El Alfa Caído

Capitulo XII: Liderando Batallas

Estábamos en el campo de entrenamiento. En un entrenamiento para calentar el cuerpo, las habilidades del chico habían mejorado bastante y yo estaba impresionado por sus movimientos

— ¡Oh vaya! ¿Y está linda sorpresa? El líder desea que liberemos tensión antes de la batalla de esta noche — Yo me detengo al igual que Sam, este se pone al frente de mi en modo protector al igual que un alfa que venía con nosotros como guardian

Sam: Están delante del segundo al mando de la tribu Escarlata deben tener más respeto — Dice serio mientras sostiene su lanza fuertemente, él tiene cierta fobia a las feromonas si alguno de esto suelta un poco mi amigo se le acabará la valentía

— Jajaja líder ¿Ese Omega? — Dice señalandome con el dedo despectivamente

Aeris: ¿Que pasa? Te molesta que un Omega tenga un puesto mejor que el tuyo. No me digas mi posición te hace sentir inferior — Digo con una pequeña sonrisa — pobre bebé anda y llorale a tu líder

Iván: Mierda van a pelear con tú Omega ¿No harás nada? — Viendo de lejos

Caelum: ¿No le dijiste lo que te avise?

Iván: Claro que lo hice, Pero si ese chico me habla como lo hizo conmigo los alfas no se quedarán quieto y harán lo que sea para defender su honor

Caelum: Bueno ya no es mi problema. Yo te avise que no se metan con ellos — Dice fumando su tabaco

— Yo te daré un lección para que conozcan tu lugar maldit* Omega — Sonríe ampliamente al ver cómo se lanza hacia mi, yo aparte suavemente a Sam y tome la lanza con la que minutos antes estaba entrenando

El alfa se lanzo contra mí, yo moví mi lanza haciendo que tropezara y hace tenerlo contra el suelo, la punta de mi lanza se colocó en su cuello. Vi como otro de los alfas que andaban con él venia corriendo hacia donde estaba. Lo golpeó con el palo haciendo que se doble del dolor sujetando su estómago, la lanza silbo en el aire fuertemente cuando golpee la costilla de ese alfa haciendo que cayera lejos

El último no se quedó de mano cruzada y también vino con todo hacia mi, yo sonrió y pongo la punta de mi lanza en el suelo para luego brincar mientras me sostengo de ella dándole una patada en todo el rostro a ese alfa arrogante el cual cayó para atrás con ese simple golpe

Aeris: Inútiles y así es que desean desafiarme? Tuvieron que ser tres con un omega? deben de sentir vergüenza por ser tan patéticos — Escupo molesto en la espalda al primer tipo que tenía una gran boca y no duró ni dos minutos peleando — Bastardos arrogantes

Iván: ¿Que carajo?

Caelum: Hizo que no uso su navaja — Dice orgulloso — Si lo hubiera hecho tendrías tres alfas menos en tu tribu — Arroja el tabaco y se acerca a Aeris — ¿Ya entrenaste?

Aeris: Si fue divertido — Dice con una sonrisa mientras deja que Caelum limpie el sudor de su frente — ¿Viste a los idiotas esos como me hablaron?

Caelum: Lo ví — Dice pasando el pañuelo por mi frente y luego mi cuello — También ví como acabaste con ellos

Iván: Maldición vayan a una habitación

Aeris: Aún no nos has dado una — Digo serio, veo como me ve dudando si hablo en serio o solo lo estoy molestando — ¿Y?

Iván: Ah le diré a alguien que los guíe — Veo como llama a alguien y este nos guía hasta donde nos quedaríamos — ¡Vaya! Parece un perro muy bien domesticado — Dice viendo como Caelum sigue a Aeris dócilmente, ve a Sam — ¿Tu también sabes pelear así?

Sam: Por supuesto, no soy tan bueno como nuestro líder, pero tengo buena habilidad. Todos los omegas de nuestra tribu han entrenado, además que es una tribu libre de diferencias de posición. Usted debería de enseñarle eso a los suyos — Dice serio para luego irse hacia donde está la mano derecha de Caelum y los demás hombres que vinieron con él

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La luna estaba en su punto más alto, estábamos todos preparados para cuando atacarán y tal como pensé él enemigo vino por el área noroeste

Empezamos a atacar, destrozando a todos aquellos y encerrando a muchos, teníamos que saber más sobre la tribu que se quería apoderar de las otras y saber su motivo

Una vez que terminamos iba a ir a dónde llevaron a los que encerraron, deseaba saber quién estaba utilizando mi nombre para hacer estás cosas

Caelum: ¿A dónde vas? — Dice sujetando mi mano al ver a dónde me dirigía

Aeris: Solo voy a interrogar los — Veo como duda para luego asentir, suelta mi mano y yo bajo hasta el calabozo

Iván: ¿Lo dejaras solo en ese lugar? Nosotros no encadenamos a los detenidos

— Caelum al escuchar eso baja para poder asegurar que Aeris este bien

Aeris: Pueden salir yo me encargaré de hablar con ellos — Los dos alfas que estaban a cargo de cuidar los calabozos se vieron unos a otros — Fuera — Ellos obedecen al ver mi tono demandante, entro en el lugar y me siento en una vieja silla que estaba allí — ¿Quien los mando?

— En verdad crees que te diremos algo?

Aeris: ¿Por qué utilizan el nombre Raegon si él está muerto? — Veo como se sorprenden por mis palabras

— ¿Cómo sabes eso? — los veo serio esperando respuesta — Su hermano nos ordena utilizar su nombre, desea que su legado se expanda por todos los territorios

Aeris: Kael no haría una cosa como esa — Digo firme, ni hermano es la persona más buena que puede existir en el mundo, era un alfa que deseaba que todos viéramos en paz unos con otros. Su ideología hizo que padre siempre lo hiciera menos — Digan ahora lo que saben o saldrán de aquí vueltos mierda — les informo con mi rostro totalmente serio

— Es la verdad el líder Kael nos ordena tal cosa, desde la muerte de su hermano se volvió alguien que nadie en la tribu reconoce

— Además se revuelca con el Omega que una vez fue de su hermano es el tipo más hipócrita que existe — Yo me levanto y salgo

Lo que dicen debe ser mentira, debo ir personalmente y averiguar que pasa. ¿Cómo una persona puede cambiar su actitud solo por la muerte de su hermano? ¿ O tal vez todo este tiempo solo fingía? Niego ante esa posibilidad, Kael no es así