Una Esposa Infiel.

(Nuestra sociedad es masculina, y hasta que no entre en ella la mujer no será humana) Henrik Ibsen

Andres que en primer lugar, deseaba ir a buscar a su jefe, se detiene y decide quedarse, para de alguna manera tratar de proteger a Ellen.

Las camionetas arrancan con Ellen dentro de una de ellas, Ellen trata de liberarse de Felipe.

Pero un Felipe nada piadoso golpea repetidamente a Ellen, incluso le da fuertes golpes al estomago. Ellen de un momento a otro toma con sus dos manos su vientre y da un fuerte grito de dolor.

Felipe le grita. _ Ya cállate loca y deja de hacer escenas que igual iras conmigo. Te enseñaré a dejar de comportarte como una zorra.

De un momento a otro Ellen siente humedad en su zona intima de igual forma un gran dolor. Felipe que la observa ve como por el interior de las piernas de Ellen resbala un hilo color rojo.

Un grito desgarrador se escapa de la boca de Ellen. Mientras sostiene su vientre.

Felipe Grita. _ ¡detente! Al hombre que maneja la camioneta.

_ ¿Que ocurre? Dice de muy mal humor el hombre que conducía.

Felipe se acerca a Ellen y le habla muy enojado y casi entre dientes. _ A mi nunca fuiste capaz de darme un hijo. Y a este maldito idiota se lo das tan rápido.

Ellen no escucha lo que dice Felipe. solo oprime su vientre por el dolor que siente, de su rostro resbalan gotas de sudor, sus dientes están tan apretados que podrían romperse.

 Felipe le dice al chófer. _ Llevarnos a un lugar lejos donde me pueda deshacer de ésta inútil.

Andres se alarma al ver que la camioneta se detuvo. el va detrás de ellos guardando distancia, para que no se den cuenta de que los sigue. aprovecha la pausa para insistir en llamar por teléfono a su jefe.

Francisco Tamayo ve la pantalla de su teléfono, que se ilumina así que ve que tiene varias llamadas de Andres su hombre de confianza, molestó y decide contestar.

_ Dime porqué me llamas. Dice Francisco casi a gritos, tratando de controlar su enojo ante su acompañante.

Andre dice con algo de preocupación en su voz.

_ Señor a la señora Ellen su esposo ya la sacó del apartamento de...

_ Es obvio. Responde con el sarcasmo que caracteriza a Francisco. - Para eso te dije que le dieras la dirección de donde estaba.

Andres algo impaciente agrega. _ Lo que ocurre señor es que...

Francisco _ Nada. entiendes. Nada, así qué deja que sea su marido el que la separe de ese escritor de quinta. Ya deja de joder, estoy ocupado.

Termina de decir y cuelga.

Al ver que empezaron la marcha otra vez, las camionetas pero a distintas direcciones. Andres ve que Francisco corto la llamada. Andres arroja su teléfono a un lado y decide seguir a la camioneta donde llevan a Ellen.

Francisco repite palabras he insultos que Ellen no entiende, más el dolor que siente es indescriptible, tanto que nubla sus sentidos.

La camioneta se aleja de la ciudad, la ruta es desconocida para Andres que al ver que incluso el alumbrado público llego a su fin apaga los faros de su auto. y pone más distancia de la camioneta donde llevan a Ellen.

De un momento a otro ve como a él se aproxima la misma camioneta, que casi choca con el, frente a frente. la colisión pudo ser inminente, pero una reacción rápida de Andres pudo evitar que eso pase.

Andres se detiene. Ve como la camioneta se aleja y casi decide seguirlos nuevamente, pero un escalofrío pasa por su nuca el mismo que lo obliga a adentrarse un poco más a esa zona descampada y desconocida.

Andres prende nuevamente los faros del auto, por el camino ve las huellas que dejo la camioneta en el suelo de tierra, hasta que ve un bulto blanco en el suelo, tirado a un lado.

Andres detiene su auto y decide bajar, con una linterna y al acercarse al bulto, ahora allí abajo paso a paso, la respiración de Andres se hace más profunda y breve. al ver que es un cuerpo y que en la extremidades inferiores hay sangre, ilumina más el cuerpo hasta llegar al rostro femenino, que ahora esta algo golpeado y sucio por la tierra.

Andres reconoció ese rostro, ahora sucio y maltratado. atrás quedó las dulces sonrisas que se dibujaba en esa piel color durazno.

su dulce mirada ahora está apagada.

Andres escucha un muy suave quejido, el cual, lo despierta de esos dulces recuerdos, dónde él día de ayer vio tan feliz a Ellen.

Ahora Andres se agacha y toma en brazos el cuerpo de Ellen.

La sube a su camioneta. y l1a lleva consigo a donde no la puedan encontrar. Es más va a una playa de estacionamiento y cambia de auto, toma otro llevando a Ellen consigo.

Francisco en medio de su loca noche con la modelo, de la cual lo menos que le importa ahora es el nombre. Pues cada que la embiste, la llama Ellen y cuando la modelo hablo para corregir su nombre, Francisco le dio una bofetada y le dijo.

_ Solo callate.

En algún momento perdió el interés en la mujer y todo su lívido lo abandono.

Francisco le dice a la modelo puedes irte.

Modelo _ Pero con este golpe no podre trabajar en...

Francisco la interrumpe y le dice. Solo vete y te haré una transferencia muy generosa.

La modelo sintiendo temor ante lo cruel que pueda ser Francisco decide irse y dejar solo a ese hombre maduro. que bien podría ser su padre.

Francisco tomó su teléfono, manda un mensaje y lo vuelve a arrojar. Para luego servirse un vaso con Wisky. Así mismo camina hacia la ventana de su mansión y escucha las olas del mar, cierra los ojos y pretende que la tranquilidad que le da el licor y las notas musicales de " El invierno" interpretado por Ara Malikian.

ingresen a sus oídos y calmen todos sus sentidos. Los mismos que ahora están deseosos de ver, escuchar, percibir el aroma, sabor de su dulce piel, y apoderarse de todo el cuerpo de Ellen. Para proclamarse como único dueño.

es así como esta terrible noche se apodera del dolor de una mujer que solo quería amar y ser amada. Que se atrevió a desafiar a su cruel carcelero. A amar a un bello y joven hombre.

Que por cierto ahora en medio de la noche es que Javier despierta después de recibir los golpes que le dio Felipe y los hombres que lo acompañaron.

Javier abre los ojos y se intenta incorporar. Así mismo, recuerda lo que le ocurrió, busca a Ellen con la mirada, en un inútil esfuerzo grita. _ ¡Ellen! Ellen mi amor.

No está. Ella no está más allí con él, todo fue cierto, no una simple pesadilla de la cual se hubiera librado despertando.

_ Se la llevo. Se repite así mismo Javier.

_ El se la llevó. Pero ¿Porqué? ¿Para qué?

Javier decide levantarse del suelo definitivamente, con dolor y esfuerzo lo logra hacer, busca su teléfono, el que primero encuentra es el de Ellen, lo toma y enciende, allí en la pantalla ve como figura una foto donde se ve a Ellen sonriendo al lado de una radiante morena. Claro, Cecilia piensa Javier y decide buscar a Cecilia en el WhatsApp. Allí ve muchos mensajes no contestados por Ellen, mensajes de Cecilia, La tía Silvina, Felipe, Rolando, Maria y de Francisco Tamayo.

Muchos mensajes de Francisco Tamayo. ¿Porqué será tanto el interés de Francisco Tamayo en su mujer?