Eres La Reina De Mi Corazón

Llegamos a la escuela, mi hermano fue el primero en salir y salió casi que corriendo. De seguro para evitar que yo le diera mi beso en su mejilla. Por ahora lo voy a dejar pasar, pero ni crea que se va a salvar. Observo a Alexa y Emma acercarse a mí así que decido hacer un puchero. Por no poder darle mi beso a mi hermano.

-MILENA. Chicas pueden creerlo mi hermano salió huyendo de mí, no quiso mi beso. No es justo.

-ALEXA. No seas tan dramática por favor, quien no va a querer salir huyendo de ti.

-EMMA. Alexa no digas eso, sé que es así, pero ajá tenemos que soportarla.

De estar haciendo un puchero todo lloroso cambié a uno enojado. Por estar escuchando todo lo que dicen de mí. Cómo es posible que mis mejores amigas piensen eso de mí.

-MILENA. Ah así que me soportan porque no les queda de otra. Han partido mi corazón en mil pedazos. No las quiero volver a ver... sé que lo dicen en broma, pero las voy a poner a sufrir un poco. Y para que les vuelva a hablar tendrán que invitarme a una buena comida rápida todos los días. Si, me voy a aprovechar de ellas un poco ja, ja, ja.

-ALEXA. Mil no te pongas así, sabes que es una broma, verdad.

-EMMA. Sí, es cierto. Dinos que quieres para que ya no estés así.

Iba a ponerlas a sufrir un poco más, pero no puedo soportar ver sus caras tristes.

-MILENA. Está bien, saben que no puedo ser así con ustedes. Pero tendrán que darme algo a cambio. Sin embargo, en recreo se los digo, ya viene la profesora.

Las clases continuaron normalmente, nos dimos cuenta de que Brenda no vino hoy a clases. No es muy raro de su parte, ya que puede ser que se le pegaron las sábanas por estar en brazos de algún hombre. Pero mal que no nos haya avisado. Aunque desde ese día que la enfrentamos y le preguntamos si le gustaba Sebastián. Ella ha estado muy raro, no sé que la haya molestado. Nosotras como las amigas que somos en ningún momento buscamos incomodarla. Yo solo quería saber su punto de vista para no sentir que la estaba lastimando. Ella es mi amiga ante todo y su amistad vale más que los sentimientos que sienta por un hombre.

Estábamos en la cafetería cuando Alexa dice algo que me paralizó por completo.

-ALEXA. Mil mira Sebastián viene para acá.

-MILENA. De verdad.

-SEBASTIÁN. Hola hermosa como estás... No lo puedo creer el me dice hermosa a mi.

-MILENA. Me estás hablando a mí.

-SEBASTIÁN. Claro acaso hay otra hermosa por aquí. Chicas sin ofender.

-EMMA. Dale no hay problema.

-MILENA. Ok... Debo de estar sonrojada en estos momentos, de seguro parezco un, tómate.

-SEBASTIÁN. Puedo sentarme con ustedes.

-EMMA. Claro dale siéntate, ya nosotras nos vamos, verdad Alexa.

Alexa asintió no tan convencida,, pero igual se levantó junto con Emma. Se que a ella no le agrada Sebastián y no entiendo el porqué. A mí me parece muy lindo y amable.

Me quedé a solas con Sebastián, él empezó a hacerme preguntas sobre cuál es mi color favorito, cuál comida me gusta, entre otras preguntas. Yo obviamente respondía toda nerviosa cada pregunta. Decidimos intercambiar números para poder estar más en contacto. Sonó el timbre y nos dirigimos a nuestro salón.

Yo obviamente iba en las nubes, como es posible que el chico del que he estado enamorada, mi amor platónico conversara conmigo más de dos palabras hoy y quisiera conocerme más.

No, no esto debe ser un sueño, que alguien me pellizque o cachetee por favor.

Por estar de distraída más de un profesor me llamo la atención. Pero como iba a poder concentrarme con todo lo que paso hoy.

Mis amigas notaron lo distraída que estaba que apenas terminaron las clases me abordaron con preguntas que no sabía qué contestar. Solo les respondía con sencillas respuestas como si o no.

A Alexa le tocó sacudirme para que volviera en sí y así fue que lo hice. En ese momento llego mi hermano y seguidamente mi papá. Me tocó despedirme de ellas y decirles que hoy fueran a mi casa para hablar mejor y contarles todo. Que por favor llevarán los apuntes de hoy.

Ya que yo por distraída no copié nada.

Subí al auto y saludé efusivamente a mi papá y hermano. Ja, ja, ja mi hermano está vez no se iba a salvar de mí.

Ellos me preguntaron por qué estaba tan feliz y yo solo les respondí, que por nada. Que nada más quería demostrarles mi amor por ellos. Sé que no me creyeron nada, pero yo no iba a contarles el verdadero motivo. Ja, ja, ja capaz y lo matan con lo celosos que son.

😘