Atada A Mí (Bilogía)

-¿Quién es Brian?

Pregunto Olivia, de una forma monótona.

-Sus negoció, su dinero y todo proviene de la trata de blanca, vendiendo niñas inocentes en el bajo mundo para satisfacción y deseo de muchos.

Los ojos de Olivia se abrieron como platos.

-Yo soy una de esas chicas que fui secuestrada y traída para vender como un pedazo de carne sin ningún valor para ellos, pero me dejaron aquí porque aún era pura, entonces debía ser primero del jefe.

Gissell frotó las lágrimas de sus ojos con brusquedad.

-Tonta mente me enamore, haciéndome una película en la cabeza de que por mi, si cambiaria, que me amaría y me cortejo, fui su centro, su prioridad hasta que cedi a entregarme a él. Desde ese día solo fui una más en su juego enfermizo.

-Gissell.

Hablo Olivia con su nudo en la garganta.

-Eres una más del montón Olivia que terminará cayendo en su trampa y luego andará necesitada de sus migajas. El no se ha casado ni lo hará tampoco.

Olivia o te doblegas a él o te doblegará en el momento que se canse de este juego.

-¡Mientes!

Hablo Olivia entre hipos ahogados por su llanto.

-Déjame demostrarte que no te miento.

-¿Cómo?

-Tengo un plan...

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-Gissell creo que esto es una muy mala idea.

-Todo saldrá bien, se lo que hago.

Hablo Gissell mientras caminaba enlazada del brazo con Olivia por el pasillo hacia la oficina de Brian.

Gissell tocó a su puerta distrayendo para sacarlo de la oficina.

Olivia se ocultó para no ser vista...

-Señor no consigo a la señorita Olivia

-¿Cómo dices?

Pregunto frotando su sien con desesperación.

Brian salió con Gissell de la oficina en busca de Olivia, que aprovecho de escabullirse rápido en su oficina revisando en su computadora, pero lo que consiguió le helo cada vello de su cuerpo y hasta la sangre.

Niña, bastante jóvenes siendo vendidas, abusadas, con políticos, jueces, diplomáticos.

Olivia tomó copia de cada archivo de importancia lanzando el pendrive por la ventana hacia el jardín cayendo en la jardinera debajo del pequeño balcón de la oficina...

Con ganas de querer saber todo regreso al escritorio sentándose frente a la computadora para seguir buscando.

Escucho la grabación de Brian y Carlota planificando la muerte de su tío:

-Esos chiquillos serían capaz de vender su alma al mismísimo diablo por algo de droga y dinero, solo son unos adictos y Oliver, los tiene en la abstinencia total, están que enloquecen.

-Si, nuestros aliados descubren que tuve algo que ver en su muerte se alzaran en mi contra, tenemos un acuerdo de paz.

Hablo Brian cortante.

-Yo me encargaré de que parezca que esos mocosos lo traicionaron, él igual los contrato para matarte a ti, para evitar tu compromiso con Olivia.

Olivia incapaz de seguir escuchando todas las atrocidades que escuchó, salió del archivo entrando a otra carpeta con fotos de ella de todo los ángulos, bañándose, desnuda, dormida, solo caminando en la casa. A cada instante sentía más asco y repulsión de haber sentido en algún momento algo de deseo o atracción creyendo a Brian otro tipo de hombre.

Dejo la laptop abierta corriendo al baño, se lanzó al suelo apoyando su cuerpo del retrete y vómito todo el contenido de su estómago, con tanto asco por todo lo que miro.

Se levantó sintiendo su cuerpo desvanecerse y camino de regreso a la computadora.

Abrió otro archivo, eran la grabación de la muerte de su tío...

Jonathan les lanzo sobre la mesa envoltorio con polvo blanco coloco una botella de ron.

Él fue el primero en lanzarse un gran trago comenzaron a tomar y consumir como si el mañana no fuera a llegar.

Damián se echo un trago queriendo acabar con la botella el solo, consumió como todos a un punto donde nada de lo que hacía era relativamente coherente...

Damián, Samuel y Camilo se miraban tan drogados que no comprendía lo que pasaba a su alrededor las grandes puertas de la bodega se abrieron entrando un Olivier mal encarado por verlo en esa situación.

Jonathan sin dar tiempo a nada disparó en contra de Oliver.

La grabación no tenía audio.

Observé a Samuel reir como que todo se tratase de un juego.

Camilo apuntando a Jhonatan con su dedo de una manera acusadora mientras le hablaba burlándose.

Su risa era algo frenética.

Su tío hablo sosteniendo su hombro tratando de mediar la situación, pero no no había audio de la grabación.

Jonathan le volvió a disparar está vez en el pecho.

Damián que se encontraba en la mesa con su cabeza inclinado en su brazo como en posición de descanso se levantó con paso torpe empujando a Jonathan.

Hablo irritado, pero igual nada de audio

Jonathan saco de su espalda otra arma dándole a Damián mientras lo apunto a su cabeza.

Algo le dijo empujando a Damián cerca a Oliver.

Lo miró dudoso por segundo hasta que camino hacía Oliver cargando su arma con tal determinación apuntando a su cabeza...

La puerta de la oficina se abrió con un Brian desencajado.

Olivia se levantó tan rápido cerrando la computadora, pero su estado la delataba

-¿Qué crees que haces?.

Pregunto sorprendido al verla hurgando en su computadora.

-Diste la orden de matar a mi tío.

Las lágrimas de Olivia se deslizaron por sus mejillas que temblaba ante su sola presencia.

-Ya fue suficiente de este juego absurdo.

Hablo Brian con un tono frío avanzando hacia Olivia.

La alzó en sobre su hombro, sacándola a la fuerza de su oficina.

Llevo a Olivia hasta su cuarto, cerro la puerta a su espalda al entrar, la lanzó en la cama, sacando unas esposas de su gaveta, esposandola a la cama.

Desabrochando su corbata.

Olivia luchó por levantarse, pero fue imposible, no había manera de poder liberarse.

-¡Ayuda!

Lloro, grito duplicando.

-Quise que fuera por las buenas, pero eres tan testadura. Que lo has arruinado todo.

Hablo Brian con sus nervios de acero intacto, nada de aquella situación le afectaba en lo absoluto debería ser algo a lo que se encontraba acostumbrado.

— Brian, no, détente, no quiero.

Grito Olivia asustada por verlo transformado.

-No se trata de lo que tú quieras, es sobre lo que yo quiero y te quiero a tí en mi cama.

Olivia golpeó a Brian en la cara con su mano libre, él sin dudarlo la golpeó devolviéndole la cachetada que la dejó un poco sorda y desorientada por segundos en los que él rompió su camisa observando su cuerpo lascivamente.

Su cuerpo ya no era el de una niña, sino el de una mujer con sus curvas muy bien proporcionada, pero aún no perdía ese brillo de inocencia de su cara que lo ponía tan cachondo al verla.

Olivia sintió el sabor a óxido en su boca de la sangre que salió de su labio partido.

-Te lo suplico detente, así no, no por favor.

Brian tocó sus senos por encima de su braziel, desabrocho sus tírate liberándola de su sostén.

Lamió su labios al mirarla indefensa, sumisa, solo para él.

-Así no.

Suplico Olivia con su piel erizada por su tacto, pero de una manera repulsiva.

-Coopera, si no quieres que sea a la fuerza.

-Nunca.

Hablo Olivia con sus dientes apretados luego de escupir su cara...

-Sera castigada por cada desplante, cada desaire, me suplicaras gentileza, pero tendré la misma que has tenido tú conmigo durante estos años ya se acabo el juego...

Brian termino de desnudar a Olivia al igual que él se liberó de su ropa.

-Disfrútalo

Susurro en su oído luego de lamerlo, descendiendo hasta llegar a sus senos, agarro su mano libre inmovilizándola con la de él para evitar que siguiera rasguñándolo.

En cuanto a la resistencia de su cuerpo podía manejarla con su peso sobre ella.