El héroe Deku, el símbolo de la paz y el héroe más poderoso del mundo entero, es amado y deseado por todos así como temido. El sucesor de Allá Might se encargó de seguir los pasos de su mentor, exacto uno formar una familia pero no cualquier familia ni con cualquier persona.
Una familia con un...
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16
Shinsou peleó, no peleó por su vida sino por el recuerdo de un Omega rubio siendo perseguido por un Alfa al que de seguro iba a despedazar. Joder, y eso se ha hecho buen amigo de Kirishima y ahora esto. Además, había prometido apoyar a Midoriya y su familia, no podía fallar en absoluto.
Su casa quedó llena de huecos en la paredes por las balas, manchas de sangre salpicadas en todos lados, su cintas llenas de sangre más el río rojo en su suelo y su cuerpo lleno del mismo líquido. Suspiró cansado a punto de desplomarse por las heridas de su cuerpo pero pudo aguantarse y seguir de pie.
Tenía que avisarle a Midoriya, tenía que hacerlo rápido.
Se juró como pudo y salió de su casa intentando ocultarse tanto como podía, votó su celular y cualquier cosa que pudiera ser rastreable, antes de tomar camino hacia la casa de Midoriya decidió ir por Kaminari, se lo llevaría a casa de Deku estaba seguro que ahí ambos estarían a salvo.
Cojeando se fue a buscar a Kaminari, escuchó disturbios en la ciudad y ahí estaba, el villano Chargebolt peleando contra el héroe Red Riot. Las personas estaban huyendo del desastre que estos dos estaban ocasionando, se podía ver el odio en los ojos de Kirishima mientras que Kaminari solo estaba intentando escapar de él.
Hitoshi se acercó al lugar evitando cualquier carro que salga volando o escombro, alisto de su alma y con una maniobra amordazo a Kirishima por atrás el héroe se asombró por el ataque inesperado hasta que vio era Shinsou, gruñó fuertemente mostrando sus colmillos Hitoshi no tardó en imitarlo.
Dando un par de vueltas al héroe pelimorado le dio una patada a Kirishima que se seguía aprisionado, el pelirrojo cayó pesado sobre una pared. Kaminari se había puesto detrás de Shinsou para protegerse de otro ataque y descansar un poco.
Tener un cachorro y pelear al mismo tiempo era fatal para su cuerpo, sentía que iba a vomitar en cualquier momento, su cuerpo se desgastaba muy rápido entre usar energía para su don o proteger al cachorro.
—¿¡Estás bien, Kaminari!? Pregunto Hitoshi preocupe por el, Kaminari sonrío y asintió.
—Si, no es nada. No te preocupes, estamos bien— indicó el rubio levantando su dedo.
Hitoshi sonrió aliviado pero de pronto fue chocado contra un auto, Kaminari grito, Kirishima había usado de la tela de Shinsou para hacerlo volar, descuido del pelimorado que se retorció de dolor. Se volvió a levantar con unas maniobras para hacerle frente a Kirishima quién seguía dando golpes a lo loco.
—¿Por qué haces esto, Kirishima?
—Eso no te interesa — gruñó el pelirrojo hacia su dirección —Tu y Midoriya sin iguales. Son unos traidores.
—¿¡De que mierda estás hablando!?— grito Shinsou intentando quitarse al hombre de encima pero fue lanzado contra un edificio provocando que le cayeran escombros. Denki había ido su rescate pero un golpe de Kirishima lo detuvo.
El Omega rubio se quedo escupiendo sangre y mirando con odio al Alfa pelirrojo.
—Eres un hija de perra, Red.
—Mira quien habla.
—¡¿EIJIROU!?— la voz de Mina resonó en el lugar haciendo que Kirishima quedará paralizado en su lugar al escuchar la voz de su novia —¿¡EIJIROU QUE CREES QUE HACES!?
—¡¿Mina?!— contestó el alfa volteando a su dirección y encontrando a Shinsou malherido pero con una sonrisa en su rostro, ya era tarde su mente quedó en blanco y su cuerpo quedó totalmente a Merced de Shinsou.
—¿Por qué siempre caen sabiendo que estoy cerca de ustedes?— preguntó Hitoshi más para sí misma, ya que es la segunda vez que utiliza una persona importante para lavar el cerebro de las sus amigos.
Segunda vez porque, un día tuvo que usarlo en Midoriya para detenerlo de que matara a alguien, había usado todas las voces de sus seres queridos incluyendo a su madre pero eso no lo detuvo, si no fue la voz de Katsuki que funcione. En ese momento, Shinsou no entendía por qué la voz de un villano funcionó contra el peliverde pero no fue tan chismoso como para sospechar o meterse en la vida de su amigo.
—Dime, Red Riot ¿Por qué haces esto?
Kirishima se estremeció por unos momentos, el don de Hitoshi había llegado a tal límite que podía lavar el cerebro de las personas y obligar a contestarle preguntas que este mismo le hacía.
—Yo.. Me sentí angustiado... traicionado.
—¿Por quién?
—Por Midoriya, le confié todo a él pensé que él era fiel a sus ideales pero prefirió irse con un villano…
—¡No sabes nada sobre Katsuki, idiota!— dijo Kaminari siendo en vano porque Kirishima no lo escuchaba a él, solo a Shinsou.
—Es fácil lo que piense eso, Denki. Está cegado por la imagen de un héroe que no pudo salir de su maldita burbuja y ver más allá de lo que hay. Dynamight nunca fue malo, solo fue alguien con una historia mal contada— exclamó Shinsou envolviendo al pelirrojo en su tela y dejarlo inmóvil al notar un rastro de fuerza contra su lavado de cerebro.
—¡Aún así, es muy cruel lo que quiere hacer Kirishima!
—Por supuesto que lo es, ahora ¿Por qué atacastes a Chargebolt?
—Me sentía acorralado, no quería el cachorro no lo deseaba… Y estoy celoso…
—¿De quién?
—D-de…
—Habla— gruñó Hitoshi sabiendo ya la respuesta, Red Riot se contuvo estremeciéndose para intentar no decir nada a pesar de estar controlado por el pelimorado quien suspiró y lo dejó en paz —Vamos antes de que mi don se deshaga.
Indicó El Alfa al Omega rubio que asintió, los dos dejaron al pelirrojo tirado en medio de la batalla. Seguido Shinsou le pidió a Denki que le diera su teléfono para revisarlo y como sospechó tenía un rastreador, Kaminari entró en pánico al saber aquello pero Hitoshi lo calmó diciendo que el territorio de Midoriya tenía un campo donde la señal se perdía casi llegando a su hogar.
En ese momento, Kaminari suspiró aliviado por su amigo pero enseguida supo cómo Kirishima descubrió todo. Denki no entiende por qué no le dolió cuando Kirishima dijo que rechaza al cachorro quizás porque no se esperaba otra respuesta. El teléfono de Denki fue destruido y solo quedó el Shinsou.
Ambos se fueron en búsqueda de la casa de Midoriya, ya estaba oscureciendo y entre más se hacía oscuro más difícil era ver las trampas de Midoriya, tenía que apurarse.
...••••...
Katsuki Ya podía caminar por su casa sin sentir dolor al hacerlo, tener a su cachorro fue difícil pero valió la pena al ver cómo Izuku, su Alfa le daba de comer, cómo lo ve con total amor y adoración en sus ojos con solamente ver a su cachorro comer su alimento.
Y aún así el Omega cenizo no entendía qué hizo para que el mundo le diera algo tan hermoso como una familia. Pero sabía que había un karma del cual pagar, no quería imaginar cuál sería ahora con la comisión en sus nucas. Por ahora, disfrutaría los momentos que tiene junto a Izuku y su cachorro antes de que le arrebaten todo.
Todo lo que ama.
El Alfa pecoso al ver a su Omega parado en la sala medio despierto, sonrío con cariño y se acercó a él para dejar un beso en La cabellera ceniza que ronroneó feliz.
—Tu cena está lista— dijo el alfa con el cachorrito en sus brazos, Katsuki inclinó su cabeza hacia la cocina que estaba bien organizada y limpia, la cena estaba caliente y servida en la mesa.
—Mmmm…— respondió el Omega parándose con cuidado y tomando su comida empezando a comer gustoso, mientras que su Alfa sonrío feliz de su Omega disfrute la cocina.
—Zuzu come mucho— exclamó el Alfa al notar que el bebé se toma toda su leche hasta quedar lleno.
—Me pregunto porque será — bromeó Katsuki provocando un puchero en el alfa pecoso, el Omega solo se rió bajito.
—A veces me preguntó cómo se verá de grande…— dijo Izuku admirando los rasgos físicos del cachorro que eructo en el hombro de su padre Alfa.
—¿Para que te lo preguntas? Es una copia tuya— reclamo Katsuki un poco indignado de que su cachorro saliera igual a su padre Alfa —Es como si tus genes hubieran invalidado los míos.
Izuku soltó una risotada, aquella sonrisa que Kacchan nunca pensó querer ver por más tiempo —No digas eso, Kacchan. Tiene tus ojos, así que no es totalmente una copia mía.
— Síguete creyendo eso, nerd.
—De verdad — río Izuku, Katsuki rodó los ojos —Es como una combinación de ambos. También quisiera saber qué don tendrá…
Katsuki se puso serio en un instante, dejo que Izuku hablara de sus ilusiones con su cachorro, el Omega se guardó su opinión para no quitarle la alegría a su Alfa. La realidad es que Katsuki no quería que su cachorro tuviera don, que fuera sin Izuku, un sin don. Mayormente quisiera que fuera así por el mundo podrido en el que vive.
Su cachorro estaría más a salvo sin don, pero era algo que solo Katsuki podía desear. Desear que no tenga don para no ser el blanco de la comisión, de repente Katsuki penso en Kaminari. Se pregunta si había encontrado a Shinsou, el peli morado es muy reservado, vive con alta seguridad por sus enemigos casi igual que Izuku.
El Omega suspiro profundamente llamando a la atención de su Alfa que estaba mimando a su cachorro, Izuku se levantó del sofá dejando a su cachorro en una silla mecedora para bebés. Se acercó al Omega Kenny se inmutó ante la presencia de su Alfa detrás, Izuku se estiró para abrazar la espalda del cenizo que ronroneó con su tacto.
—¿Te pasa algo?— pregunto Izuku a Kacchan quién se encogió de hombros.
—Son cosas que se me salen de las manos— indicó el Omega pegándose más a su Alfa buscando afecto del mismo, me tuvo que pedirlo cuando Izuku ya lo estaba inundando de caricias.
— Últimamente te ves muy cansado, cariño — dijo Deku besando el cuello de su Omega. —Te tengo algo preparado para ti hoy.
—¿Algo?
Izuku solo sonrío y Katsuki tuvo que esperar hasta anoche para saber que tenía su Alfa preparado para él. El pecoso le había dicho a su esposo se vistiera como él quisiera, a lo que Katsuki entendió que la sorpresa iba a ser grande.
Izuku dejó a Zuzu dormido en su cuna durmiendo bien arropado y acurrucado, le puso una cámara para vigilarlo con su reloj digital. En el momento que Kacchan entró a bañarse aprovechó para vestirse.
Quería verse atractivo para su Omega, ellos nunca tuvieron una cita "formal" comúnmente sus citas eran pelear entre ellos o pelear con un villano. Por esa razón, Izuku decidió darle aquella sorpresa, el Alfa se vistió con una camisa de color blanco que le quedaba ajustado al cuerpo provocando que se noten sus músculos y su figura fornida.
Unos pantalones ajustados, sus botas habituales y el reloj de vigilancia en su mano izquierda, por último se peinó sus cabellos hacia atrás. Cuando estuvo listo, desapareció de la habitación para irse al azotea donde tenía todo listo y simplemente se quedó esperando a su Omega.
El cenizo al salir de su ducha, enseguida fue a ver a su cachorro. Sonrió al verlo dormido con la boca abierta y un hilo de baba saliendo de esta —Te pareces a tu padre, monstruito— Katsuki acomodó más al cachorro para que durmiera más tiempo.
Seguido se dispuso a vestirse, se puso un suéter de lana color beige, unos jeans que le regaló Kaminari de los cuales le quedan ajustados y uno simples zapatos, se miró al espejo y supuso que se ve bien. Igualmente no sabía que tramaba Izuku.
salió de su habitación sin antes volver a inspeccionar a Zuzu.
No encontró a Izuku en la casa; así que por último lugar en revisar subió a la azotea. Dónde encontró una mesa con varias velas y comida servida, el Omega frunció su seño confundido, sintió a Izuku detrás de él cosa que lo hizo girar de golpe.
—¿Hicistes todo esto, Izuku?— preguntó el Omega extrañado.
—Si, me di cuenta que tú y yo estamos casados pero nunca tuvimos una cita.
—¿Y las veces en que antes nos encontrábamos en los burdeles no cuentan como citas?— indicó Katsuki cruzando sus brazos indignado, Izuku se sonrojó ferozmente al recordar esos días.
—¡Me refería citas normales, Kacchan!
El Omega cenizo se rió tomando asiento luego de molestarle la vida un poco a su Alfa pero esa tranquilidad no duró mucho cuando el teléfono de Izuku sonó, la alerta de que alguien había caído en una trampa alertó al Alfa y Omega.
Katsuki salió en busca de su cachorro e Izuku voló por los cielos visualizando su territorio y notando dos figuras a lo lejos, estaba listo para atacar con tal de proteger a su familia.
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