Solías ver a Demian caminar de su casa al trabajo, todos los días de Lunes a Viernes. Por las tardes iba a la esquina Bartonelli a tocar, a veces era en el piano del Sr. Dominic, en otras ocasiones era la guitarra y rara vez el saxofón. Para finalizar su día, iba a la cafetería Dellahaira, pedía un par de tazas de café y lo perdías de vista entre los callejones. Los fines de semana nadie lo encontraba, la gente murmuraba que iba al Acantilado de Saeinz, otros lo veían en el parque Hutchison practicando arquería o corriendo por los alrededores, mientras que otros decían verlo entrar a la casa de la familia De Loughrey.
Cabot no lo sabía pero a la gente le gustaba hablar de él, porque para los ojos de Palacio, él era un héroe, el primer ser en comprobar que la felicidad podía ser aplicada y que él vencería al misterioso hombre y a su melodía. Y es que en realidad estaba lejos de serlo.
Demian y su presencia imponían, su presencia solía causar más de un suspiro a cualquiera y su extendido vocabulario dejaba callado a aquellos que tenían el placer de entablar una plática con él.
Así fue como Eowyn fue maravillada por tal castaño y sus preciosos ojos como ella les decía. Para Eowyn, Demian tenía mucho en la cabeza: "Pareciera que con el simple hecho de mirarlo a los ojos, te hablara". Decía: "Sus preciosos ojos transmiten más que su extendido dialecto".
Al contrario de su hermana menor Evolet, Eowyn le gustaba teñirse el cabello de colores, a veces la veías pelinegra, otro día la veías pelirroja, algunos meses lo traía de colores extravagantes pero su favorito era el rubio cenizo, además que sus ojos cafés hacían juego. Su personalidad era risueña y extrovertida. Muchos juraron que Evolet y Eowyn no tenían parentesco de lo diferentes que eran.
Tal vez por todo lo anterior, su trabajo como enfermera en el CRP le salía tan bien y nadie supo si en realidad esa era la razón por la cual Demian terminó enamorado de ella.
(---)
Toco un par de veces la puerta de Demian, mientras observo la invitación de mi hermana. La culpa vuelve nuevamente a mi cabeza y todo lo que el saxofonista me hizo recordar de aquellos días. Aún me pregunto como mi hermana duerme tranquila y aún busca invitarlo a su boda.
-Hola, Ev.-La voz grave y ronca de Demian interrumpe mis pensamientos.
-Hola, Demian.-le sonrío un poco pero evito su mirada, sé que algún día te terminarás enterando, Demian no sabes cuánto lo siento.
-¿Todo bien? ¿Necesitas algo?- atrapa mi mirada con su sonrisa tan característica.
-Sí, quería invitarte a la boda de mi hermana.-le extiendo con cuidado la invitación.
-¿Tu hermana? No sabía que tenías hermanas.-toma el pedazo de papel y lo abre leyendo su contenido.- ¿Eowyn y Ander?-de pronto frunce el ceño y se toca la cabeza.
-¿Demian?-me acerco preocupada.-¿Estás bien?-Pongo mis manos en sus mejillas para verificar.
-Eh, sí.-me aparta.- Sólo se me hizo conocido el nombre de tu hermana, es todo.-Trago saliva nerviosa e intento desviar su atención.
-¿Me acompañaras?.-me mira confundido.
-A la boda.-señaló el sobre.- Sé que mi familia no te cae bien pero me gustaría que fueras, necesito a alguien conocido y apoyo moral para ver a mi familia.- le sonrío nuevamente aunque aún con los nervios de punta y automáticamente juego con la cadenita de mi muñeca.
-Claro, si quieres paso por ti y llegamos juntos, emm.- Demian se toca nuevamente la cabeza y toma aire.- ¿Sabes? Me duele la cabeza, nos ponemos de acuerdo mañana, ¿sí?-me regresa la invitación bruscamente, no me da tiempo de despedirme cuando cierra la puerta en mis narices.
Miro hacia el edificio de gestión de Χαρά y el laboratorio. Sabía que algún día ibas a saber la verdad, pero no sabía que iba a ser tan pronto.
(---)
Me tomo un par de pastillas para el dolor de cabeza aún pensativo respecto a la invitación y el nombre de "Eowyn", ¿Por qué se me hace tan conocido? Veo mi cicatriz y de paso los vidrios rotos del frasco de Χαρά que no había recogido. Mierda, ya no tengo dosis para el resto del mes, si alguien se entera pueden mandarme al CRP otra vez. No creo que suceda nada si no consumo esta porquería durante unas semanas. Suspiro y me quito la sudadera para limpiar mi desastre.
¿Qué hiciste conmigo, Χαρά?
(---)
21 de Febrero: La primera dosis
Demian miraba a Evolet con cierto nefasto, ¿Por qué le diría algo así cuándo estaba a punto de ser inyectado con la primera dosis?
Para el chico no era necesario que le recordaran que estaba siendo obligado a ser el primer ser para probar dichoso medicamento, porque sí, él no se había ofrecido, estaba cumpliendo un castigo, estaba pagando una condena.
Las paredes escuchan y las bocas hablan, algunos decían que Demian miró a la hija menor de los De Loughrey con desprecio y rencor, otros decían que ni siquiera la miró. A pesar de las cámaras, nadie supo realmente qué fue lo que Evolet pudo decir o hacer, sólo el mundo sabía que Evolet De Loughrey y Demian Cabot tenían secretos; que algo había en ese par de mundos.
La transmisión se llevó sin ningún percance, a las 11:10 de la mañana, Demian había sido inyectado por Χαρά, la nueva felicidad.
Pero, la famosa dosis, no estaba lista, al menos no para ser probada en seres humanos, ningún palacista lo sabía y nunca se enteraron pero ese mismo día, un par de horas después "El primer hombre feliz" fue internado en el CRP.
(---)
Enero, 46 días antes de Χαρά
Era una noche aparentemente tranquila en Palacio comparado con las noches atrás. Palacio, sobre todo en La Capital, había tenido manifestaciones violentas y descontroladas durante toda la semana, las 24 horas del día, había una larga lista de desaparecidos y los muertos iban aumentando.
Todo esto porque el gobierno cada vez se volvía más autoritario, corrupto y el pueblo se estaba quedando sin recursos, tales como agua o comida. El país fue empeorando como fueron pasando los meses, pasó de ser una gran potencia a irse yendo a la miseria. No era de esperarse que la gente empezara a quejarse y generar polémica.
No obstante, hoy el gobierno exigió toque de queda obligatorio de manera nacional, además que no permitía ningún tipo de ruido como música, fiestas, aglomeraciones, etc, durante esa noche, sin ninguna explicación exacta del porqué. Aquel que se le sorprendiera sería sancionado.
Yo formaba parte del grupo de "insubordinados" ( Según el nombre que nos catalogó el presidente), y esa noche la guardia había quedado bajo mi responsabilidad, pues aunque había toque de queda, aún había ciertos grupos que pretendían un gran movimiento a la mañana siguiente.
Maynard Carey también pertenecía a ese grupo, estaba dándome instrucciones en caso de que algún guardia nacional se acercara mucho a la casa de seguridad.
-Cúbrete bien.-me acomodo el antifaz y la capucha, todos los integrantes tenían que cubrirse de esta forma para esconder nuestra identidad.- ¿Alguna duda, Demian?.-negué seguro repitiendo mentalmente las instrucciones.- Bien, llámame cualquier cosa, ¿Seguro que no quieres guardar eso?.-señala el estuche de mi saxofón.
-No, está bien, no pesa de cualquier forma.- Según yo cumpliría con la guardia sin problemas e iría a mi casa, tal vez por eso me confíe a no dejarle mi instrumento a Carey. El chico de cabellos chinos asintió y entró sin más a la casa, así yo inicié la patrullar el perímetro.
Ya para las tres de la madrugada, no se veía ningún hombre vigilando en la zona, sin embargo el aburrimiento me estaba consumiendo. Sin pensarlo saqué el saxofón y una libreta estilo pentagrama algo vieja pero que siempre llevaba conmigo.
Todo comenzó con un par de notas e inclusive espere diez minutos por si había algún movimiento. Nada, silencio absoluto, por eso me motivé a seguir.
Abrí la libreta en la canción que había escrito unas noches antes cuando nos escondimos el día de la masacre. Nos buscaban y nos mantuvimos en la casa de seguridad una semana entera. Hay veces que cualquier distracción llena esa impotencia. Mire las hojas con nostalgia, esta se convirtió en adrenalina y comencé a tocar.
Era una canción llena de dolor, empecé a caminar hasta apoyarme en uno de los postes de luz de la esquina Bartonelli. Estaba sumergido en la inspiración, en la ira, en mi melancolía. Fue una experiencia llena de emociones que finalizó con amor y con ganas de gritar para sacar todo esta presión en mi pecho.
De pronto, la gente, vecinos se asomaron a la ventana aplaudiendo, como si fuera un himno o una señal de lucha empezaron a gritar todos sus ganas de lucha. Cuando en realidad sólo era un simple desahogo pero en ese momento me deje llevar, fluí con todo ese caos. Bailé con él.
-¡Así se hace saxofonista!.-Un hombre gritó desde lejos.- El enmascarado toca por Palacio.
No lo supe en ese momento pero no sabía que me había vuelto una imagen anónima de lucha. Para mí sólo era el momento y la alabanza de aplausos que Palacio podía dar en medio de todo el caos.
...****************...
Canción de inspiración:
"Writing's on the Wall.- Sam Smith
Instagram: @Liristories
Facebook: @Liristories
Spotify: La melodía de una melancolía - Playlist
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 68 Episodes
Comments