NovelToon NovelToon
The Dark Sky: El Trono De Oro

The Dark Sky: El Trono De Oro

Status: Terminada
Genre:Acción / Aventura / Completas / Demonios / Ángeles / Venganza de la protagonista / Viaje a un mundo de fantasía
Popularitas:1.2k
Nilai: 5
nombre de autor: Acxel_Sanz

Después de un año de lo sucedido todo sufrió un cambio. Emily tratará de detener una inminente guerra entre ambos mundos, pero antes tiene que revelar secretos que le dirán quién es en verdad, pero no será la única que buscará respuestas en esta lucha.

NovelToon tiene autorización de Acxel_Sanz para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capítulo 12 — Cazadores y Presas (part1)

Tanto los Templari junto a Emily y Rommel, como Hanabi y sus soldados descansaban asechando; unos la ciudad y otros a sus presas.

Después de lo ocurrido, Hanabi no podía creer que Emily siguiera viva y que aún se acordará de él, algo dentro de nuestro sargento le hacía sentir un cosquilleo peculiar.

Por otra parte Emily no podía sacarse de su cabeza a Hanabi, después de tanto tiempo volvió siendo alguien completamente distinto a la persona de la cual se había enamorado años atrás ¿Qué habrá pasado para que llegara a esto? Se preguntaba.

— ¿Qué ocurrió entre tú y el sargento H? — Cuestionaba Lexa mientras se acercaba a la chica.

— ¿Eh? La verdad... pasaron tantas cosas — Respondió con la mirada ida.

— Se ve que se conocen muy bien — Dijo Lexa con una sonrisa.

— Siendo sinceros... nos conocimos en el colegio, fuimos buenos... Amigos — Dijo con tristeza.

Rommel sólo escuchaba desde un apartado rincón con los ojos cerrados.

— Ya veo... — Respondió Lexa mientras se marchaba.

Emily siguió viendo a la luna, recordando aquellos momentos con Hanabi y en realidad no era la única, y que Hanabi hacia lo mismo desde su campamento.

*Fragmento del pasado*

Ya había pasado tres días desde que Emily trato de contactar a aquella bestia a través de sus sueños. Esa noche ella trataba de dormir, pero no podía ya que aquel rasguño aún impregnado en su brazo le comenzaba a arder y en sus sueños sólo podía ver los brillantes ojos del Nian. Despertó de golpe y sintió un helado frío que recorría toda su piel.

Trataba de recuperar el sueño, pero un sonido la puso alerta; era como si algo pequeño golpeara su ventana. Emily tras oír esto, se levantó y se asomó para toparse a Hanabi que estaba en el patio de su domicilio; él al verla sonrió y ella abrió la ventana con sumo cuidado para después verse en silencio por unos segundos.

— ¿Qué haces aquí? — Cuestionó la joven.

— Algo hizo que viniera — Respondió Hanabi.

Emily salió por su ventana y bajo usando un muro de madera como escalera.

— ¿Cómo que algo te trago aquí? — Dijo ella.

— La verdad... no sé cómo explicarlo —

Volvió el silencio, pero rápidamente se rompió por un fuerte rugido que hizo eco por toda la zona. Emily y Hanabi se pusieron alertas y aquel rasguño empezó a doler cada vez más.

— ¿Estás bien? — Cuestionó Hanabi tras ver a Emily caer.

— Sí, sólo que... mi brazo duele — Respondió con dificultad por el dolor.

Hanabi descubrió el brazo de ella para quedar atónitos con lo que vieron; el brazo de Emily era de color negro, más específico, el rasguño que ya no era morado como un moretón, no, sino un negro señal de putrefacción.

— Debemos acabar con esto lo antes posible —. Dijo con seriedad el chico.

— ¿Cómo? —

— Hay que cazar a esa criatura y por lo que veo... ese rasguño alerta cuando está cerca — Dijo Hanabi mientras miraba al brazo de Emily.

Ambos se miraron fijamente, pero otro rugido hizo que sus ojos cambiaran a la dirección de donde salió.

— Hay que ir por él — Mencionó Hanabi.

Hanabi ayudó a levantar a Emily y así ambos se dirigieron al Oeste de la ciudad en una noche solitaria y tranquila.

— ¿Cómo detenemos a la bestia? — Preguntó Emily con intriga.

— Según la página se necesita decoración roja, petardos y platillos y gongs — Respondió un Hanabi pensativo.

— Son las 2 de la mañana ¿Dónde vamos a encontrar todo eso? — Volvió a cuestionar la joven.

— Los petardos sé donde conseguirlos y los platillos los podemos conseguir en el colegio —

— ¡Espera! ¿Piensas robarle al colegio? —

— ¿Prefieres que esa cosa te encuentre y te mate? —

Hanabi llevo a Emily a un almacén donde guardaban toneladas de pirotecnia. Entraron por la parte trasera de la fábrica y caminaron hasta el almacén principal.

— Hanabi — Susurro con miedo Emily.

— Tranquila, el almacén es de mi familia y si tomamos unos pocos no se darán cuenta — Dijo sonriente.

Hanabi metió la pirotecnia en una maleta y después camino junto a Emily al otro lado del almacén donde se encontraba un auto algo viejo.

— ¿De quién es? — Dijo ella.

— Mío — Respondió rápidamente Hanabi.

— ¿Sabes manejar? —

— Sí — Decía mientras buscaba las llaves.

Emily quedó sorprendida ya que Hanabi nunca había mencionado algo sobre su familia o más cosas sobre él, es más, él era muy callado y reservado.

— ¡Listo! — Exclamó cuando hallo las llaves de su auto — Ahora vamos por lo que falta — Agregó.

Después de salir del almacén se dirigieron a su colegio donde al llegar sin dudar entraron por la ventana del pasillo principal. Una vez dentro caminaron rumbo al salón de música.

— Hanabi, no creo que sea lo correcto — Decía Emily con una voz tierna.

— Sé que está mal, pero no tenemos opción — Respondió Hanabi.

— Está bien — Respondió ella aún dudando.

Entraron al salón de música y tomaron algunos platillos de la banda escolar; de la nada Emily grito y tomo su brazo, el rasguño le volvía a doler con más intensidad, la sensación era como si le intentarán arrancar el brazo.

— ¿Estás bien? — Dijo Hanabi con preocupación.

— S-sí — Dijo ella con dolor.

— Ven, debemos irnos — Dijo él mientras tomaba de la mano a Emily.

Salieron como entraron, por la ventana del pasillo principal, se metieron en el auto y de la nada la temperatura bajo a tal punto que el parabrisas empezaba a mostrar escarcha.

— ¿Estás lista? — Preguntó Hanabi mientras tomaba el frío volante.

— Hagámoslo — Afirmó Emily.

*Fin del fragmento*

— ¿Emily? — Dijo Rommel para sacarla de sus pensamientos.

— ¿Qué ocurre Rommel? — Cuestionó ella.

— Se sincera conmigo... ¿Aún hay algo por él? —

— ¿De qué hablas? — Decía sin entender nada.

— De ti y de ese... —

— ¿Hanabi? Desde hace mucho que no — Respondió ella.

Rommel quedó en silencio y se levantó para después regresar a donde estaba descansando. Emily quedó igual en silencio, pero seguía metida en sus pensamientos.

1
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play