Mi nombre es Hanna y esta es mi historia.
En mi vida todo lo que creí que era real nunca lo fue, por eso sé con seguridad que la frase de "no hay peor ciego que el que no quiere ver "no encaja conmigo....yo realmente quería poder ver; el dolor y el sentimiento de tristeza en mi corazón no desaparecía y la verdad aun persiste por eso la soledad fue y seguirá siendo mi mejor compañera de vida ¿porque?.
-Porque ya no logro confiar en nadie hasta perdí las ganas de conocer y amar a alguien.....perderlo todo porque otras personas así lo decidieron....ja! ¡que ridículo!
-Es insoportable; pero¿qué podía hacer? si mi alma estaba encerrada en una oscuridad profunda sin poder ver ni un poco de luz infiltrarse.
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Días de oscuridad
Al escuchar al médico Carlos decidió que trabajara menos horas en la oficina, no me opuse a su decisión por que si trabaja menos horas podría ayudarle a Mica con lo del cumpleaños.
- Entre preparativos y trabajo el tiempo pasaba rápido.
- Había llegado el día del cumpleaños y Alex pudo llegar temprano a casa, estaba feliz de volver a verlo que cuando entró a casa fui corriendo a sus brazos.
Alex- ¡Te extrañé mucho, mucho!
Hanna- ¡Yo también te extrañé amor!
Alex- Vamos a la habitación
Hanna- Me encantaría seguirte, pero tengo que ir con Mica a terminar de preparar la fiesta
Alex- No quiero que te vayas
Hanna- Es el cumpleaños de Carlos amor, después de la fiesta seré solo tuya, ¿quieres?
Alex- ¡Siempre!
- Terminamos los preparativos y volví a casa para bañarme, después salí con Alex a casa de Carlos donde lo esperaríamos para sorprenderlo, llegamos y estaban todos esperando.
- Apagamos las luces cuando Mica nos avisó que ya estaban llegando, cuando prendió la luz lo sorprendimos todos con un fuerte ¡Feliz cumpleaños!
- Todo había salido bien y estuvimos festejando hasta cerca de las dos de la madrugada, pero no tuve el valor de decirles que estaba embarazada, con mi marido decidimos retirarnos y al salir nos dimos cuenta que nos olvidamos las llaves del auto, pero como era una madrugada hermosa nos fuimos caminando a casa, pero... fue la peor decisión que tomamos en ese momento.
Hanna- Amor hay algo que debo decirte
Alex- Si amor, dime
Hanna- Estoy embarazada, vamos a ser padres
Alex- ¡¿Que?!, ¿de verdad?, ¡ja, ja, ja, gracias Dios!
- En ese momento dos hombres aparecieron y uno de ellos dijo el nombre de Alex, cuando él se giró para mirar le apuntó con un arma y empezó a gritar;
-¡Lo encontré!
Hanna- ¡Alex!
Alex- Tranquila, quédate detrás de mí
- Cuando grito apareció un tercero que se acercó a Alex con una navaja y nos empujaron a un callejón que había en esa parte y él tipo del arma le dijo a Alex;
-Lo siento, pero nos pagaron bien
Hanna- ¡Por favor, detente!, ¡no le hagas daño!
-Uno de ellos me agarro por atrás y dijo;
-Sh... no digas tonterías
Alex- ¡Aléjate de ella!, ¡no pongas tus sucias manos en mi mujer!
- Cuando el dijo eso... el tipo que tenía la navaja le hizo un corte en el estómago y le quitó el collar que tenía el talismán rompiéndolo.
- Alex cayó al piso y yo también, entre lágrimas él empezó a suplicar por mí.
Alex- Por favor, se los suplico alejenla de mi, no le hagan esto ¡por favor!
- Mi cuerpo no respondía, me dolía mucho, tanto que no podía respirar.
- Alex estaba siendo golpeado por los tres y yo... no podía hacer nada por él, sentí desesperación y angustia por verlo sufrir frente mío... soportando las burlas y risas de ellos al hacerle daño.
- En eso uno de ellos dijo;
-Ya nos divertimos mucho muchachos, ¡acabemos con esto!
- Cuando miré a Alex él me miró y sonrió diciendo;
Alex- Te amo, entonces sentí dos disparos, ¡bang, bang!, que me ensordecieron, después el que disparo volteo a verme y dijo;
-Esto es tu culpa
- Luego me apunto diciendo;
-¡Muere!
- ¡Bang!, sentí como la bala atravesó mi piel y ellos salieron corriendo del lugar.
- Era insoportable el dolor que sentía, pero aun así me arrastré en el suelo solo para llegar hasta donde estaba Alex, cuando llegue lo abracé y le dije;
Hanna- Por favor despierta amor...
- Mis lágrimas no dejaban de caer en él, como a los quince minutos Carlos y Mica llegaron.
Mica- ¡Alex!, no, no, debes llevarte a Hanna ahora
Carlos- Hanna... lo siento debo llevarte lejos de él
Hanna- ¡No!, Carlos espera no siento... dolor, yo... ¡ALEX!, ¡NOOOO!, ¡ALEX!, ¡NO ME DEJES!.. ¡AAA!
Carlos- ¡Hanna!, ¡por favor tenemos que irnos!
Mica- ¡No, noooo!, ¡tienes que despertar por favor, por favor, hermano despierta!
- La lluvia empezó a caer sobre mí y sobre el cuerpo de mi amado, caí de rodillas al suelo, miré al cielo diciendo;
Hanna- ¡DIOS NO TE LO LLEVES POR FAVOR!, ¡NO A ÉL!, ¡¿ME ESCUCHAS?!... ¡AA...!
Carlos- Por favor, debemos irnos de aquí
- Cuando quise levantarme se nubló toda mi vista y me terminé desvaneciendo, después de eso desperté en una clínica con mi padre al pie de la cama cuidándome.
- Al abrir los ojos quise llamar a Mica para saber de Alex, así que le pedí el teléfono a mi papá, pero al marcar su número me daba fuera de servicio, entonces llame a Carlos.
Hanna- ¿Carlos?, ¿qué sabes de Alex?
Carlos- Hanna, lo siento pero... Alex no resistió... ayer hablé con Mica, ahora me estoy yendo al velorio lo siento
Hanna- ¡¿Qué?!, pero... dime donde es voy a ir
Carlos- ¡No!, no lo harás, tienes un bebé que cuidar
Hanna- Pero es mi marido, quiero estar con él
Carlos- Perdóname, pero esta vez no puedes
Hanna- Por favor...
- Me enojé mucho en ese momento porque no podía saber donde estaba, sentía que necesitaba verlo por última vez y no me dejaban hacerlo.
Mi padre al ver como estaba me pidió que fuera con él a casa por un tiempo, cuando me dieron el alta en la clínica fuimos por mis cosas y me fui con él sin despedirme de mi hermano.
Fran- ¿No llamarás a Carlos para avisarle donde vas a estar?, se preocupara si no sabe donde estás
Hanna- No lo haré, tampoco lo quiero ver
- Desde que había discutido con Carlos no hablaba con él, no podía hacerlo...
- Mi padre desde que se alejó de Sol decidió alquilar una vivienda en el centro de la ciudad, cuando llegamos fui a la habitación que usaría durante mi estadía, no tenía fuerzas para nada solo quería dormir.
Fran- Hija, ¿te sientes bien?
Hanna- Sí, solo tengo sueño
Fran- Entonces duerme un poco, yo bajaré el equipaje
Hanna- Gracias
- Ese día fue el único día que pude dormir tranquila, después no podía, solo podía recordar esa noche.