Introducción En un mundo donde todo está cambiando, debemos enfrentar nuestras virtudes y debilidades, pero sin olvidar el amor. Esta es la historia de Valeria, una abogada dedicada a ayudar a otras mujeres. Después de su trágico rompimiento, se dedicó enteramente a su profesión. Sin esperarlo, conoció de nuevo el amor, ese amor sincero en el que te da estabilidad. Claro no todo lo que brilla es oro, ya que este caballero viene con una sorpresa que le cambiará por completo la vida. El caballero que conquista a Valeria, es un hombre mayor, viudo, que al vivir en constante conflicto con sus hijos, lo hace huir lejos de todo para buscar la tranquilidad que le han arrebatado, la traición viene de quien menos lo esperas. Pero el destino le tenía preparado una recompensa por todo el dolor que había experimentado. Al mismo tiempo disfrutaría de nuevo del amor y la pasión.
NovelToon tiene autorización de Nay Escoto para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Temores
Capítulo 18
Federico había solicitado que enviaran su avión privado, era momento de volver a su mundo. Valeria empacaba sus cosas, el viaje sería largo y harían una escala en Madrid.
—Federico ¿A qué hora sale el vuelo?.—preguntó Valeria
—En cuanto lleguemos al aeropuerto, cariño mande traer el avión de la empresa. No viajaremos en vuelos comerciales, llegaremos a Madrid para que vayas a hacer lo que tengas pendiente. De ahí volaremos directo a México.—respondió Federico, estaba sorprendida por la respuesta obtenida, su esposo tenía un avión privado como era posible. Pero ella había decidido antes de la boda no preguntar nada, así que le tocaba esperar y ver todo con sus propios ojos. Llegaron al aeropuerto, efectivamente los estaban esperando.
—Bienvenido señor Faberman es un gusto verlo de nuevo.—saludó su asistente de vuelo
—Gracias Lizeth, te presento a Valeria Faberman, mi esposa.—la presento
—Es un gusto conocerla señora Faberman, estoy a su servicio.—saludó la asistente, ella solo le sonrió.
—Adelante mi amor.—la invito a subir, Valeria sospechaba que tendría un golpe de realidad.
Durante todo el vuelo, Federico se la pasó trabajando, la asistente de vuelo le dio unos folders llenos de contratos.
—¿Necesitas que te ayude?.—preguntó Valeria
—Son contratos, que se firmaron en mi ausencia. Pero igual solo necesito leerlos todos, pero está bien si quieres ayudarme.—respondió Federico
—No, no tiene caso no sé mucho sobre derecho corporativo. Soy especialista en derecho civil, mejor leeré algo más.—respondió Valeria
Después de dieciséis horas de vuelo, llegaron a Madrid para hacer su escala. Llegaron al departamento, dormirían en Madrid y temprano viajarían a México. Valeria se sentía abrumada e incómoda, tenía temor, todos en algún momento tienen miedo a lo desconocido.
—Mi amor, necesito ir a casa de mi tía.—le dijo Valeria
—Bien vamos para allá.—dijo Federico
—Si no te molesta quisiera ir sola, veo que tienes trabajo aún. Quiero citar a Ashanti para despedirme y pedirle que se encargue de todos mis asuntos pendientes.—respondió Valeria, ya había dejado todo arreglado, solo quería ir a ver a su tía Martha.
—¿Segura que no quieres que te acompañe?.—preguntó nuevamente Federico
—Si estoy segura mi amor no tardó.—respondió Valeria, él le dio un beso
Federico notó el nerviosismo en Valeria, por lo general ella es muy tranquila e imperturbable. Decidió llamar a México.
—Buenas tardes señor Faberman, a sus órdenes.—respondió Rosaura
—Mañana llegamos a México, necesito que todo esté impecable en la casa. ¿Espero que todas las flores que ordené ya estén lista para recibir a mi esposa?.—preguntó Federico
—Claro que si señor Faberman, también está lista la cena que dará en su honor. Aún no colocamos la foto de su boda, como lo ordenó.—respondió Rosaura
—Tan eficiente como siempre, recuerda Rosaura ni una palabra a mis hijos mayores, quiero que sea una completa sorpresa la llegada de mi esposa.—le recordó Federico
—Claro señor como usted ordene, los esperamos con mucho gusto.—dijo Rosaura y terminó la llamada.
Valeria llegó hasta la casa de su tía, entró como siempre. Ashanti y ella hablaron durante el trayecto.
—Buenas noches.—saludo Valeria
—Hija,¿Qué haces aquí?¿Esta todo bien?.—preguntó Martha
—Si, creo. Tía mañana nos vamos a México, estoy asustada.—respondió Valeria
—¿Por qué mi niña?¿Te hizo algo Federico?.—preguntó Martha
—No, él es un sol. Lo amo, pero tengo la sospecha de que él, es más que un simple empresario. Tiene un avión privado, y todos lo respetan, lo atienden como si fuera todopoderoso. Todo el vuelo estuvo revisando contratos, conocí a otro Federico, me asusta que todo cambie entre nosotros al llegar a México.—respondió Valeria
—Sabes el día que vino a conocernos, Bruno notó que traía un reloj Patek que vale cien mil euros o más, así que pienso igual que tú, tu esposo no es cualquier empresario. Pero no seas pesimista, una cosa es su trabajo y otra su matrimonio. No tengas miedo, además allá está Ingrid esperándote, ella también te necesita.—le decía Martha
—Ingrid es maravillosa, mi esposo quería decirme toda la verdad y yo no lo dejé, así que ahora sí que debo seguir. Vine a despedirme y agradecerte todo lo que hiciste por mí todos estos años. Espero que decidas hacer tu vida con Bruno, vendré cuando pueda y espero que tú viajes para visitarme tía. Te voy a extrañar mucho.—se despedía Valeria
Empacó algunas cosas importantes para ella y sus documentos, algunas fotografías.
—Tía, te entrego los títulos de propiedad de mi casa. Está actualmente alquilada, Ashanti se va a encargar de ello. El inquilino seguirá depositándoles.—le decía Valeria
—Sabes que puedes volver cuando tú quieras, esta es tu casa. Hija nunca dudes en dejar todo, si no eres feliz. Confío que en Federico va saber cuidar de ti y apoyarte. En cuanto tenga oportunidad iré a visitarte.—le decía Martha
—Gracias tía, te quiero mucho. Dejaré el coche en la oficina, dile a Bruno que te ayude a traerlo a la casa.—respondió Valeria mientras se despedía de ella una vez más.
Antes de irse observó todo a su alrededor, se llevaba los dulces recuerdos de su niñez. Dejaba atrás a la pequeña Valeria que llegó un día con miedos y dudas, a la casa de su tía. Más tarde en el departamento Federico la estaba esperando, no había querido llamarla para no interrumpirla.
—Que bueno que ya estás aquí mi amor.—saludó Federico
—Si, fui por algunas cosas importantes para mi. Sobre todo a darle las gracias a mi tía, creo que jamás te he contado que ella decidió hacerse cargo de mi, ella tenía una vida propia, un estilo de vida, sin embargo, me eligió, si no yo hubiera terminado en una casa hogar.—le contaba Valeria
—No estés triste, si quieres puede irse a vivir con nosotros.—le sugirió Federico
—No es necesario, ella tiene su vida aquí, vendré a visitarla.—respondió Valeria
—Te amo, y sabes que quiero mi amor, quiero llenarte de besos y hacerte mía. Consentirte, adorarte.—la seducía Federico
Valeria correspondió a los besos de su esposo, amaba mucho a Federico. Pero estaba aterrada, presentía que conocer a sus hijos no sería fácil.
*******************************************
Chicas las invito a seguir nuestra página en Instagram somos un grupo de autoras amigas y compartimos nuestras historias finalizadas y en emisión.
También tenemos spoiler y aviso de capítulos o maratones
Nos vemos en nuestra página: *AutorasBandidas*
https://instagram.com/autorasbandidas?igshid\=NzZlODBkYWE4Ng\=\=