“ Together Forever ”

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       •“Maldita sea, no puedo mas”•

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De Repente, escuche un ruido bastante fuerte en el exterior. No me importo, nadie ni nada me iba a sacar de aquí.

Se suponía que hoy teníamos ensayo, tenemos un concierto en menos de dos meses. Maldito Bill.

Pasaron varios minutos y la puerta seguía sin abrirse. Empece a sentirme inquieto, algo no estaba bien. Decidí levantarme y abrir la puerta, pero seguía cerrada.

-Ya me vale, que Rachel se vaya a comer mierda-. Baje las escaleras para salir un rato, aunque no tenía ensayo ese día. Quería despejar mi mente y alejarme de todo el drama con Rachel.

Justo cuando estaba a punto de subirme a mi auto, mi mirada se desvió hacia la ventana de la habitación de Rachel. Algo me llamo la atención y me acerqué un poco para ver más de cerca. Para mi sorpresa, la ventana estaba abierta y las cortinas fuera de su lugar.

Esto no se va a quedar asi.

Narra Rachel

Despues de una larga caminata, finalmente llegamos al estudio de tatuajes. Estaba emocionada y un poco nerviosa por mi primer tatuaje. Bill y Gustav me acompañaban, aunque fueron lados obligados por mi.

-Deberías tatuarte una estrella en la nalga -, Desde que salí de la casa Bill no ha dejado de darme ideas estúpidas para tatuarme.

Mientras esperaba mi turno, Bill y Gustav se sentaron en un sillón cercano. Observe con curiosidad a las personas que se estaban tatuando. Estaba nerviosa, no sabía si esto era lo que realmente quería. Comencé a tener dudas sobre este lugar.

-Bill, ya no quiero hacerlo-, mis piernas comenzaron a temblar al darme cuenta de que casi era mi turno. - No, te preocupes no te dolerá, si quieres puedo tatuarme contigo-, era obvio que Bill no lo hacía por mí, solo quería tatuarse él.

-Rachel Stonem y Bill Kaulitz - llamo el hombre tatuado, parecía tener unos 60 años con una barba larga y canosa y unos enormes agujeros en las orejas. Esto ya no me estaba gustando.

-Aquí- Bill agarro mi brazo y me hizo pararme del sofá.- No, no-, susurré, deseando que la tierra me tragara y me escupiera en la cama. Nunca debí aceptar esto con Bill, los planes con los Kaulitz nunca salen bien.

-Vamos, Rachel no te pongas nerviosa-, dijo Bill mientras me guiaba hacia el tatuador.

-Pero Bill, no estoy segura de querer hacer esto -, Respondí, sintiendo como mis piernas temblaban cada vez mas.

Gustav que también estaba observando la escena, intervino - La que no se tatué, no es una perra empoderada, mueve ese culo y ve a tatuarte.

-Esta bien -, todavía no estaba convencida en lo absoluto. Estaba haciendo esto por Bill, no quería que se sintiera mal por no tatuarme con él.

-¿Y, que diseño te vas a hacer?- Pregunto el señor mientras sacaba sus agujas. - Ay, mierda-, seguía sacando más agujas, algo a lo que le tengo pánico, voy a morir.

-Señor, ¿Para qué son esas agujas? -, mi voz temblaba, este era mi fin, me va a dar un paro cardiaco. ¡Soy muy joven para morir!.

-Para, inyectarte bótox en el culo-, Bill y Gustav se cagaron de risa, pero yo estaba enojada. ¿Qué le pasaba a este viejo repugnante?.

Mientras seguía sacando sus productos y materiales, yo intentaba mantener la calma, a medida que se acercaba con la aguja, corazón latía con fuerza. Cerré mis ojos y, trate de pensar en algo positivo.

-Piensa en alguien especial, piensa en algo especial-, me susurré a mi misma. Mi mente pasó recuerdos de Tom ¿Pero por qué pensaba en él?, ¿Por qué estaba en mi mente?.

-¿Estás lista? -, pregunto el tatuador, con una sonrisa maliciosa en su rostro arrugado.

Trague saliva, y asentí con determinación.

El tatuador comenzó a dibujar el diseño en mi piel. Sentía dolor y cosquilleo mientras la aguja se movía sobre mi piel. Cerré mis puños con fuerza y apreté mis dientes para soportar el dolor.

-¡CARAJO!- Grite, comencé a moverme en la silla del tatuador, me dolía hasta el alma, sentía que la aguja me penetraba en el hueso, no más.

Mientras tanto Gustav y Bill seguían riendo a carcajadas. ¿Cómo podían encontrar esto tan divertido?.

-¿Quieres que te traigamos a Tom para que te calme?-, dijo Gustav mientras él y Bill golpeaban la mesa riéndose, no sé por qué los invite conmigo.

- Si no te quedas quieta, me tocara clavarte esta aguja -, dijo el tatuador sin la mínima empatia. ¡OCUPO AYUDA!.

Despues de unos minutos interminables, el tatuador finalmente terminó. Mire hacia abajo y mire el resultado, un pequeño símbolo en mi muñeca.

El tatuador me mostro un espejo para que pudiera verlo mejor. Aunque todavía me dolía un poco, tambien experimenté una sensación extraña sensación de satisfacción. Ahora me veia como una peligrosa que se roba el dinero.

Bill y Gustav se acercaron para verlo de cerca. Aunque todavia se reían, Bill agarro mi brazo con fuerza para ver mi tatuaje.

-Son cien dolares.

-Los paga Bill.

Ni loca iba a pagar por un tatuaje, Bill fue el que insistió, el paga. Bill saco la cartera y le pago obedientemente al tatuador.

Mientras caminaba con Bill y Gustav, despues de salir del estudio de tatuajes, note que algo Parecía fuera de lugar. senti como si alguien nos estuviera observando. Mire a mi alrededor, tratando de identificar cualquier señal de intrusos, pero no había nadie a la vista.

-¿Sienten eso?- pregunte, mirando a Bill y Gustav con preocupación en mi rostro.

Ellos se miraron confundidos, peor antes de que pudiera responder, escuchamos un ruido proveniente de un callejón cercano.

-Los mato si esto es una broma.

-¿Que tipo de broma seria? No tendría sentido - Dijo Bill mientras nos adentraremos en el callejón. Estaba segura que era una broma de Gustav, sus estupidas bromas que no hacen reir a nadie.

Cuando llegamos, y habían dos figuras escondidas detras de un bote de basura.

-¿Que demonios estan haciendo aqui?- exclame, sorprendida de verlos escondidos.

Tom y Georg salieron de su escondite, estos salieron de su escondite, silbando mientras miraban por todos no podemos salir a tomar-¿Que, ahora no podemos salir a tomar un poco de aire?-, respire hondo, tomando la calma.

-Dios, necesito paz - Me di la vuelta y camine saliendo del callejón. Los odio, son las personas mas insoportables del mundo.

Tom se acercó rápidamente y me agarro del brazo, llevándome al auto con una exposición de enojo en su rostro.

-¿Que te pasa por la cabeza, Rachel?- Grito Tom, soltando mi brazo bruscamente una vez que llegamos al auto.

-No es asunto tuyo, Tom. No necesito tu permiso para hacer lo que quiero.- Respondí, tratando de mantener mi voz firme aunque por dentro estaba temblando.

Tom se acercó a mi, mirándome fijamente a los ojos. Su mirada está llena de frustración.

-Vives en mi casa, Rachel. Tienes que respetar ciertas reglas. No puedes hacer simplemente lo que quiera sin consultarmelo primero-, Dijo Tom con su voz llena de frustración.

-Te odio, eres la peor persona que he conocido, nunca debi aceptar trabajar contigo- dije molesta, mientras me acomodaba en el asiento del conductor. Note como Tom se ponía incomodo o mostraba una reacción rara en su rostro.

-Maldita sea, no puedo mas-, Tom me tomo del rostro y me beso apasionadamente. Sus labios se movieron contra los mios con urgencia y deseo, creando una explosión de emociones en mi interior.

Mis manos se aferraron a su espalda, mientras leguas estaban en un baile ardiente, el tiempo parecía haberse detenido, ninguno de los dos queria que este momento acabara. Nos perdimos totalmente, explorando cada rincon de nuestros labios, saboreando el nectar del amor recien descubierto.

Cuando finalmente nos separamos, ambos estábamos sin aliento, mirándonos con ojos llenos de pasion y deseo.

-Te odio tanto.

-Yo te odio mucho mas.

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Autora ~ Esme_Klzz

**HOLA BEBECITOS/AS**.

No soy muy buena describiendo este tipo de escenas, pero se intento.

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