El Camino De Una Espada

La caverna seguía igual de silencioso.

Solo se escuchaba el sonido de gotas qué caían.

Akari y Lyra estaban sentadas cerca del rompecabezas mientras se miraban.

Lyra mantenía la mirada fija en la mujer frente a ella, como si aún no pudiera asimilar lo que veía.

—Dijiste que fuiste parte del Imperio fundador. ¿Cierto? —dijo Lyra con calma —Y eras una maga muy reconocida.

—Sí, era la mejor maga del Imperio fundador.

Lyra se puso más seria y juntando sus manos habló.

—Dime ¿Qué hiciste exactamente para seguir con vida? —dijo con tono serio.

—¿A que te refieres?, seguro otra persona de ahí sigue viva —dijo Akari algo confusa por su pregunta

—¿Qué dices?, El Imperio fundador fue destruido por completo. No quedo nada de él, y nadie sabe quien lo hizo.

Akari se puso de pie sobresaltada.

—¡¿Cómo que el Imperio fundador fue destruido?!, acaso nadie sobrevivió —dijo Akari muy desconcertada.

Lyra solo asintió a su pregunta.

—¿No lo sabías? —dijo Lyra más como conclusión que pregunta —dime ¿Qué hiciste todo ese tiempo?

Akari respiro hondo y dio un gran suspiro y trago algo de saliva.

—Mi investigación fue demasiado lejos, veras yo estudie la magia prohibida: Una magia que es capaz de generar energía oscura que destruye todo —Y algo ansiosa continuo —Y los de arriba querían usarlo para la guerra o tortura

Lyra frunció el ceño.

—¿Entonces los traicionaste?

—No —corrigió Akari, con calma — quise cambiar su forma de pensar, pero el ya los había convencido en mi contra —dijo con odio en los ojos.

—¿Quién…?

—Serhem, el rey del Imperio fundador

Lyra parecio impactada con la nueva información que le fue revelada.

—Entonces tome la decisión de borrar todos mis estudios.

—Use un hechizo prohibido muy potente el cual debió frenar su obsesión con el poder, pero igual sabía que no funcionaria —dijo con una mirada desolada.

—Esta bien, pero ¿Eso que tiene que ver?

Akari bajó la mirada.

—La criogenia fue un efecto secundario del hechizo y mi cuerpo se congelo en magia y creo que fue por eso que no he envejecido.

Lyra abrió los ojos.

Quería hacer otra pregunta, pero en ese momento…

Una nueva voz resonó por el umbral.

—Qué conversación tan interesante.

Aerion apareció desde la sombra de las escaleras, con esa túnica tan llamativa de mago y du típica mirada de arrogancia.

—Tantas palabras valiosas… y ninguna registrada en los archivos oficiales.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Lyra, con preocupacion evidente en la cara.

Aerion sonrió con arrogancia.

—Sabía que escondias cosa Lyra, pero no algo tan importante —dijo mientras miraba a Lyra por encima del hombro

—Solo seguí mi grandioso instinto y mira que encontrarte con una compañía así de interesante —dijo ahora mirando a Akari.

Pero sus ojos volvieron a Lyra.

—¿Sabes lo que pasaría si informo de esto al consejo? —dijo Aerion mientras se acercaba a Lyra

—Tu carrera como investigadora real… —Aerion acerco su cara más cerca a la de Lyra — Acaba

Lyra apretó los dientes y Aerion se alejó.

《¿Cómo descubrió este lugar?》.

—Y… —intentaba decir Aerion.

Pero antes de que pudiera seguir, Akari se levantó con lentitud.

—Tu eres Aerion. ¿Verdad?

—Oye, tu aléjate o es que quieres usar esa magia que supuestamente controla recuerdos —dijo Aerion ansioso

Lyra abrió mucho los ante esta declaración.

《¿Cuánto a escuchado?》.

—Qué sepas que también soy mago y uno increíble así que no será tan fácil —dijo Aerion con una mirada retadora.

—Qué bajo… para alguien que se hace llamar un genio —dijo con una voz suave pero que sonó como una sentencia.

Aerion alzó una ceja.

—¿Perdón?

Akari dio un paso hacia él, sin alzar la voz.

—¿Acaso un genio no sube por su habilidad o en esta época solo son niños mimados? —dijo Akari sin importarle la cara de Aerion.

—¡¿Qué?! —dijo Aerion enojado, pero sin saber que hacer o decir.

—Si quieres correr con cuentos al consejo, hazlo —concluyó Akari —Pero ten algo claro, tu habilidad no valdrá nada, solo servirás de boca —dijo con tono ahora con todo más serio.

Aerion dio un paso atrás.

Su rostro estaba tenso. Pero se marchó sin responder.

El silencio volvió.

Lyra suspiro lentamente.

—Nunca lo había visto callarse así…

Akari no sonrió, pero su voz fue más cálida.

—Los genios como él son muy fuertes, pero si atacas su orgullo estos son frágiles y yo he conocido a personas peores.

Akari y Lyra se volvieron a sentar, pero Lyra siguia aún impactada por la confrontación con Aerion

El silencio se volvió denso.

Hasta que Lyra, mirando hacia la nada, preguntó en voz baja:

—¿Te arrepientes de algo?

Akari bajó los ojos.

La pregunta due como lanzar una roca que provoco una cara incomoda de Akari.

—Cuando decidí usar el hechizo no, solo pensé que debía parar sus planes.

Lyra se giró, mirándola con atención.

—¿Y ahora?

Akari soltó un suspiro largo.

—Ahora solo puedo pensar en todo lo que perdí por esa decisión —dijo ya casi con lagrimas en los ojos —Pero ahora solo quiero ver a mi familia antes de morir.

Lyra se tensó.

—¿Morir?

Akari asintió, su mirada firme pero sin dramatismo.

—La magia prohibida no destruyó mi cuerpo, pero hizo que ya no pueda absorver magia de manera natural.

—¿Qué quieres decir?

—Ahora solo tengo uno o dos años como mucho antes de irme.

El silencio cayó como un velo espeso.

Lyra la observó, asimilando la gravedad de esas palabras.

—Ya veo y por eso quieres ver a tu familia —concluyó

Akari alzó la vista.

Sus ojos brillaban, no por poder… sino por emoción contenida.

—Sí, quiero ver a mi hija y si es posible a mi nieto, Shiro.

—Poder pasar con ellos el resto de la vida que me queda —dijo con una mirada aunque desolada también reconfortante.

—Así que Shiro, Shiro…

Lyra abrió los ojos, aún más sorprendida.

—¿Shiro Kutogane es tu nieto?

—Sí —dijo Akari, con una leve sonrisa quebrada —Mi hija Auren ella aparentemente tuvo una hermosa bendición

《Me pregunto ¿Cómo fue tu vida Auren?

Lyra bajó la mirada.

—Así que ese Shiro es tu nieto, ya veo… te ayudaré después de todo él es mi benefactor —dijo Lyra con una gran sonrisa dándole extendiendo la mano a Akari.

Akari agarro ducmano y se levantó.

—Tu ayuda será muy bien recibida, te lo agradezco Lyra

Lyra, sin dudar esta vez, apretó los labios y asintió.

—No te preocupes te ayudaré a poder ver a tu nieto —dijo Lyra muy animada —Pero tu hija no se donde estará pues Shiro dijo que nunca conoció a sus padres.

Akari sonrió, una sonrisa silenciosa, agotada… pero sincera.

—Gracias, Lyra, quizá aún no se donde esta mi hija, pero al menos puedo ver a mi nieto gracias a ti

Y mientras un lazo se formaba en la mesa el rompecabezas, relucía como una reliquia.