Ahora Soy Una Maga Sanadora

Esa tarde el conde no almorzó, la verdad es que las cocineras no le ofrecieron comida, y como su asistente no estaba, tampoco él lo notó… estaba muy molesto con la situación que había pasado con lady Varsovie…

[¡maldita sea! Debo explicarle todo Susan… no puedo empezar mi relación con ella, en base a mentiras… pero, y sino me cree… ¡dioses! ¿y si se aleja?]

El conde bebió otra copa de licor… los pensamientos no lo dejaban en paz…

Ya estaba por anochecer, cuando se acercó a la guardia… preguntándole por Susan…

Conde: Lady Susan, ¿no ha llegado?

- Señor, no hemos visto salir a lady Susan de la mansión…

Conde: ¿Cómo? Me dijo que iría al pueblo

- Señor, las mujeres que fueron al pueblo, llegaron hace horas, pero ella no estaba ahí…

Conde: ¿Qué? ¿Dónde está?

- No lo sé señor…

Una opresión se puso en el estomago del conde…

[nunca ha llegado tarde, para una atención, ni siquiera cuando estaba molesta conmigo]

Conde: manden a dos guardias al pueblo, quizás… no la vieron salir…

- Si señor…

[¿y si le paso algo? Mmmm quizás, solo esta en su habitación o tal ves esta enferma… recuerdo que me dijo que su magia de sanación, no sirve para ella]

El conde fue al segundo piso, a la ultima habitación… entró y se dio cuenta que era la habitación mas humilde de la mansión…

[nunca solucione esto… a pesar de que en mi corazón es la persona más importante, aquí fue tratada como cualquier empleada… ¡dioses!... si le hubiese dado su lugar, desde el principio, el problema con Varsovie, no hubiese ocurrido…]

Sin embargo, al observar mejor, le llamo la atención, que no estaban sus cosas…

[me habré equivocado de habitación… Porque aquí no hay nada]

Hasta que abrió uno de los cajones, y encontró la bufanda verde que él mismo le había regalado…

[No… no puede ser… ella no pudo haberse ido…]

El corazón del conde se agitó aún más… y salió de la habitación y llamo a una de las muchachas…

Conde: ¿esta es la habitación de lady Susan?

- Si señor…

Conde: ¿Dónde están sus cosas?

- Se las llevó…

Conde: ¿Qué? ¿Por qué?

- No lo sé…

El conde sintió que, nuevamente tenía débiles las piernas, pero esta debilidad era aun peor… por lo que se apoyo en la pared y bajo a su oficina…

[¿Por qué se fue? ¿Por qué me dejó? ¿Qué voy hacer?]

El conde se bebió dos copas mas de licor, y llamo a los guardias, que estaban dentro de la mansión…

Conde: ¿alguien vio a lady Susan?

- Si señor…

Conde: habla…

- Ella vino a verlo… pero…

Conde: pero ¿qué?

- Pero usted… se estaba besando… con lady Varsovie…

Conde: ¡NO! ¡no, no, no! Ella vio…

Las palabras dichas por él, el día anterior, retumbaron en su mente, como si se burlaran de él…

[“le prometo que, no la haré sufrir” eso le dije… y es lo primero que hago… debí ser mas claro, con esa mujer desde el principio… todo esto es mi culpa y no sé cómo arreglarlo… si Varsovie se atrevió eso, es porque albergaba alguna maldita esperanza… ¡maldición! Ahora sí que estoy perdido]

El conde volvió a beber una copa…

[debo encontrarla… tengo que explicarle todo… traeré a Varsovie para que le explique de rodillas… no lo sé… solo sé que necesito que ella me escuche… si tan solo hubiese hablado conmigo… si… pero ¡dioses! Que puedo esperar… aun no tiene confianza en mí… la confianza se crea y yo… ni siquiera tuve la oportunidad]

El conde siguió bebiendo en su oficina… ya estaba prácticamente ebrio cuando mando a llamar a sus guardias…

Conde: Escúchenme bien… tienen que encontrar a Lady Susan…

- Señor… disculpe… motivo de la búsqueda…

Conde: ¿motivo? ¡QUE SE CREEN! ¡hip! Ella… se llevó…. Se llevó… algo…

[se llevo mi corazón, y me dejo un dolor… se llevo la posibilidad de que seamos felices juntos… ¡PORQUE NO ME ESCUCHO… PORQUE NO ME DIO LA POSIBILIDAD DE EXPLICARLE TODO!]

El conde siguió bebiendo, hasta quedarse profundamente dormido…

Mientras tanto… Susan estaba tomando una taza de té, en la casa de una de las cocineras…

- Lady Susan, el joven Yard ha llegado…

Susan: ustedes le avisaron…

- Si, yo fui… es que no conocemos a su familia, y el su único amigo…

Susan: lo siento, joven Dylan, no quería molestarlo…

Dylan: para mi no es ninguna molestia, yo le dije que la iba a apoyar siempre…

Susan: gracias…

Dylan: cuénteme que quiere hacer ahora…

Susan: quiero irme al templo… o a una posada…

Dylan: podemos irnos al ducado Mortimer… mi casa es su casa…

Susan: muchas gracias… pero, creo que lo mejor será ir al templo…

Dylan: bien, permítame su bolso… traje un carruaje, para ir al puerto…

Susan: Muchas gracias, de verdad…

Susan se despidió de la cocinera y de las dos muchachas que estaban con ella y se fue en el carruaje hacia el puerto… aunque Dylan no preguntó nada, el rostro de ella estaba apagado y triste…