Feray: Resplandor De La Luna

Mientras terminaba de comer llamé a Yasemin para contarle como me había ido en las citas con los doctores, llevábamos días sin vernos, como era de esperarse, se emocionó demás cuando le conté cómo eran físicamente.

📱 por favor, llévame a tus citas, tengo que verlos con mis propios ojos, los tuyos ya se deleitaron con esas preciosuras, y no te vayas a negar por qué me enojo contigo -- me amenazó.

📱 Creo que la abstinencia te está comenzando a afectar -- me burlé y ella bufó.

📱 ya estás advertida, me tienes que llevar -- yo terminé por aceptar.

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Ya había pasado un mes, tuve mi primera sesión con la psicóloga, aunque solo he ido una sola vez, pude notar el cambio, me siento un poco más liviana y la culpa se ha alejado un poco de mis pensamientos, la psicóloga me pidió tener un día conmigo misma, me dio varias opciones, entre esas, ir sola a un lago apreciar el paisaje y comer algo a la orilla, también me dio la opción de ir a un spa, tomar un paquete todo incluido o ir de compras, yo opté por ir a apreciar la naturaleza, los paisajes, en Estambul son hermosos.

Ese día mi mamá me preparó todo un banquete, me senté y alimenté los patos, también me di una pequeña siesta, luego leí un libro, hasta que mi corazón recibió la paz que ese lugar me estaba ofreciendo.

Todo esto me sirvió, ya que estos días íbamos a estar en la prueba del vestido para mí supuesta boda y con la elección de las decoraciones, debo actuar lo más convincente posible, Khan ha estado muy pendiente de mí últimamente y es realmente extraño, le pregunté a Emir si sabía algo sobre ellos, y él me comentó que él va todos los días al consultorio y salen juntos a almorzar, entonces no hay ningún cambio.

Todos los días le pido a Alá que me dé fuerza y fortaleza para aguantar los meses que faltan, a veces me da ansiedad de tener que soportar todo esto, pero como me dijo mi padre "una vez que empieces algo, no te detengas hasta lograr tu objetivo" y eso me ha dado la motivación que necesito para seguir con esto, incluso pedí mis vacaciones en la tienda.

- ¡Hija! ¡Khan está aquí, baja!-- mi madre exclamó desde el primer piso, yo ya estaba lista, así que bajé a su encuentro.

- Hola cariño -- me saludó.

- Hola, ¿te hice esperar mucho?-- le pregunté.

- No importa, yo te esperaría el tiempo que fuera necesario, vales cada milésima de segundo -- me obligué a mostrarle una sonrisa tierna.

- ¡ooh, cariño, por eso te amo!-- le dije y luego me dirigí a mi madre-- nos vemos más tarde--

Mi madre se despidió y me dió la bendición, Khan me abrió la puerta de su auto, nos subimos y nos fuimos.

Llegamos a una hermosa tienda de lujo, los vestidos de novia que había en el mostrador, eran de ensueño, una lágrima se asomó en la esquina de mi ojo, el la alcanzó a ver y me abrazó.

- Serás la novia más hermosa -- comentó y yo sonreí, pero no emití ninguna palabra.

Al entrar, nos atendió una señora muy amable, ella me llevó a la parte de atrás, allí me hizo elegir las opciones que quería para mí vestido, me puse el primero que elegí, me miré en el espejo, pero no me sentía cómoda, estaba realmente desesperada por salir de ahí, el reflejo que veía,no me estaba definiendo, se supone que planear tu boda debe ser una de las mejores cosas que puedes vivir y disfrutar, pero no es así, se que todo esto es una farsa, pero aun así no deja de lastimarme.

-¿Te gusta?-- preguntó la amable señora y yo negué.

- ¿Puedo ser sincera con usted, y confiar en que no dirá nada?-- ella abrió sus grandes ojos, pero finalmente asintió.

- Claro que sí, puede confiar en mi -- yo sonreí.

- Sucede que el hombre que está allá afuera, ya está casado y yo no lo sabía, pero el no sabe que yo ya lo descubrí, todo ésto es una farsa, yo no me pienso casar con alguien asi, quiero darle una lección, pero me siento mal usando un vestido blanco para esta ocasión, ¿podría usar un vestido negro? Aunque el no lo va a saber-- la señora sonrió y asintió.

- claro que sí, espérame aquí, tengo el perfecto para eso-- corrió hacia la bodega, y varios minutos después llegó con hermoso vestido negro en sus manos.

Me lo entregó y luego ayudo a ponermelo.

- Es perfecto -- dije en voz alta.

- y a ti se te ve hermoso -- comentó la mujer.

- voy a elegir este, me queda un poco suelto, pero te voy a pedir que lo dejes así, la boda es en mes y medio y estoy en embarazo, quizás mi vientre crezca un poco de aquí a la fecha--

- Claro que sí, le haremos algunos retoques, pero conservaremos este tamaño -- yo le agradecí.

Salí de la parte de atrás, Khan estaba sentado revisando su celular.

- Listo, ya elegí mi vestido -- el me miró sorprendido.

- Wow, eso fue súper rápido --

- Si, ahora toca pagar -- señalé el mostrador, el saco de su blazer la cartera, se acercó a la caja y pagó el valor, de mi bolsillo no iba a salir ni una Lira

- Listo, ¿vamos por un helado?--

- Si, tengo ganas de probar el de te matcha -- comenté.

- Lo que mi prometida quiera -- habló coquetamente.

- Entonces vamos -- lo tomé de la mano para hacerlo caminar en dirección a la heladería.

Ya con nuestros helados, nos fuimos a caminar, un silencio incómodo se instaló entre nosotros, así que decidí cortarlo haciendo preguntas.

- ¿Cuándo vamos a ir a ver la nueva casa?-- el me miró y ví la dificultad que tuvo, para tragar el helado que tenía en su boca.

-¿ya? ¿no podemos esperar un tiempo más?-- preguntó.

-¿un tiempo más? Cariño, por si se te olvidó, estoy embarazada, si no lo hacemos ahora, no lo podremos hacer después, y la fecha de la boda ya se está aproximando, ¿o es que acaso planeas que vivamos con mis padres? O mejor aún ¿con los tuyos? No lo creo-- el negó.

- No, claro que no, entonces comenzaré a buscar opciones para que tú elijas, ¿que te parece si la ponemos a tu nombre? -- me ofreció y algo dentro de mi se iluminó.

Se que después de hacer lo que estoy planeando, este hombre quizás desaparezca de mi vida, de una u otra forma, tengo que asegurarle algo a mi hijo, y quizás lo pueda tomar como compensación por todos los daños causados.

- ¿Estás seguro? Lo justo sería que si tú la compras, quedé a tu nombre -- utilice la psicología inversa.

- No, tu serás mi esposa, lo mío es tuyo-- habló con seguridad.