Para Kate, la vida en la nueva Ciudad ha resultado un tanto difícil, de niña creció en un pequeño condado con no muchos habitantes, donde el trabajo que predomina son la crianza de animales y el cultivo.
Pero ahora que ya se había graduado de la Universidad ella quería crecer en el ámbito laboral, pero nunca imaginó que su vida cambiaría tan drásticamente...
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Capitulo 20 "LA VERDAD COMIENZA A SALIR A LA LUZ"
Después de la dolorosa partida de la abuela Chloe, Nadya y Kate habían pasado días muy
tristes, ninguna de las dos creía que la abuela ya no estaba con ellas, pero
siguiendo sus consejos las dos pudieron regresar a sus actividades muy pronto,
siempre con el recuerdo de ella muy presente y llevándola en el corazón.
--Buenos días chicas, ¿cómo amanecieron? —pregunta Magy bajándose de su carro para
ayudar a Nadya con sus instrumentos.
--Mejor, ¿cómo están las cosas en la editorial? —responde Kate.
--Todo tranquilo, ya sabes mientras no se vengan las fechas para lanzar nuevos libros
todo es más tranquilo, y ¿tú cómo te sientes Nadya? --- dice ladeando la mirada
a su amiga.
---Estoy bien, gracias por no dejarme sola en todos estos días, las quiero mucho lo
saben verdad—dice agachando la cabeza y ocultar las lágrimas que se le han
escapado.
Magy y Kate la abrazan y le aseguran que jamás la van a dejar sola, que siempre
estarán con ella, ahora ellas eran su familia. Las tres se dirigen a la escuela
donde trabaja Nadya para dejarla y después a la editorial, donde se llevan la
sorpresa de que Daniel está en su oficina esperándolas.
--Como te refieres a solo Daniel, Marco no está con el— le pregunta Kate a Lucy.
---No, solo venia el solo, también se me hizo raro siempre andan juntos—responde esta.
---Y si le paso algo a Marco—casi dice a gritos Magy.
Kate da un brinco en su lugar y su cara palidece.
--Magy no juegues con eso, mira cómo se puso Kate--- le reprocha Lucy.
Se da cuenta de la expresión de su amiga y la abraza –Lo siento, lo dije sin pensar,
no creo que haya pasado nada de eso, mejor vamos a la oficina y veamos que
quiere Daniel—dice y se lleva a su amiga al elevador.
Llegando a la oficina en efecto encuentran a Daniel ya dentro.
--Buenos días Daniel, ¿Qué te trae por acá y solo? —le dice Magy.
---Buenos días Señorita Magy, vine a entregarle algo a la señorita Kate—responde
extendiendo un sobre para Kate.
Resopla
–Tú siempre tan formal—especta Magy.
Kate toma el sobre ---¿Qué es esto? —dice.
--Es una invitación, el Joven Marco lee explicara más a detalle, pero antes me gustaría
que me acompañaras a un lugar, por favor, es muy importante—le dice muy serio.
Kate lo piensa, pero acepta y sale con él.
Daniel se había enterado que la señora Susan había investigado a Kate así como Marco
le había indicado que él también lo hiciera y es invitación no era nada bueno,
conocía a la señora Susan y aunque era una persona de gran corazón, cuando se
metían con ella o algo no salía de acuerdo a sus ideales se convertía en otra y
estaba más que seguro que en esa reunión revelaría algunos de los secretos de
Kate para dejarla en evidencia del resto de los invitados y así impedir que
Marco se casara con ella, pero él ya había trabajado en su plan, debía saber si
los hijos que esperaba Kate en realidad si eran de Marco, con la prueba de eso
la señora desistiría de su plan, pero debía actuar deprisa. Pero sería difícil
conseguir la prueba.
--¿Dónde está Marco? —pregunta Kate interrumpiendo los pensamientos de Daniel.
--Él está en casa de sus padres—responde serio.
---¿Y se podría saber a dónde es donde me llevas? —pregunta Kate al ver que cada vez
se van alejando más de la Editorial.
--Marco Recibió mensaje del doctor, quería hacerle unos estudios de rutina—lo dice
serio sin dirigirle la mirada, temía que se diera cuenta de que ocultaba algo.
--Qué raro, a mí no se me aviso nada de eso—intrigada trata de hacer contacto visual
con Daniel.
Llegan a un laboratorio en los que ella no había estado antes.
--Espera Daniel, este no es el laboratorio en el que normalmente acudimos—dice muy
intrigada sin querer bajarse del auto, sentía que algo andaba mal.
--Lo sé, a mí también se me hizo raro que nos mandaran a este, pero aquí es la dirección
que me paso el joven Marco—dice actuando no saber por qué estaban ahí para no
levantar más sospechas.
--Bueno si Marco te envío aquí es por algo—dice y se baja del auto.
Dentro ya la esperaban para realizar los estudios determinados, Daniel ya se había
encargado de poder conseguir una prueba de Marco y la compararía con la de Kate
para saber si los bebes eran realmente de Marco. Conocía a un buen amigo en ese
laboratorio por lo tanto le dirían a Kate que se trataba de un examen de rutina
y no de una prueba de paternidad.
--Señorita Kate, el joven Marco me pidió que la llevase a comprar un vestido para la cena
con sus padres y también me pidió que no comentara nada de los estudios que le
acaban de realizar, ni a él, ya lo hablara con usted más delante, pasando la
cena—dice Daniel nervioso, debía evitar que Kate le mencionara de esto a Marco
antes de saber el resultado.
--Si está bien Daniel y por favor ya te he pedido que no me llames Señorita Kate, solo
dime Kate y ya, sobre el vestido, es ¿realmente necesario? --- arquea una ceja,
no le gustaba la idea de un vestido, menos con su vientre tan abultado.
--Son órdenes del joven Marco—se disculpa.
--Está bien, pero yo no soy buena escogiendo ropa y menos vestidos para una cena, debe
ser muy elegante y abra otras personas para haber enviado invitaciones como
esta—dice sosteniendo y observando la invitación.
--No se preocupe, para eso estoy yo, creo que aún no lo sabes, pero antes de ser el
asistente de Marco yo entre como mayordomo y para eso estudie etiqueta, sé que
vestido le quedara mejor para la ocasión, por esa razón el joven Marco me envió
a mí—responde con una sonrisa.
Se detienen en una tienda que desde fuera se ve muy lujosa.
--Daniel, creo que no podríamos entrar aquí, se ve muy muy costoso—dice encogiéndose de
hombros.
--Descuida, para eso vengo también, tú debes de preocuparte solamente porque te guste el
vestido y te sientas cómoda, lo demás déjamelo a mi—sonríe.
Era a un más lujosa por dentro, parecía que estaban en plena alfombra roja, Kate
miraba los vestidos al pasar, todos eran muy bonitos, pero como era de
esperarse, su costo era muy elevado, le apenaba comprar un vestido ahí, sentía
que no podía aceptarlo, pero tampoco quería ser descortés con algo que había
pedido Marco, quizás si decía que ninguno le gustaba podrían salir de esa
tienda e ir a una con vestidos menos costosos.
--Kate, aquí mira este, sería el indicado para ti porque no te lo pruebas—dice Daniel
mostrándole un vestido color Verde esmeralda, corte corazón, tirantes pequeños,
mangas a los hombros y con una caída hasta los pies.
--No lo creo—dice mirándolo.
--¿Por qué no? — pregunta, serio, era un vestido muy bonito.
--Yo prefiero con manga larga, no me gustan los tirante y brazos descubiertos—dice
encogiéndose de hombros.
--Ahora que lo dices, siempre usas manga larga, pero estamos es verano un vestido de
manga larga no sería el apropiado, porque no te lo pruebas solo para que mires
como se te ve y puede que te guste—le dice dándole el vestido y señalando el
vestidor.
Kate lo piensa por un momento, pero al final se decide, solo se lo probaría y ya. Entra
al vestidor y se pone el vestido, dentro hay un espejo largo donde puede verse
completa, Daniel tiene razón es un vestido realmente hermoso y le sienta bien,
de hecho, su vientre no parece estar tan grande y eso le gusta, pero su brazo,
como podría ocultar eso.
--¿Y qué te parece? —le dice Daniel desde fuera. --- ¿Te gusta? ---.
--La verdad sí que tienes buen ojo Daniel, se ve muy hermoso y me gusta mucho, pero
tengo un problema—responde seria dentro del vestidor.
--¿Problema?, de que se trata— Daniel cree saber cuál es, si Kate es quien él piensa, sabe por
qué no le gusta usar vestuario de manga corta.
--Míralo por ti mismo—dice y sale dele vestidor, lucia radiante en ese vestido. –Algún
plan para esto—señala su brazo, avergonzada.
Daniel la observa, siente una punzada, no hay duda Kate es la persona a la que Marco
abuso hace meses.
Suspira –No veo nada malo, pero si no te gusta esa cicatriz podríamos ocultarla con
algo de maquillaje, conozco de alguien que podría hacerlo—sonríe serio.
--Gracias, tienes razón, no me gusta, esta cicatriz me recuerda un momento muy difícil y
doloroso para mí, si no la veo me siento mejor—le devuelve la sonrisa igual de
seria a Daniel.
--¿Puedo saber cómo es que te la hiciste? --- sabe que está yendo demasiado lejos con
esa pregunta.
---Lo siento, no me gusta hablar de eso, ¿estás seguro de que puedes hacer algo con
esto?, si es así este vestido me gusta—dice y sonríe.
--Claro que sí, no tienes nada de qué preocuparte, bueno te esperare en la caja—dice y
se va.
Como ya lo sospechaba, Kate era aquella muchacha, la que una vez Marco le había pedido
buscarla para tratar de enmendar su error, ayudarla con algo y ahora estaba
ahí, no solo la había encontrado si no que ella era lo más importante para
Marco, no podía ni imaginar el dolor que le causaría al saber toda la verdad,
solo faltaba comprobarlo con la prueba de paternidad.
--Daniel—dice Kate llegando a la caja y sacando a Daniel de sus pensamientos.
--¿Sucede algo? —pregunta
--No, nada solo que te había hablado antes y pareces distraído, ¿estás bien?
—pregunta arqueando una ceja.
--Lo siento estaba distraído mirando la decoración de la tienda—miente. –Paguemos
esto y vayamos a desayunar, ya debes de tener hambre—sonríe.
Se sonroja –La verdad es que si, estos dos bebes me consumen por completo--.
--Nos vamos, dime ¿A dónde te gustaría ir? —pregunta abriendo la puerta de la tienda
para que ella pueda salir.
--A donde sea está bien—sale de la tienda. –Daniel, ¿te puedo pedir un favor? —dice
agachando la mirada.
--Claro, ¿Qué necesitas? —la observa.
--No le digas a Marco sobre mi brazo, él no sabe nada—se encoge de brazos y sin mirarlo
continúa caminando.
Estaba claro que Marco no lo sabía. –No te preocupes, no le diré nada, tienes mi
silencio de todo Kate—la sigue por detrás a donde está el carro.