Mario Martínez, un estudiante de secundaria, fan de la historia de la antigua Roma, que adquiere la habilidad de invocar legionarios romanos cuando reencarna en otro mundo.
Ahora como Marius Martinus, junto con su emperatriz yandere convocada, junto con sus legiones, conquistará este mundo de fantasía.
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Capítulo 16 - Una nueva adepta
Un día después de la victoria romana sobre el ejército de Owary, los refuerzos del reino de Brigan llegaron.
Mario, que había recibido los informes del resultado de la batalla mientras se encontraba en la tienda de mando en el campamento fuera de la ciudad.
-Mi nivel debería haber aumentado después de esta batalla. Quizás aumente el número que puedo convocar.
CANTIDAD DE INVOCACIONES
NIVEL: 4
INFANTERÍA: 60.000 (12 LEGIONES)
ARMAS DE ASEDIO: 500
CABALLERÍA: 500
BARCOS: 250
-Vaya. Ha aumentado mucho desde que subí de nivel. Bueno, comprobaré los cambios con más detalle más adelante. Ahora debería centrarme en el proceso de posguerra.
El general Caudex comenzó a leer el informe de logros militares.
-Primero, sobre nuestras ganancias. Gracias a nuestras fuerzas pudimos capturar alrededor de una docena de magos enemigos que se habían rendido. Actualmente, están siendo llevados a Roma para ser interrogados. El Reino de Brigan también nos han brindado magos como asistencia técnica sobre el funcionamiento de la magia.
Caudex da una pausa antes de continuar.
-A continuación, los prisioneros. Hay alrededor de 2000 prisioneros. Además, alrededor de 20 de ellos son aristócratas que podríamos usar para pedir un rescate al Imperio Owary.
Después de terminar el de logros militares, Caudex se sienta mientras Mario se levanta.
-Sobre los prisioneros, procederemos con el sistema del Gremio de Servidumbre.
Mario no le gustaba el asunto de la esclavitud, pero sabía que no era buena idea darle mantenimiento por mucho tiempo a prisioneros de guerra porque sería un derroche de recursos, especialmente desde la perspectiva de la gente de la antigüedad. Sin mencionar que la mano se obra esclava es la base de la economía de muchas civilaciones de la antigüedad.
Por lo que Mario ideó el sistema de Gremio de Servidumbre para convertir a los prisioneros de guerra y endeudados en "siervos temporales" o "trabajadores no abonados".
Un trabajador no abonado es un empleo contratado para trabajar para un empleador por un determinado período de tiempo, a cambio de transporte, alimentación, vestido, hospedaje y otras necesidades durante el transcurso del contrato. La duración del contrato varía de acuerdo a la causa del porqué el empleado se volvió un empleador no abonado, en caso de deudas el contrato durará de acuerdo al valor de la deuda, y en el caso de los prisioneros de guerra durará 3 años.
El contrato se realiza por el Gremio de Servidumbre, una institución creada por Mario para evitar el tráfico ilícito de personas, entre ellas la prohibición de exportación e importación de esclavos de otros países.
Se pueden contratar tanto a hombres como a mujeres, y generalmente se convierten en ayudantes de granjas o sirvientes de casas. Aunque si el empleado no abonado tiene conocimientos previos de alguna especialización, el Gremio se le asignará a un amo con un oficio de acuerdo a sus habilidades.
Una vez que el trabajador cumple su contrato, queda libre. Los que aprenden un oficio inician su propio negocio.
Mario creó este sistema para evitar el uso excesivo de la mano de obra esclava para que más puestos de trabajo estén disponibles para las personas libres. Un sistema adecuado para una civilización preindustrial, y que serviría como período de transición del sistema esclavista al sistema capitalista. Al menos hasta que Mario logre alcanzar la Revolución Industrial con sus conocimientos modernos.
De repente, un soldado entró corriendo un mensaje urgente.
-¡Ah! ¡Mi César!
-¿Qué pasó?
-¡Hemos encontrado a nuestros soldados capturados!
Después de que el ejército de Owary se rindiera, se encontraron a los legionarios que habían sido capturados durante el ataque enemigo.
Pero como estaban retenidos en el campamento enemigo, fueron torturados casi hasta la muerte.
Tras llegar a la tienda médica, se podían ver a una docena de legionarios ya muertos con una tela cubriendo sus cuerpos, a excepción de uno que aún está con vida.
El legionario parecía una momia, cubierto de pies a cabeza con vendas mientras yacía en la cama.
Mario levantó su mano sobre el cuerpo del legionario herido. De repente, apareció una luz cubriendo su mano mientras activaba su habilidad curativa al legionario en un instante.
-Excelente. La herida está curada, pero descansa aquí por un rato.
-Gracias...
Mario salió de la tienda médica después de curar al legionario y decirle que descansara un rato.
Después de confirmar que todo estaba en orden, comenzó a regresar a la tienda de mando donde los oficiales lo estaban esperando.
-¡¡Por favor!! ¡¡Ayuda!! ¡¡Cúrala, por favor!!
El grito doloroso de una mujer pidiendo ayuda entró en los oídos de Mario.
-¿Qué estará pasando?
Mario de repente dejó de caminar hacia la tienda de mando y comenzó a caminar hacia la fuente del grito.
-Ah, ¿qué pasó?
Mario que había llegado a la tienda donde retenian a los prisioneros de alto valor, le preguntó a uno de los guardias.
-Una mujer está muriendo. Es la heroína santa Ryana. Tiene dificultades para caminar hasta el punto en que los demás prisioneros tuvieron que cargarla.
Mario se acerca a las afligidas sacerdotisas.
-Vaya, es terrible.
Mario dejó escapar una voz después de mirar el cuerpo carbonizado de la mujer.
Durante la retirada, la heroína intentó recitar un hechizo de rayo, pero accidentalmente uno de sus rayos impacto contra un barril de aceite, lo que hizo que este explotara y la bañara en aceite hirviendo.
-¡Mi César! ¡Aquí hay soldados enemigos! ¡Retroceda, es peligroso! ¿Emperador?
Haciendo caso omiso de la voz del guardia, Mario se acerca al cuerpo carbonizado.
-Tú...
Mario abrió un espacio entre las sacerdotisas y miró el cuerpo.
Le faltaban algunos dedos de las manos y los pies, todo el cuerpo está carbonizado de color negro; sin embargo, hay un ligero movimiento.
-Por favor, Ryana...
-¿Quieres que la curé?
La mayoría de la gente probablemente dejaría en paz el cuerpo de un enemigo caído. Sin embargo, Mario quería probar los límites de su capacidad curativa.
-Um... veamos...
-Está al borde de la muerte... voy a necesitar mucha energía mágica.
Mario comenzó a ejercer control sobre su habilidad. Utilizándolo al máximo, luchando contra la sensación de cansancio.
Entonces, desde su cuerpo, comenzó el avivamiento. Los dedos perdidos brotaron de sus respectivos muñones uno tras otro. Comenzó a parecerse a una persona una vez más.
Además, su piel volvió al color de carne y empezó a hidratarse. Luego, su cabello blanco volvió a crecer.
-Es un milagro...
-Maravilloso...
-Que agotador...
Las sacerdotisas y los guardias dejaron escapar sus voces cuando Mario terminó. Lo que yacía allí donde una vez estuvo el cadáver era una hermosa joven de cabello blanco.
-¡¡Ryana!!
-Vaya, me salvé...
Mario le entrega su capa a la chica que acababa de regresar al mundo de los vivos gracias a su capacidad curativa.
-Ese... fuego infernal me coció viva... debería haber muerto... pero... esa luz...
La hermosa chica de ojos somnolientos busca a tientas por todos lados para asegurarse de que su cuerpo esté bien.
-Está bien, Ryana. Dios te rescató.
-Ahora Ryana. Digamos nuestro agradecimiento a Dios en oración.
-Pero Dios no hizo nada. Supongo que son cosas religiosas, mejor no digo nada.
Mario, que estaba asombrado por la ingratitud de esta gente, le dio la espalda y comenzó a alejarse.
-¡¿Agradecer a Dios?! ¡¡¡Hahaha!!!
La hermosa joven comienza a reírse burlonamente.
-¿R... Ryana?
Las sacerdotisas que notan que algo está raro con Ryana. Comienzan a moverse y a dejar escapar voces confusas.
-En la oscuridad, llena de desesperación y sufrimiento. Cuando mis oraciones no fueron respondidas. ¿Quieres que ofrezca mi agradecimiento a la persona que me abandono?
Sorprendido por la risa, Mario detuvo sus pasos y miró fijamente a la joven.
La hermosa joven tenía una expresión de ojos entrecerrados.
Sus emociones de miedo y el sentimiento de desafío contra aquello que adoraba y por lo que mostraba afecto la habían vuelto loca.
La hermosa joven intenta ponerse de pie usando un bastón cercano. Caminando tambaleante, cae sobre el pecho de Mario.
-¡¡Te ofrezco todo!!
-¿Qué... qué está pasando?
Mario quedó estupefacto ante la repentina propuesta de la hermosa joven.
-Uh... me gustaría saber tu nombre.
-Oh, bueno... me llamo Marius Martinus.
-Marius... Martinus. Mi nombre es Ryana Yarum... heroína santa... como tu fiel creyente, treverenciarére y alabaré...
-¿Creyente? ... hey, ¿te desmayaste?
Mario estaba confundido con la hermosa joven que mostraba una sonrisa pura en sus brazos, que había perdido el conocimiento.
por lo menos dos diarios 😃😃😃😃😃😃/Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray/