Sofía Y Yo...

José luis...

Otro día perdido, todas las empresas que visite se inventan cualquier pretexto para no contratarme, y los entiendo mi padre es un hombre muy poderoso y si no se hace su voluntad puede hacerles mucho daño.

A mi amigo le encanto el auto, lo único malo es que me ofreció un poco menos de dinero que yo habia pedido, pero no tengo otra opción, el traspaso se hará de inmediato, cuando hay dinero cualquier cosa es posible.

Todo quedo listo, ya no tengo auto, pero el dinero que pagaron por él ya está depositado en mi cuenta, ahora tendré que utilizar transporte público para ir a casa, nunca lo he hecho, pero siempre hay una primera vez, no he podido hablar con Katherine en la tarde, se hizo de noche y Sofía ya debe estar dormida.

Al llegar a casa, veo que aun las luces están encendidas, toco la puerta y abre mi hermosa novia, al verla sonrió y le digo:

-Lo siento amor, se me hizo un poco tarde, tuve un día un poco complicado, como estás, como ha estado la niña-

-Todo estuvo bien, José luis, pasa hace frío, ya mamá está preparando la mesa para la merienda, también necesito hablar contigo sobre la niña- responde Katherine.

-Pasa algo con Sofía- pregunto preocupado.

-No es nada malo, no te preocupes- responde con una sonrisa.

-y mi beso?- pregunto.

Ella se acerca a mí y besa tímidamente mis labios, yo la tomo de la cintura y profundizo el beso.

-Así me gusta que me recibas- le digo entrando a la casa.

Todo estaba listo para la merienda, comimos y hablamos sobre la infancia de Katherine y lo que había vivido con su familia, reímos juntos y pasamos un rato agradable, saben desde la desaparición de mi madre no había sentido tanto calor de hogar, un rato después Juanita y Tatiana se fueron a descansar, Katherine y yo nos quedamos en la sala teníamos mucho de que hablar.

-Como te fue hoy pudiste conseguir trabajo- pregunta Katherine.

-No, la verdad esa opción es imposible, papá cumplió con su palabra, tengo que pensar en una idea para invertir el dinero del auto que ya no es mío- respondo algo triste.

-Lo siento mucho, no te preocupes, yo sé que todo va a salir bien- me responde Katherine acariciando mi rostro.

-Sí, siento que contigo y con Sofía a mi lado todo va a salir bien, sabes aunque han pasado muchas cosas, estoy tranquilo, soy más feliz que antes de que ustedes se volvieran todo para mí- le digo

Katherine sonríe al oír las palabras de José luis, ella siempre lo había visto como su jefe, y como un niño rico que salía con mujeres diferentes cada fin de semana, pero en el fondo de su corazón sabía que existía una versión del que no conocía y que le iba a gustar más.

-José Luis, la niña cumple años en tres días, sabes hoy preparamos unas galletas y se puso triste, al parecer le recordó a su mamá- me dice Katherine.

-No sé que clase de padre soy, ni siquiera le pregunte a mi hija algo tan simple como su cumpleaños- dogo decepcionado.

-No digas eso, mira, hace poco te enteraste de su existencia y has pasado por muchas cosas, ya tendrás tiempo de hablar con ella y preguntarle lo que haga falta- responde Katherine.

-Entonces que puedo hacer- pregunto.

 -Puedes creer que tu hija nunca ha celebrado su cumpleaños, con globos, pastel y todas esas cosas- dice Katherine

-Entonces Sofía tendrá la mejor fiesta de cumpleaños, pero como se hace eso- pregunto

-Ja, ja, ja es en serio, José Luis, no te preocupes, yo me encargo de todo, pero que sea una sorpresa, que te parece- pregunta Katherine.

-Como tú desees amor, que haría yo sin ti- le digo sonriendo.

-Al parecer nada- responde devolviendo la sonrisa.

-Ya hablaste con tu familia de lo nuestro- pregunto.

-Solo mi hermana lo sabe, pronto hablaré con mamá- responde algo tímida.

-Esta bien espero que no les moleste, Ya es tarde-digo mirando mi reloj.

-Si lo es, pero Sofía está dormida, que te parece si mañana la llevo temprano a tu casa y preparamos el desayuno para los tres- propone Katherine.

-Esa es una excelente idea, y si después dejamos a la niña con Juanita y compramos lo que necesitas para la fiesta- pregunto

-Así lo haremos- responde Katherine.

Me despedí de Katherine con muchos besos, si fuera por mí me quedaría con ella, pero aún no es el momento, regrese a casa y me acosté a dormir, estaba tan cansado que caí de inmediato en un profundo sueño.

Al día siguiente, Katherine y Sofía llegaron muy temprano, abrace a mi hija y ella me contó todo lo que había hecho con David el día anterior, sonreía y mucho, Katherine estaba preparando unos pancakes, huevos, fruta picada, café y leche, todo se veía delicioso, comimos los tres juntos y luego fui al baño a organizarme.

-Bueno, hija, hoy pasarás la tarde con Tatiana, Katherine y yo tenemos unas cosas que hacer- le digo a Sofía mientras la cargo

 - Está bien papa, voy a jugar nuevamente con David- dice mi hija muy sonriente.

-Vamos a casa, que ya mis hermanos te esperan- dice Katherine.

Al llegar casa de Katherine, Tatiana y David la recibieron muy bien.

Katherine y yo buscamos un taxi para comprar lo que necesitábamos, ella decidió que la fiesta de Sofía iba a ser de princesas, ya que son sus favoritas.

Katherine estaba tan feliz escogiendo todo, me dijo que la sorpresa seria en mi casa, que Tatiana y David se encargarían de llevar a Sofía, también me dijo que ella misma prepararía el pastel y la comida para la fiesta, yo la miraba con una sonrisa, mi novia quería tanto a mi hija, como si fuera su madre, creo que escogí la mujer perfecta para mi vida.

Están todos invitados al cumpleaños de Sofía. 

Espero que estén disfrutando de esta hermosa novela, estoy atenta a sus comentarios.