UN ENCUENTRO INESPERADO

Doña Elena sonrió. "Me gusta tu determinación, Sofía", dijo. "Vamos a hacer un plan para detener a Marco de una vez por todas".

Alejandro se levantó de la cama. "Vamos a necesitar ayuda", dijo. "No podemos hacerlo solos".

Doña Elena asintió. "Tengo algunos hombres de confianza que pueden ayudarnos", dijo. "Vamos a reunirnos con ellos y hacer un plan".

Sofía se sintió emocionada. "Vamos a hacerlo", dijo. "Vamos a detener a Marco y terminar con esto de una vez por todas".

El plan se puso en marcha. Doña Elena y sus hombres de confianza se reunieron con Alejandro y Sofía en un lugar secreto.

"Tenemos que ser cuidadosos", dijo Doña Elena. "Marco es peligroso y no va a rendirse sin luchar".

Alejandro asintió. "Lo sé", dijo. "Pero tenemos que hacerlo. No podemos dejar que siga lastimando a la gente que amo".

Sofía se sintió orgullosa de Alejandro. "Vamos a hacerlo", dijo. "Vamos a detener a Marco y vivir felices para siempre".

Pero justo cuando pensaban que todo iba a salir bien, recibieron una llamada de Marco.

"¿Creen que pueden detenerme?", dijo Marco con una risa maliciosa. "No tienen idea de lo que soy capaz de hacer".

Marco se rió de nuevo. "Voy a secuestrar a Sofía", dijo. "Y no podrán hacer nada para detenerme".

Alejandro se puso pálido. "No te atrevas", dijo. "No le harás daño".

Marco se rió de nuevo. "Ya es demasiado tarde", dijo. "Mis hombres ya la tienen. Y pronto, ella será mía".

Sofía se sintió aterrorizada. De repente, se encontró rodeada de hombres armados. "¿Qué pasa?", preguntó.

"Vamos, Sofía", dijo uno de los hombres. "Vamos a llevarla con Marco".

Sofía se resistió, pero era demasiado tarde. La llevaron a un lugar desconocido, donde Marco la esperaba.

"Bienvenida, Sofía", dijo Marco con una sonrisa maliciosa. "Ahora eres mía".

Sofía se sintió desesperada. ¿Cómo podía haber permitido que esto sucediera?

Marco se acercó a ella. "Voy a hacer que Alejandro sufra", dijo. "Voy a hacer que se arrepienta de haberse metido conmigo".

Sofía se sintió aterrorizada. ¿Qué iba a hacer Marco con ella?

De repente, escuchó un ruido detrás de Marco. Era Alejandro, con una mirada furiosa en su rostro.

"Suéltala", dijo Alejandro. "Suéltala ahora mismo".

Marco se rió. "No te atrevas", dijo. "Ella es mía ahora".

Marco se lanzó hacia Alejandro con una navaja en la mano. "Te voy a matar", gritó.

Alejandro se defendió, pero Marco era demasiado fuerte. Lo golpeó en el estómago y Alejandro cayó al suelo.

Sofía gritó. "¡No! ¡Déjalo en paz!"

Marco se volvió hacia Sofía. "Ahora eres mía", dijo. "Y te voy a hacer mía a la fuerza".

Sofía se resistió, pero Marco era demasiado fuerte. La arrastró hacia una habitación oscura y la tiró en una cama.

"¡No! ¡Por favor, no!", gritó Sofía.

Marco se rió. "No te preocupes", dijo. "Pronto te gustará".

Y con eso, Marco se lanzó hacia Sofía, dispuesto a hacerla suya a la fuerza.

Alejandro, que había logrado recuperarse del golpe, se lanzó hacia la habitación, decidido a salvar a Sofía.

"¡No! ¡Te mataré!", gritó.

Pero Marco era demasiado fuerte. Lo golpeó de nuevo y Alejandro cayó al suelo, inconsciente.

Sofía se sintió desesperada. Estaba a merced de Marco, y no sabía qué iba a pasar con ella.

Marco se llevó a Sofía lejos, a un lugar donde Alejandro no podría encontrarla fácilmente. La llevó a una cabaña en medio del bosque, rodeada de guardias armados.

Sofía se sintió aterrada. Estaba completamente a merced de Marco, y no sabía qué iba a pasar con ella.

Marco se acercó a ella, con una sonrisa maliciosa en su rostro. "Ahora eres mía", dijo. "Y no te escaparás".

Sofía se resistió, pero Marco era demasiado fuerte. La golpeó y la dejó inconsciente.

Cuando Sofía despertó, estaba en una habitación oscura y fría. No sabía dónde estaba ni qué hora era.

Marco entró en la habitación, con una botella de agua en la mano. "Bebe", dijo. "Necesitas hidratarte".

Sofía bebió, pero no dijo nada. Estaba demasiado asustada.

Marco se sentó a su lado. "No te preocupes", dijo. "Te voy a tratar bien. Eres mía ahora".

Sofía se sintió desesperada. ¿Cómo iba a escapar de este lugar?

Mientras tanto, Alejandro estaba buscando a Sofía por todas partes. Había preguntado a todos sus contactos, pero nadie sabía dónde estaba.

Estaba empezando a perder la esperanza. ¿La encontraría alguna vez?

Marco logró su cometido y estuvo con Sofía a la fuerza. Sofía se sintió destruida, su cuerpo y alma estaban rota. No sabía cómo escapar de ese infierno.

Pero Alejandro no se rindió. Siguió buscando a Sofía por todas partes, hasta que finalmente recibió una pista sobre su paradero.

Se dirigió a la cabaña en medio del bosque, donde Marco tenía a Sofía prisionera. Cuando llegó, vio a Marco con Sofía en sus brazos.

Alejandro se enfureció. "¡Suéltala!", gritó.

Marco se rió. "Nunca", dijo. "Ella es mía ahora".

Alejandro se lanzó hacia Marco, decidido a acabar con él de una vez por todas. Los dos hombres lucharon con fuerza, pero Alejandro era más fuerte.

Finalmente, logró vencer a Marco y lo mató. Sofía estaba libre.

Sofía se lanzó en los brazos de Alejandro, llorando de alegría. "Gracias", dijo. "Gracias por salvarme".

Alejandro la abrazó con fuerza. "Siempre te protegeré", dijo. "Nunca te dejaré sufrir de nuevo".

Sofía se sintió segura en los brazos de Alejandro. Sabía que nunca más estaría en peligro.