En una ciudad donde hablar de homosexualidad era tema tabú, se desarrolla la historia de Bastian Gómez, un joven atado a los deseos machistas de su padre; un hombre perteneciente al cuerpo policiaco de carácter severo y muy moralista. “Bas” como muchos le decían, ahora con 18 años se debatía entre sí seguir a su corazón y revelar su orientación o hacerle caso a las palabras que poco a poco esa persona a logrado transmitirle en ese papel y así llenar de orgullo a su padre…
NovelToon tiene autorización de GoldenLove para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
20.SU NOVIO
Bastian perdió la noción del tiempo, había quedado atrapado en aquel beso, fue hasta que se vieron obligados a separarse por falta de aire, que había notado los minutos que pasaron, apesar de ser un beso largo, no fue brusco o arrebatado, sino todo lo contrario fue suave, tierno y dulce, un beso maravilloso para el castaño el cual quedó en un leve trance al separace de su compañero.
—Dije que después de que leyeras la carta, resolvería todas tus dudas, así que si tienes dudas dímelas, yo las responderé y resolveré pero no te compliques tu mundo tú solo ni saques congeturas por tu cuenta de lo que pueda o no sentir, eso lo decidiré yo y ya eh tomado la decisión de conquistarte y arriesgarme—sonríe coqueto el pelinegro.
Bastian se sonrojó ante tales palabras y desvío ligeramente su mirada—por…porque yo…y no mi ami-ga—comenta entre sílabas por el nerviosismo que había provocado en el.
Ríe sarcástico—esa chiquilla es común como cualquier otra, la verdad me sorprende, que de hecho tenga novio, aunque claro es igual de rara que el, yo creo por eso se juntaron, en cambio tú eres especial, único, tienes una mirada que inspira paz, calma el torbellino de emociones que tiene mi ser, tu sonrisa es la más linda, radiante, que deslumbra mi alma, esos hoyuelos que se forman cuando ríes son lo más hermoso que eh visto, tus manos son tan tiernas y suaves que anhelaba tocarlas, tenerte a ti es sentirme triunfador es poder llegar al cielo, quedarme en el sin merecerlo, Bastian no me alcanzan las palabras para describir el ser maravilloso que eres.
—Entonces porque me veías así, porque actuabas enojado conmigo, tal parecía que te caía mal—menciona el castaño aún sonrojado por las palabras anteriormente mencionadas.
—Lamento si te di esa impresión, pero créeme que en cada oportunidad que tenía de verte, no soportaba las ganas de mantenerme quiento y no tocarte, abrazarte, decirte lo mucho que provocas en mi, creí que mi mirada me delataría, mi amigo me decía que era muy obvio y que fácilmente te darías cuenta de lo que sentía—comenta avergonzado el pelinegro.
—Pues créeme que no, tu amigo sí que se equivocó, la primera vez que te vi, cuando por accidente choqué contigo, realmente estaba asustado aunque me disculpé por no tener cuidado, tu mirada era de furia, no de amistad, como se supone se hiba a notar tu interés por mi?
—Ese día, estaba frustrado conmigo mismo, yo forcé ese choque, para poder colocar la carta, te vi y supe que era el momento adecuado, pero me frustré el saber que pude haberte lastimado con aquel choque intencional.
Bastian se sorprende—entonces desde ese momento tuve la carta conmigo!, que distraído soy como no lo noté en ese momento, sino hasta más tarde!—hablaba más para si mismo que para el pelinegro—entonces porque me mirabas molesto cuando estaba cerca de Alanís, si dices que no te interesa ella porque tu reacción—pregunta curioso.
—Acaso no es obvio estaba furioso con ella, es demasiado atrevida contigo, solo se la pasa encima de ti como una garrapata, como si no tuviera novio al cual extraerle la sangre…—comenta irritado.
—Por eso la tiraste ese día?
—Digamos que por suerte se atoró mi broche con su cabello, fue como un pago por comerse todos los dulces y chocolates que eran para ti —menciona trantando de fingir inocencia.
—De casualidad, también fue intencional el choque con mi primo?
—Tu primo?, quién es tu primo?
—Israel, el chico con el que chocaste ese mismo día que pasó el accidente con la güera.
—Ahhh ese es tu primo, pasaba por ahí con mi siguiente carta y vi tu cara de incomodidad con aquella persona, yo solo me acerqué a dejar la carta en tu mochila, él fue el que se atravesó en mi camino por eso terminó casi en el suelo—dice despreocupado.
Sonríe—gracias, ese día me salvaste, aunque después crei que los accidentes venían dirigidos a mi, agradecí ese día de que hubieras pasado en el momento justo.
—Jamás haría algo para dañarte, no pienses lo contrario—toca suavemente su mejilla—realmente quiero estar contigo, por eso, no podía seguir esperando más, tenía miedo que alguien se me adelantara y se te declarara nuevamente.
—Como sabes que alguien más se me declaró?—confundido.
—Supe que ese día no tuviste una clase al pasar por la parte trasera del jardín y verte ahí, estaba apunto de irme después de contemplarte por un rato cuando vi que aquella chica se te acercó y se te declaró, sabía que tenía que apresurarme a decirte quién era al ver que la habías confundido conmigo.
—Perdona!—menciona avergonzado.
—eh resuelto tus dudas?—sonríe sin dejar de ser coqueto.
—Solo falta una más…—menciona con voz baja.
—Cuál?.
—Está mañana… en la biblioteca, porque preguntaban si estaría con mis amigas, escuché que tu amigo mencionaba que te estaba ayudando para saber si estaba ella…estás seguro de que no te gus….
—Bas, no lo menciones, jamás, recuérdalo bien, jamás me ha gustado o me gustara aquella chiquilla, eres tú siempre has sido tú por favor recuérdalo siempre—suspira—Zion quiso saber si estarías solo para que me pudiera acercar a ti….gracias a lo que dijiste pude verte por unos minutos y con eso pude calmar un poco mi impaciencia por nuestro encuentro.
—Es increíble la manera en la que puedes describir lo que sientes sin titubear...
—Tu me haces ser así!, dime Bas, me darás esa oportunidad que tanto anhelo, mi luz de luna prometo no presionarte, iremos a tu ritmo, solo déjame amarte, déjame demostrarte que tan grande es mi amor por ti—su mirada, esta vez no era tan profunda al contrario era una mirada suplicante, anelhante a una respuesta positiva.
Bastian dudo por unos minutos hasta que al final tomó una decisión—está bien ‘Moon’, por favor no me falles!.
Esas palabras fueron suficientes para que el pelinegro estallara de alegría—lo prometo—sin esperar más volvió a capturar los labios del ahora ‘su novio’, no podía estar más feliz, este era un gran día ahora nadie podría arruinarlo…o eso creía.
—Oye cabron! te lo vas a tragar, suéltalo es mío y no sabemos qué mañas tengas.