Que pensarías que hay un mundo donde todos tienen habilidades asombrosas, dónde hay niños con la fuerza de díez hombres o que un simple oficinista tiene la capacidad de mover objetos a su voluntad.
Todos tienen algo que los caracteriza, que los vuelve diferentes al resto o eso sería así si fuera por qué soy el único sin un poder con el que pueda destacar.
Soy ........... Y nací como una persona normal literalmente no vuelo, escupo fuego o me muevo con gran velocidad, solo soy normal.
Se deben de imaginar cómo es vivir en un mundo donde puede hacerte papilla sin mucho esfuerzo, dónde los villanos son el día a día y dónde personas con disfraz salvan el día
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CAPÍTULO 13
Vendetta entró en el edificio, su corazón latiendo con anticipación. La oscuridad lo envolvió, y tuvo que esperar un momento para que sus ojos se adaptaran a la falta de luz.
Mientras esperaba, escuchó un ruido leve que provenía del piso superior. Vendetta se sintió un poco nervioso, pero no se detuvo. Comenzó a subir las escaleras, sus manos aferradas a los dos tubos de metal que llevaba consigo.
Al llegar al piso superior, Vendetta vio una figura sombría que se movía en la oscuridad. Vendetta se acercó más, sus tubos de metal listos para ser utilizados.
"¿Quién eres?", preguntó Vendetta.
La figura sombría se dio la vuelta, y Vendetta vio que era un hombre con un traje negro y una máscara que cubría su rostro.
"Soy un mensajero de La Mano Negra", dijo el hombre. "Y tengo un mensaje para ti, Vendetta".
Vendetta se sintió un poco intrigado. ¿Qué podría querer La Mano Negra con él?
"¿Qué mensaje?", preguntó Vendetta.
El hombre se acercó más a Vendetta, su voz baja y amenazante.
"La Mano Negra te ofrece una oportunidad", dijo. "Puedes unirte a nosotros, y juntos podemos dominar la ciudad".
Vendetta se sintió un poco asqueado. ¿Cómo podían pensar que él se uniría a ellos?
"Nunca", dijo Vendetta. "Nunca me uniré a La Mano Negra".
El hombre se rió, su voz resonando en la oscuridad.
"Entonces, te daremos una demostración de nuestro poder", dijo. "Y verás que no tienes opción".
De repente, se escuchó un ruido fuerte que provenía de la planta baja. Vendetta se sintió un poco nervioso, y se dio la vuelta para ver qué estaba sucediendo.
Pero cuando se dio la vuelta, vio que el hombre había desaparecido. En su lugar, había varios hombres de La Mano Negra que se movían en la oscuridad.
Vendetta se sintió un poco asustado. ¿Qué estaba sucediendo?
De repente, uno de los hombres de La Mano Negra se acercó a él.
"Eres un problema para nosotros, Vendetta", dijo el hombre. "Y vamos a tener que eliminarte".
Vendetta se sintió un poco nervioso, pero no se rindió. Sabía que tenía que luchar, y que tenía que encontrar una forma de escapar.
Con un movimiento rápido, Vendetta levantó sus tubos de metal y se preparó para defenderse. Los hombres de La Mano Negra se acercaron a él, pero Vendetta estaba listo.
Con un golpe rápido y preciso, Vendetta golpeó a uno de los hombres de La Mano Negra con uno de sus tubos de metal, enviándolo al suelo. Luego, se dio la vuelta y comenzó a correr, intentando encontrar una forma de escapar del edificio.
Pero sabía que no podría escapar por mucho tiempo. La Mano Negra tenía demasiados recursos y demasiados hombres. Vendetta necesitaba un plan, y necesitaba encontrar una forma de detener a La Mano Negra antes de que fuera demasiado tarde.
Mientras corría, Vendetta escuchó el sonido de pasos detrás de él. Sabía que los hombres de La Mano Negra no se rendirían fácilmente. Vendetta necesitaba encontrar una forma de escapar, y rápido.
Con un movimiento rápido, Vendetta se lanzó hacia una puerta que estaba cerca de él. La puerta se abrió con un crujido, y Vendetta se lanzó hacia el exterior del edificio.
Pero sabía que no estaba a salvo. La Mano Negra tenía demasiados recursos y demasiados hombres. Vendetta necesitaba un plan, y necesitaba encontrar una forma de detener a La Mano Negra antes de que fuera demasiado tarde.
Vendetta se lanzó hacia la puerta, pero antes de que pudiera alcanzarla, varios hombres de La Mano Negra lo rodearon. Vendetta se dio la vuelta, listo para defenderse.
El primer hombre de La Mano Negra se acercó a él, intentando golpearlo con un puño. Vendetta esquivó el golpe con facilidad y respondió con un golpe rápido y preciso con uno de sus tubos de metal. El tubo golpeó al hombre en la mandíbula, enviándolo al suelo con un grito de dolor.
El segundo hombre de La Mano Negra se acercó a Vendetta, intentando agarrarlo por detrás. Vendetta se dio la vuelta y golpeó al hombre en la espalda con su otro tubo de metal. El hombre se derrumbó al suelo, gritando de dolor.
El tercer hombre de La Mano Negra se acercó a Vendetta, intentando golpearlo con un cuchillo. Vendetta esquivó el golpe y respondió con un golpe rápido y preciso con su tubo de metal. El tubo golpeó al hombre en la mano, haciéndole soltar el cuchillo.
Pero a pesar de su habilidad y velocidad, Vendetta sabía que no podía mantener esta lucha por mucho tiempo. Los hombres de La Mano Negra eran demasiados, y Vendetta estaba empezando a cansarse.
Uno de los hombres de La Mano Negra se acercó a Vendetta por detrás y lo golpeó con un puño en la espalda. Vendetta se derrumbó al suelo, intentando recuperar el aliento.
Los hombres de La Mano Negra se acercaron a Vendetta, sonriendo y burlándose de él. Vendetta sabía que tenía que hacer algo rápido si quería escapar.
Con un esfuerzo supremo, Vendetta se levantó y se lanzó hacia sus atacantes. Golpeó a uno de los hombres en la cara con su tubo de metal, y luego golpeó a otro en la barriga. Vendetta siguió luchando, intentando abrirse paso a través de la multitud de hombres de La Mano Negra.
Pero a pesar de su valentía y habilidad, Vendetta sabía que no podía mantener esta lucha por mucho tiempo. Los hombres de La Mano Negra eran demasiados, y Vendetta estaba empezando a cansarse.
De repente, Vendetta escuchó un ruido detrás de él. Se dio la vuelta y vio a un hombre que se acercaba a él con un palo de madera en la mano. Vendetta sabía que tenía que actuar rápido si quería escapar.
Con un movimiento rápido, Vendetta golpeó al hombre en la mano con su tubo de metal, haciéndole soltar el palo. Luego, Vendetta se lanzó hacia la puerta y salió corriendo del edificio, intentando escapar de los hombres de La Mano Negra.
