El Arquitecto

En otra parte de la ciudad Samantha, colman de preguntas a su hijo, quería saber todo lo que sabía de el nieto mayor de Hanna.

Cómo que aún no tienes nada- grito furiosa- pero que acaso estás yendo a jugar imbécil.

Mamá, a penas llevo una semana en la universidad y la chica con la que pretendes que me case es repudiada por Damián, no me sirve para acercarme- dijo Gabo.

Piensa en alguna forma idiota, espere muchos años para verlos caer y no vas a arruinar mis planes por tu empatía- dijo- nosé debe haber algo ¿Tiene novia?

Si mamá, tiene novia, una chica pobre que no tiene nada- dijo él

Ja ja ja ja así que hace obras de caridad el niño bonito- dijo agarrando su barbilla- por ahí vamos a empezar, o intentas sacarle la novia o yo misma me encargo.

Mamá, necesito saber más de esa familia- dijo Gabo.

Ja Con lo sencible que eres, es probable que te pongas de su lado, no quieras verme la cara de estúpida Gabo- dijo aún más enojada.

Algo no andaba bien, y Gabo iba a averiguarlo y Jazmín debía ayudarlo. Ella los conocía más y quizás tenga datos de los padres o abuelos de Damián para comenzar a investigar.

📳Necesito encontrarme contigo

- ¿Que quieres Gabo? No estoy de humor para fingir amor.

📳 ja ja ja yo tampoco linda, pero lamentablemente tienes información que necesito

- Nada es gratis en esta vida cariño

📳 Puedo darte lo que quieras 😉

La idea de tener a Gabo Williams en la palma de su mano le gustó a Jazmín, hacía tiempo que no desahogaba sus bajos instintos y necesitaba algo de acción. Quedaron de verse en el departamento de Jazmín.

Media hora después y bajo la coquetería de Jazmín, ambos se entregaban al deseo y la pasión. Ella descubrió que Gabo disfrutaba tanto como ella del Sadomasoquismo, por lo que eran una pareja sexual que se entendía muy bien. Luego de saciar sus ganas las preguntas llegaron.

Dime ¿Que quieres saber Gabo?- dijo Jazmín, acostada en su pecho y delineando su torso desnudo con su dedo índice.

Todo lo que sepas de la familia a Damián- dijo éste sin vacilar.

Ella dudosa comenzó a contarle lo que sabía, lo poco que había escuchado en algún momento de sus padres y el motivo por el cual ella estaba obsesionada con Damián. Gabo escuchaba todo con mucha atención, le dio una nalgada y le dijo:

Deja de desear a ese imbécil, al menos cuando estés conmigo- rugió molesto. Lejos de molestarle esa acción encendió nuevamente a la ninfómana que vivía en el cuerpo de Jazmín.

¿Porque no me haces olvidarlo?- dijo subiéndose completamente desnuda encima de Gabo.

Tu lo pediste- dijo él entrando de una vez en ella haciendo la gritar de placer.

siguieron por todo lo que restaba del día, el mundo se detuvo en ese momento para ellos, nadie importaba.

Gabo ya tenía lo que necesitaba para comenzar a investigar, no es que desconfiara de su madre, pero algo no le terminaba de cerrar con lo que ella decía