Una novela romántica, que relata los infortunios de Sofia, quien reencarnara como Maribel, en una novela romántica que odia. Ella sólo quiere vivir pacíficamente,¿lo logrará?
NovelToon tiene autorización de the legend of the moon para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 19
Capítulo 19
Cuando hablaba se escucha el golpe de la puerta de la cocina, que es abierta de un tirón, entra corriendo Cloe, regañando a su pequeña hija
-¿Cuántas veces te dije que no salieras a caminar por la mansión de noche?-
-Madre cálmate, esta amable señorita cocinó para mí, no quería molestarte, porque estabas cansada-
La mujer recién, en ese instante se percató, de nuestra presencia
-Lo siento señorita, Duque disculpen, tengo una hija descarada, cualquier castigo que sea para ella lo tomaré yo-
La niña miraba desconcertada y el Duque solo rio y la miró con simpatía
-Cloe sabes que no me molestan tus hijos, agradezco que sigas trabajando incluso siendo madre y que tu esposo siga tan fiel a mí, como lo fue con mi padre, esta pequeña tiene mi permiso para merodear por la cocina cuanto lo quiera hacer-
-Le agradezco Duque, tú mocosa agradece y dale las gracias a la hermosa señorita por cocinarte-
Acto seguido, la niña se baja de su silla, se acerca al Duque le pide que se agache le da un beso en la mejilla y hace lo mismo conmigo
-Gracias por todo, me voy a descansar así mamá descansa-
Mientras se alejaban, se escuchaba como la niña elogiaba mis artes culinarias, aunque es algo simple, para ellos es nuevo.
Al dar unos pasos fuera, me levanto y me dispongo a retirarme o eso creía, siento un enorme cuerpo que se coloca frente a mí paso
-¿Ya te escapas?-
-Es tarde, no tenemos nada que discutir-
Comienzo a dar unos pasos para atrás, hasta que mis muslos chocan con la mesa, en la que estábamos comiendo, mientras me alejaba él se acercaba, más y más. Cuando ya no podía huir más, pensé en escapar por uno de sus lados, por lo que me toma de la cintura, me sienta en la mesa y pone sus brazos a los costados. Me quedé estática mirándolo
-¿Por qué me miras con tanto miedo?-
-¿No es obvio?-
-La verdad no, siempre me llamó algo la atención de tí, ¿por qué te escapas de mí?-
-¿Disculpe, yo me escapo de usted?-
-Si, al comienzo cuando te conocí, creí que lo hacías simplemente para llamar mi atención, las mujeres suelen usar todo tipo de tácticas para que les preste atención. Pero tú simplemente me ignorabas, siempre que mi padre iba a tu casa, aprovechaba para ir, sin embargo, nunca me viste, siempre me acercaba a hablarte, eras tajante con tus respuestas, te limpiabas si te besaba la mano, ni me mirabas, mantenías tu cabeza baja y cualquier excusa era buena o para irte o para no estar presente…-
-Lo piensa demasiado Duque, puede ser que simplemente no tenga interés en usted, ¿por qué tendría que ser como todas y me tendría que gustar?-
-Al comienzo lo pensé, por eso dejé de insistir, pasaron los años y te vi en la feria, no pude resistirme a seguirte luego que saliste huyendo de ese idiota, más sabiendo que buscaban chicas como tú y tú hermana, para vender. Esa noche entendí algo…-
-¿Qué puedo matarte cuando quiero?-
Mientras hablaba, deslizaba mi mano a mi muslo suavemente, hasta encontrarme con mi arma, pero una mano se coló entre mis ropas y atrapó mi mano junto con la daga
-Si quisieras matarme, estaríamos en problemas, soy difícil de matar-
El infeliz me tiene atrapada aquí arriba y cada vez está más cerca
-¿Quieres saber que entendí?-
-Deja de hacerte el misterioso y habla-
-Que tu problema no era conmigo, sino con otra cosa, como mi título, así que tu problema es que sea el Duque de estas tierras o ¿acaso hay otra cosa?-
-No me gusta la gente que posee mucho estatus-
El maldito comienza a reír y mi cuerpo reacciona emocionado a esa melodiosa voz, maldito traidor, te bañaré con agua fría de ahora en más por traidor
-¿Sabes la cantidad de mujeres que me persiguen por mi estatus? Y tu simplemente huyes por lo mismo, ¿eres normal?-
-¿Y tú te ves? Tienes atrapada a una frágil damisela, ¿acaso quieres aprovecharte de mí?-
Se acerca más y me susurra a mi oído
-Nunca te haría nada que no quieras, pero dudo que seas una frágil damisela, si fuera otro ya estaría muerto en el suelo, por tu daga y seguro ese hombre que te sigue a todos lados, te ayudaría a hacer desaparecer un cadáver-
Cómo diablos supo…
-Ahora que no puedes salir corriendo quiero proponerte algo-
-¿Proponerme?-
-Sí, cásate conmigo-
Comienzo a reírme y siento como su mirada me penetra hasta el alma
-Lo decías de enserio-
-Sí, necesito una mujer como tú-
-Hermosa declaración, pero no es mi estilo casarme, no hay negocio que me sirva, serías un manojo de problemas para mí-
Con la mano libre, acaricia suavemente mi cintura y me mira a los ojos
-No sería gratis, te doy lo que quieras, sé que ese idiota los dejo al borde de la banca rota, con mi nombre de respaldo, te lloverán ofertas, puedes incluso usar mi dinero para financiarte-
-Escucho una oferta muy jugosa pero no entiendo que ganas, no tienes beneficio-
-Más del que crees, te contaré pero promete que me escucharas, no saldrás corriendo y lo más importante, quedará entre nosotros-
-Bien te escucho-
-Confió que no me matarás-
Se aleja unos centímetros, pone una silla frente a mí, se sienta y yo quedo en mi sitio, con mi mano en mi daga, tch no puedo matarlo así como así, sería un problema muy grande…
Me cruzo de piernas, por las dudas, porque este cuerpo reacciona como quiere antes este hombre y cruzo mis brazos en mi pecho, él se acomoda en la silla, pero no se aleja, se mantiene con su cuerpo lo suficientemente pegado, como para rozarme
-Comienza a explicarte que ya pareces un acosador-
-quiero que escuches todo-
-Sí, escucho-