Tercer libro de la saga Lobo.
"En el mundo de la mafia italiana, Emiliano y Efraín, primos y futuros líderes, están destinados a heredar el poder. Sin embargo, su vida de lujo y violencia les deja un vacío que no pueden llenar.
Mientras tanto, en Cartagena Colombia, las gemelas Abigail y Ashley, bailarinas de 23 años, sueñan con encontrar su príncipe azul, inspiradas por el ejemplo de su padre, un hombre íntegro y recto.
Cuando Emiliano y Efraín llegan a Cartagena en busca de pistas que relacionan a una de las gemelas, mencionada por la fallecida Madeleine, no esperan quedar cautivados por el baile y la belleza de las gemelas.
Pero a medida que se enamoran, deben enfrentar los secretos y la violencia de su vida u profesión. ¿Podrán dejar atrás su sed de venganza y encontrar el amor verdadero, o estarán condenados a repetir los errores del pasado?
'Prisioneros de las bailarinas'
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Funeral.
El celular de Efraín no dejaba de sonar mientras se dirigía al encuentro de Emiliano, era la quinta vez que el nombre de Begoña se reflejaba en la pantalla, el aparato murió en su mano, pero maldijo en voz alta cuando se volvió a iluminar.
_ ¡Joder! ¿Qué diablos quieres Begoña? Estoy en algo importante. _ ladró al teléfono.
_ ¡Bebé! _ Gimoteo Begoña mientras lloraba.
Efraín inhaló y exhaló un par de veces para no gritarle un par de groserías.
_ He tenido un accidente, iba bajando las escaleras, me mareé y me he caído, estoy toda maltratada, bebé.
_ Estás en la clínica, supongo.
_ No, te estoy esperando a ti para que me lleves.
_ Dile al chófer que te lleve al área clínica de la mansión, ahí te atenderán, ahora no puedo atenderte estoy muy ocupado...
_ ¿Qué puede ser más importante que tu novia? _ chilló la rubia.
Antes de que siguiera hablando, Efraín cortó la llamada y bloqueo su número para que no jodiera más...
_ ¿A cuántos minutos estamos del punto de encuentro con mi primo? _ le preguntó a Natanael, su hombre de confianza.
_ Cinco minutos, joven.
_ Apresuren, Emiliano me necesita.
Emiliano manejaba a toda velocidad con Madeline en los asientos traseros, la rabia burbujea a en su sangre, tenía un nudo en la garganta del tamaño de un camión, activó los auriculares y le marcó a uno de sus investigadores.
_ Buenas noches, joven Lobo ¿En qué puedo servirle? _ preguntó el investigador a través de la línea telefónica.
_ Quiero todos los vídeos de todas las cámaras de la ciudad que circulen a la dirección que te acabo de enviar, también quiero saber ¿Quién es Abigail? ¿Qué relación tiene con Colombia y Madeleine Bianco?
_ Necesito un apellido, algo más concreto para comenzar con la investigación.
_ Es lo único que hay hasta el momento y quiero una respuesta mañana a primera hora...
_ Joven, pero... _ la llamada fue colgada.
Rápidamente, Emiliano marcó el número de su padre el cual contestó inmediatamente, lo puso al tanto de toda la situación y acordaron encontrarse en la morgue a dónde se dirigía con el cuerpo inerte de Madeleine, por suerte él llevaba guantes negros, así que no había borrado huellas del asesino o los asesinos, algo le decía que esto no lo había hecho una sola persona. Madeleine era una guaradespalda muy bien entrenada y por los golpes que hay en su cara puede notar que hubo enfrentamiento antes del deceso.
No paso mucho tiempo para que todos se reunieran en el lugar indicado, Emiliano le entregó el cuerpo de Madeleine a los forenses.
_ Quiero un informe lo más detallado posible.
_ Lo averiguaremos, sabremos quién y por qué hizo esto. _ le aseguró Maximiliano a su primogénito.
_ Madeleine ¿Tenía pareja sentimental, o algún ex resentido? _ indagó Efraín. _ Podemos empezar por ahí.
_ Ella estaba soltera y su ex vive en California. _ aseguró Emiliano...
...
La iglesia estaba llena de hombres y mujeres elegantes, todos vestidos de negro. El aire estaba cargado de incienso y la luz de las de velas iluminaba el rostro de Madeleine, que yacía en un ataúd de mármol blanco.
La familia Lobo se situó en la primera fila, junto a la familia de Madeleine, siendo Emiliano en estar más cerca. Su rostro era una máscara de dolor y rabia contenida. Efraín se encontraba también a su lado, con una expresión muy parecida a la de su primo.
Madeleine había sido una excelente guardaespaldas y una fiel amiga, ella había sido quien lideró el operativo que no dejó que Wilfred Davis secuestrara a Aurora y a jazmín Lobo.
Gia, lloraba desconsolada en los brazos de su padre, se sentía demasiado culpable por la muerte de su hermana, sus entrañas ardían y su corazón dolía como nunca antes, le había reclamado a Begoña por lo sucedido, pero esta le juró que no se había encontrado con Madeleine, que había tenido un accidente en las escaleras de su departamento y por eso no había podido asistir a la cita, pero Gia no estaba del todo convencida con esa versión, ella estaba dispuesta a descubrir todo y aunque amaba a Begoña, si descubría que ella había matado a su hermana, la mataría con sus propias manos.
Begoña se situó al fondo de la iglesia, observando la escena con una mezcla de nerviosismo y alegría. La atención estaba centrada en el ataúd de Madeleine y el dolor de sus familiares y amigos cercanos, peto desde la distancia, Fátima la detalló, cada día estaba más segura de que la rubia escondía algo y ella estaba a punto de descubrir qué era, su investigador estaba trabajando y pronto le daría resultados.
Todos los guardaespaldas tanto masculinos como femeninos, le brindaban a la difunta el respeto y admiración merecida.
_ ¡La mafia italiana le brindó honor y le da la último adiós un excelente soldado, amiga y jefa! _ Gritan todos los presentes.
Cuando el funeral terminó, Emiliano se acercó al ataúd y depositó una rosa roja sobre el pecho de Madeleine antes de ser sepultada. Luego, se volvió hacia Efraín y le susurró:
_ Tenemos que encontrar al responsable de esto. Madeleine mencionó algo sobre Abigail y Colombia antes de morir. Necesito que me ayudes a investigar. _ Efraín asintió sin dudar.
_ Estoy contigo, primo. Encontraremos al culpable y lo haremos pagar con creces.
La escena se quedó en silencio, con todos los ojos puestos en el último adiós hacía Madeleine Bianco.
La búsqueda de la verdad y la venganza había comenzado y los Lobo no descansarían hasta dar con los responsables de todo.
_ Dígame todo lo referente a su hijo ilegítimo. _ le exigió Emiliano al señor Bianco cuandod salieron del cementerio.
_ Yo solo tengo dos hijas, joven Lobo. _ mintió el hombre.
_ Hoy no tengo mucha paciencia, así que hable de una vez, yo sé que usted tiene un hijo bastardo que vive en Colombia, Madeleine me habló de él y por si no lo sabe Colombia está involucrado en el asesinato de su hija mayor así que hable ahora mismo.
pero tienen de su lado a la suegra...
ahora ver hasta donde las pollas se van a quedar quietas 🤭🤭