha. A pesar de que Yumi lo rechaza una y otra vez —convencida de que no está a la altura de alguien tan guapo, rico, famoso y popular como él—, Liam no se da por vencido.
La diferencia entre ellos es como el cielo y la tierra. Entonces, ¿cómo es posible que Yumi termine siendo la novia de Liam Ang?
¿Cómo terminará esta historia entre Yumi y Liam?
¿Podrán estar juntos al final?
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Capítulo 20
"Si uso este atuendo, ¿no se ve vergonzoso, Va?" Yumi le preguntó a Valeria por videollamada.
Yumi estaba realmente confundida sobre qué ponerse para la cena con la familia de Liam esta noche.
"¡La falda te queda bien, Yum! ¡Pero para la parte de arriba, prueba con la blanca de lunares de antes!" Valeria dio su opinión.
"¿Ésta?" Yumi le mostró a Valeria una blusa de gasa blanca con estampado de lunares.
"¡Sí! Creo que esa queda mejor".
"De acuerdo, me pondré esta blusa y esta falda". Yumi finalmente decidió.
"¿La familia de Liam es tan antipática como Anne?" Yumi preguntó preocupada.
Valeria se rió al escuchar la pregunta de Yumi.
"¿Aún no te has escrito con Anne?"
"¡Todavía no! ¿Quién soy yo?" Yumi respondió haciendo un puchero.
"Anne parece antipática por fuera. ¡Pero no es antipática! ¡Conócela mejor! Es una chica divertida", sugirió Valeria.
"Pero me temo que no conectaré en una conversación con Anne. ¡No soy buena para las charlas triviales, Va!" Yumi buscó una excusa.
"Sí, por eso conócela primero, luego podrás intimar", Valeria volvió a reírse.
"No soy tan extrovertida como tú, que tiene muchos amigos y es buena socializando", Yumi volvió a hacer un puchero.
Yumi siempre había sido mala para hacer amigos. Nunca tuvo muchos amigos. Tal vez porque tendía a ser indiferente y no era buena con las charlas triviales. Yumi prefería permanecer en silencio cuando estaba con sus amigos. Solo cuando alguien hacía una pregunta, ella hablaba.
Su única amiga cercana en la universidad era Valeria. Aparte de Valeria, rara vez hablaba con alguien a menos que hubiera algo importante relacionado con las clases o las tareas.
Yumi no sabía por qué era tan mala para hacer amigos. Simplemente prefería hacer las cosas sola. Para ella, estar sola era agradable y relajante. Incluso podía pasarse todo el día sentada en su habitación del dormitorio cuando no tenía clases.
"¡Yum! ¿Por qué sueñas despierta?" Valeria la interrumpió, sacándola de sus pensamientos.
"¡Oh, sí! Vendrás al evento también, ¿verdad, Va?" Yumi preguntó para asegurarse y cambiar de tema.
"Sí, vendré con mamá y papá más tarde", respondió Valeria con una sonrisa.
"¿El hermano Kyle? ¿No vendrá contigo?" Yumi preguntó para molestar a Valeria.
"¡El hermano Kyle vendrá con mamá y papá! También con su hermana", respondió Valeria tímidamente.
*¡Toc\, toc\, toc!*
Se escuchó que llamaban a la puerta del dormitorio.
"Ehm, tengo visita. ¡Cuelgo, Va!" Yumi se despidió de Valeria.
"¡De acuerdo! ¡Nos vemos en la cafetería!"
La videollamada terminó.
Yumi corrió a abrir la puerta de su habitación.
"¿Estás lista?" Preguntó alguien vestido completamente de negro con cuello alto, mascarilla negra y gafas de sol también negras.
*¡Parecía un ninja malvado!*
"¿Por qué no usas también un casco integral o una máscara de Scream?" Murmuró Yumi mientras cerraba la puerta después de que Liam entrara.
Liam se quitó todos sus accesorios y se rió.
"¡Solo te seguía la corriente para que los paparazzi no te persiguieran, cariño!" Liam respondió buscando una excusa.
"¿Estás listo?" Liam preguntó mientras se quitaba la camiseta antes de sentarse en la alfombra que solo estaba medio extendida. Encendió su pequeño ventilador.
*Este modelo tenía la costumbre
de estar sin camisa en el dormitorio de Yumi*.
"Me estoy preparando. Dijiste que vendrías a buscarme a las siete, ¿verdad? ¡Son solo las seis!" Yumi miró su reloj de pared de Doraemon que colgaba de la pared.
"Quiero cargar mi teléfono primero. Y ducharme", respondió Liam mientras miraba a Yumi con picardía.
"¿De dónde vienes? ¿Pensé que de casa?" Preguntó Yumi, que ya estaba sentada junto a Liam.
Pero como de costumbre, Liam simplemente atrajo a Yumi hacia él y acercó su cabeza al hueco de su cuello. Inhaló profundamente el aroma de su cuerpo, su favorito.
"Casémonos ahora, Yum", Liam la persuadió una vez más, aún con la cabeza en su cuello.
"¡No! ¡No quiero decepcionar a mamá y papá! Han trabajado duro para mi educación", Yumi se negó rápidamente.
"No te impediré que continúes con tus estudios", prometió Liam sinceramente.
Tomó el cabello rizado de Yumi y comenzó a jugar con él.
"¡Es fácil decirlo ahora! No sabes lo difícil que es estudiar después de casarse. Sin mencionar si quedas embarazada, tienes un bebé, te quita mucho más tiempo", dijo Yumi, exponiendo sus objeciones.
"Tampoco nos conocemos desde hace mucho tiempo. Sería extraño que de repente me pidieras que me casara contigo", continuó Yumi, que todavía parecía dudar de Liam.
Liam giró a Yumi para mirarla a la cara.
"¿Entonces no confías en mí?" Preguntó Liam un poco decepcionado.
Yumi negó con la cabeza.
"Eres un chico perfecto, rico, famoso, con muchos amigos. Es extraño que te enamores de una chica gorda, baja, fea y pobre como yo". Yumi volvió a exponer la gran diferencia entre ella y Liam.
"Es como si solo estuvieras jugando conmigo", agregó Yumi casi en un susurro.
*Liam miró a Yumi con incredulidad.
¿Por qué esta chica era tan terca y le costaba tanto confiar en él?*
"¡Nunca jugaría contigo, Yum! ¡Hablo en serio! Podría ir a tu casa esta noche, conocer a tus padres y pedirte matrimonio", exclamó Liam con sinceridad.
"¡Matarías a mis padres de un infarto!" Yumi se rió entre dientes.
"¡Ve a ducharte! ¿Dijiste que querías cargar tu teléfono? ¿Dónde está? Yo lo cargo". Yumi ya había enchufado el cargador de su teléfono a la toma de corriente junto al escritorio.
Pero Liam en cambio, atrajo a Yumi hacia él, la abrazó y volvió a inhalar su aroma único.
"Esto es cargar", respondió Liam con naturalidad.
*¿Eh?
¿A qué se refería con cargar?*
"Te amo, Yumi!" Murmuró Liam mientras seguía oliendo su cuerpo.
*¡Oh Dios mío!
¿Era esto un sueño?
¿Podría desmayarse ahora mismo?*