Reencarne Como El Omega Obsesivo De La Novela De Mi Nemesis

Eliah seguía molestando durante dos semanas enteras, y un día mientras estaba haciendo su alboroto sentí una presión horrible en la parte baja del estómago y luego un dolor agudo recorrió mi cuerpo, Así que pegué un grito de dolor Llamando a la persona más importante para mí:

-Ayudaaaaaa Michael.

Mi mayor tomo corre hacia mí luego llamó a Eduardo Y juntos me llevaron hasta la salida donde estaba el desgraciado de mí "esposo" quien dijo:

- qué te está sucediendo?

enojado le respondí:

- maldito imbécil acaso estos últimos meses lo has dedicado solamente a vagar y a malgastar mis recursos?

-por que lo dices?

-ash, imbecil ash, al menos te viste haber leído un libro sobre paternidad para que así supieras lo que me está sucediendo mejor quítate ellos necesitan enviarme al hospital lo más pronto posible a menos que quieras que tu hijo o hija nazca fuera de esta casa en la arena.

-lo siento, lo siento.

-mierda, eres un imbecil, quitate.

Michael junto con Edward me llevaron al Auto y Edward manejó Pero él Parecía un loco en la carretera se estresaba fácilmente y la presión era demasiado para ella por lo que se desesperó rápidamente con mis gritos yo jamás había sentido un dolor como ese por lo que en ese momento entendí porque las mujeres gritaban lloraban y se quejaban al momento de parir ya que era algo que no se lo deseaba ni a mi peor enemigo ya que parecía como si te estuvieran metiendo cientos de cuchillos helados en la piel el dolor era horrible parecía como si un hueso o más de uno se estuviese rompiendo al tiempo sin embargo ya que no quería demostrar demasiada fragilidad intenté soportarlo lo mejor que pude tomando respiraciones largas tal y como había leído en los libros y enfocándome en algo para que mi mente se desviara del dolor.

lo único bueno de que él manejara como locos que llegamos rápidamente al hospital al parecer se habían llamado porque me están esperando con una camilla en cuanto baje del auto entraron con urgencia al hospital y luego me llevaron al área de maternidad en donde me revisaron en repetidas ocasiones y me ayudaron con algunos medicamentos para el dolor lo cual hizo más soportable el momento, luego de 13 horas los dolores se intensificaron y los medicamentos ya no me hacian efecto, Edward y Michael quienes estaban en la habitación junto conmigo se asustaron mucho por lo que corrieron a buscar al doctor, en cuanto él llegó les prohibió el paso a mis acompañantes y luego me revisó me miró a los ojos y luego me dijo:

- señor Ya es hora está completamente dilatado por lo que es momento de que dé a luz.

Yo estaba llorando a mares y retorciendome de dolor, estaba temeroso y ansioso por lo que dije:

-ya?, no, no por favor, aun no, todavia no estoy preparado.

- señor que no podemos retrasar más este proceso tendrá que dar a luz ahora a menos que quiera poner en riesgo su vida y la del bebé.

<>

-esta bien doctor, ugh(dolor repentino), digame que hacer.